218. SUSURRO DE AGUA, de Encina
Era una tarde de verano de mucho calor y cansados de sudar, mis primos y hermanos decidimos irnos al arroyo que corre en el pequeño bosque, cercano a la casa de verano, ya la sola idea de sus verdes árboles y su susurrante agua nos hacia apurar el paso.
Al llegar nos metimos en el agua saltando y salpicándonos.
Yo pronto salí del agua y me fui a recorrer los alrededores, me gusta ver las plantas como se entremezclan entre si y como parecen competir los árboles para alcanzar el sol.
Por ahí andaba cuando descubrí un ejército de hormigas que transportaban, en fila india, trocitos de hojas o ramitas, unas iban cargadas otras venían sin nada, me entretuve un largo rato siguiendo su camino, pero cuando los demás me preguntaron que hacia, volví pronto junto a ellos, no quise decirles lo del camino de hormigas para que no arruinaran el magnifico trabajo que ellas hacían.
Al caer la tarde el paisaje se volvio extraño, ya que por entre los árboles, pasaban los rayos de sol, inundandolo todo de mil colores como si de un calidoscopio se tratara.
Al llegar nos metimos en el agua saltando y salpicándonos.
Yo pronto salí del agua y me fui a recorrer los alrededores, me gusta ver las plantas como se entremezclan entre si y como parecen competir los árboles para alcanzar el sol.
Por ahí andaba cuando descubrí un ejército de hormigas que transportaban, en fila india, trocitos de hojas o ramitas, unas iban cargadas otras venían sin nada, me entretuve un largo rato siguiendo su camino, pero cuando los demás me preguntaron que hacia, volví pronto junto a ellos, no quise decirles lo del camino de hormigas para que no arruinaran el magnifico trabajo que ellas hacían.
Al caer la tarde el paisaje se volvio extraño, ya que por entre los árboles, pasaban los rayos de sol, inundandolo todo de mil colores como si de un calidoscopio se tratara.
tambien me gustó..bo conocia esta veta tuya …aunque es de esperar que la tengas..