63. COLEGAS
Había pasado un día extraordinario, diferente, en escenarios maravillosos, como no lo había sido en mucho tiempo. Estuve con un grupo de personas que nos cautivamos con una actividad que se está convirtiendo en algo más que pasar unos ratos, en parte de nuestras vidas, ocupados en una tarea con la que hacer valer igualmente el tiempo, llenándolas también de paisajes de sueños. Quizá sea un escape, un motivo de satisfacción, hasta también una razón de ser y de existir. Ahora los conozco más y me he dado cuenta de que comparto mucho con ellos, aunque no estemos presencialmente juntos; la tecnología está permitiendo que podamos seguir haciéndolo al menos de forma virtual.
Cuando nuevamente disfrute con el grupo compartiendo mis breves historias, reflexiones, hilvanando palabras después de estrujarme la cabeza con ellas, tendré nuevamente la certeza de que realmente existen y de que habrá más motivo aún para esperar a otro momento. Será probablemente en unos meses, donde llegaré con más ganas de abrazarlos y desear que nunca paremos de agradarnos y distraer nuestras vidas, para hacer del ejercicio de escribir uno todavía más intenso, vivo y solidario.
“Para el grupo de 50 Palabras, aún en la retina y el corazón”
Muchos tuvimos la suerte de coincidir en el grupo mítico de 50 Palabras. Quizá ya no exista, pero aquí seguimos con el mismo espíritu y dando guerra. Gracias a él, muchos nos conocimos y sacamos lo mejor de nosotros mismos.
En estos tiempos extraños la tecnología nos ha mantenido activos, es necesaria y un buen sucedáneo, aunque nada como el contacto humano, que tendrá que volver antes que después.
No sé, físicamente, dónde estás ahora mismo, pero allá donde sea, gracias por este homenaje y felices fiestas, en lo posible.
Un abrazo, Antonio
Hola Ángel, fue bien bonito mientras duró, como se suele decir, y lo sigue siendo en este gran escenario de ENTC. Gracias por tu comentario. Seguimos, que no es poco. Un gran abrazo para ti y para toda la familia ENTC desde Amán. Antonio