434. EN EL BOSQUE SIN SALIDA (minicuento a cuatro manos), de Orang Pendek y Perenquén
Si en medio del bosque te encuentras una pitillera metálica con tu nombre, y tiene un pendrive dentro, se genera una inquietud repentina, proporcional a la superficie de bosque que te separa de tu ordenador. Durante unos instantes dudé si continuar con mi caminata o regresar al aparcamiento, donde tenía el portátil.
Cuando volví al coche encontré la puerta abierta, alguien se había llevado mi ordenador; sobre el salpicadero había una nota: “No salgas del bosque en una semana o la información que contiene el pendrive será pública”.
Tenía que darme prisa, estaba anocheciendo y necesitaba encontrar cobijo para pasar la noche en el bosque.
pero, pero, pero, pero… ¡qué relato tan inquietante! ja ja ja, sois la leche… se nota la mano del maestro Pendek, la izquierda exactamente