Mnstrscp2022-R1-Encuentro5
Los participantes con los alias: TRISTÁN- HERCULES- GILGAMESH
tendrán de plazo hasta el miércoles día 5 de octubre hasta las 23:59 horas de España peninsular para escribir un relato que:
- * nos cuente algo especial de su personaje
- * no exceda de 150 palabras (título no incluido)
- * use, de cualquier forma, sentido (admitimos singular y plurales) la palabra : ESTRELLA (si la pones en mayúsculas al enviar el relato nos ayudas mucho)
Enlace para que los autores envíen el relato AQUI
Para votar (cuando el encuentro esté ya completo) AQUI
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Cuenta la leyenda… de TRISTÁN
Cuenta la leyenda que Tristán, sobrino del Rey de Cornualles (a la sazón caballero de la Mesa Redonda) fue enviado por éste para llevar a su amada Isolda, la bella y rubia Isolda, a su castillo y que “en yendo de regreso el sobrino e Isolda tomaron la pócima del amor bajo un cielo de ESTRELLAS y se enamoraron por siempre jamás”. Luego la leyenda, como todas las leyendas, se va difuminando, toma recovecos sinuosos e inciertos y hoy sabemos, a ciencia cierta, que ni Tristán se llamaba Tristán, ni Isolda se llamaba Isolda (y era morena, por cierto) ni el Rey de Cornualles era caballero de la Mesa redonda (más bien, digamos, un vulgar escribano de la Corte) Ah, y la mesa no era redonda, sino que consta fehacientemente que era rectangular: que lo sepas.
El gran reseteo de GILGAMESH
Del Rey-Sacerdote Lugalbanda y la diosa Ninsun nací yo, ¿bajo qué ESTRELLA? Una que me procuró mucho tiempo libre para preguntarme cosas banales de la vida: Su significado, la inmortalidad, el miedo a la muerte.
Y ¿para qué, si soy un semidios? Como tal, Inanna me pidió ayuda para deshacerse de una serpiente que había en su jardín.
Mato al bicho, ella intenta seducirme pero no me siento atraído por sus encantos. Me odia.
Piensa que soy altivo, orgulloso y manda al salvaje Enkidu para humillarme ¡ja! le venzo y me ayuda a derrotar al Toro del Cielo, otro que tal baila.
Me castigan dando muerte a Enkidu. Colérico desafío a la muerte.
Lo pienso mejor, comienzo mi reseteo. Tras siglos de existencia, acepto mi calidad inmortal y, en las aguas esmeralda de playas tropicales, subsisto a fuerza de talonario, cócteles y mil amigas que me alegran mi eterna existencia.
Tanto amor de HERCULES
Después de varios meses de ruegos su madre por fin accedió a que el pequeño Hércules pasara el fin de semana con su padre, más allá de las ESTRELLAS. El viaje era largo, pero estaba tan feliz que no le preocupaba, ni tampoco el carácter hostil que las malas lenguas le achacaban a Hera, su madrastra. Cuando llegó ya era de noche, así que apenas pudo estar con ellos. Se puso el pijama y se lavó los dientes sin rechistar, quería causar buena impresión. Pero estaba tan nervioso que mojó la cama. Cuando su madrastra se enteró lo mandó de vuelta a casa en plena noche. Por suerte su madre lo esperaba con los brazos abiertos. Se acurrucó a su lado y la abrazó fuerte, tan fuerte, que a la mañana siguiente solo Hércules despertó.