392. EL BOSQUE DE LA MEMORIA, de Zorro de Plata
En el bosque de la memoria cada tronco, cada rama y cada hoja es un recuerdo. Lejos escuchas los juegos y canciones de la infancia. El musgo puede oler a mamá, las rocas pueden sentirse ásperas como la barba de papá. El pétalo de una flor es suave como la piel del primer amor. Cortas un árbol para ver si los recuerdos desaparecen, pero el árbol cae y los recuerdos siguen allí. Prendes fuego a las hojas secas que yacen en el suelo. Lejos de quemarse, éstas reverdecen; son las memorias tristes, patéticas y horribles que flotan para volver a ser parte de la copa de los árboles. Y es que en el bosque de la memoria todo es un recuerdo, si tratas de deshacerte de uno reverdece y si buscas debajo de una roca puedes hallar alguno que creías olvidado.
Qué verdad esa de que si tratáis de olvidar de algo más lo recordaréis. Todo una poesía, muy bello y cierto.
Estimado amigo Zorro de Plata:
Primero te diré que leí tus cuentos y, con toda sinceridad, me han encantado. Se nota que eres un poeta en potencia. Te deseo siempre lo mejor.
Mi cuento “El bosque de la felicidad”, aunque te va a parecer absurdo, es una verdadera historia de un amigo atleta que se machacó literalmente con la moto. Tuvo que quedarse tres meses en el hospital. Claro, puse en mi cuento cosas imaginarias para decorarlo. Pero la luz cegadora, un mundo lleno de flores, la gente vestida de blanco y los electroshock son absolutamente reales.
Un saludo, La Secuoya Roja
Gracias querida Secuoya Roja. Es que la realidad es más poética que la ficción. Casos como el de tu cuento ocurren a menudo, esta vida es muy bella y nosotros tratamos de encapsular esa maravilla en nuestro arte. Gracias por tu apreciación.
…Zorro de Plata
Delirante, hipnótico, ilusionante, como estar en un sueño.