30. VIAJE AL CENTRO DE MI ALMA
Me encanta viajar en tren. Precisamente esta tarde volviendo a casa, he disfrutado de uno de los viajes más hermosos. Ha sido un traqueteo especial, emotivo y diferente. Esta noche te cuento que he viajado a mis relatos y que cada parada era un título nuevo. He vuelto a leer esos textos de no más de 200 palabras inspirados cada uno en un lema y me han parecido tan bellos, originales y tan olvidados en mi memoria. Entonces me he prometido a mí misma que en este nuevo año retomaré el arte de escribir porque no es justo privar del placer de leer al resto del mundo, porque no es responsable desaprovechar el talento, porque no es inteligente abandonar lo que se te da bien. A veces me pregunto por qué lo dejé. Todo induce a pensar que pequé de pereza. Si ustedes me lo permiten queridos entecianos, con esta modestia que me caracteriza, quisiera volver a esta casa y revivir el reto de intentar construir un puente lleno de letras y signos de puntuación que consiga llevarme al centro de sus almas entecianas.
La escritura tiene mucha relación con el alma, en el sentido de que trata de sacar a la luz la mejor esencia de nosotros mismos para que, a su vez, llegue a otros. Formar parte de Esta noche te cuento significa leer, escribir y disfrutar. Los que tenemos el gusanillo de todo ello no podemos dejar de hacerlo durante demasiado tiempo, con independencia de que cada uno tenga sus ritmos y circunstancias, porque las existencias son complejas, a veces demasiado.
Es una gran noticia que, haciendo bueno el lema de «año nuevo, vida nueva», hayas retornado a este querido blog, en el que siempre has aportado buenas historias, como ésta, que definen muy bien el espíritu que aquí se respira.
Un abrazo, Estíbaliz
Bien retornada, Estíbaliz, a esta tu casa. Un relato introspectivo que también debes releer cada vez que te ataque la pereza. Seguro que la vences.
Besos.
Bravo, Estibaliz. Bienvenida de nuevo.
Un abrazo