10. La última descarga
El hombre hurga en la caja de cebos por si encuentra alguna lombriz escondida. Ninguna, no hay más que serrín.
Es hora de irse, se dice resignado.
Al recoger el sedal se fija en los nubarrones que se acercan. Quita el anzuelo, mira alrededor y se da cuenta de que está solo en el espigón.
Será por este tiempo de locos, piensa en tanto dobla la caña.
Antes de marcharse, se sienta junto al cubo lleno de peces. Mientras observa como las olas se embrutecen arrojando su furia contra la escollera, se frota las manos, le huelen a una mezcolanza de tripas de pescado y algas que le fascina. Se pasa la lengua por los labios resecos y chupa el salitre que tienen adherido, un escalofrío le eriza la piel. Sonríe.
Cuando cae el primer relámpago en el mar, el hombre agarra el cubo lleno de peces y, con la caña bajo el brazo, camina dando zancadas como una bestia hasta llegar al coche.
Conduce sin pensar en nada. Ni en nadie. Enciende la radio y suena su canción. Se siente como un dios. Emocionado, saca un brazo fuera del vehículo, sin pensar siquiera en el cumulonimbus que tiene encima.
Juan, muchas gracias por tu tiempo para leer con suma atención y por tu comentario (un comentario siempre generoso, ya me gustaría que mi texto estuviera tan bien como dices, yo no lo tengo tan claro, más bien lo contrario jajaja).
¡Wow! El poemario de Los Hongos de Yuggoth, sin duda alguna, comparto contigo esa fascinación.
Abrazo
Un hombre solitario pescando puede llegar a creerse un dios. Para entretener su tiempo hace que unos seres vivos pacíficos caigan en sus redes, solo por puro deporte. A pesar de que el cielo avisa de una posible amenaza, en ningún momento piensa que él pueda ser víctima indefensa frente a una fuerza superior, como los pobres peces a quienes ha privado de la vida por puro capricho.
Un abrazo y suerte, Aurora
Oye me ha encantado esa forma de definir a los peces como seres pacíficos, Ángel. Muchas gracias por comentar tan acertadamente como siempre.
Abrazo
Maravilloso texto Aurora, lleno de potentes imágenes que nos ayudan a conocer al protagonista y prepararnos para el duro desenlace. Felicidades.
Un fuerte abrazo
Un desenlace tan duro como electrizante, le cayó el rayo…
Mil gracias por tu tiempo para leer y comentar, Javi.
Abrazo
Estoy totalmente de acuerdo con F. Javier con que este micro está lleno de imágenes muy potentes y para mí, la más vigorosa es la que me provoca el párrafo donde el pescador se sienta junto al cubo lleno de peces; ha sido brutal como me ha venido el olor de mis paseos por el antiguo puerto pesquero de mi ciudad a pescado, a salitre y a algas. He hecho un viaje en el tiempo a tavés del olfato que me ha despertado leyendo tu micro. Un placer.
Nos leemos.
Isabel, me hace feliz tu comentario. A mí también me encanta el olor de los paseos por el puerto.
Muchas gracias, espero leer tu relato pronto.
Abrazo
Aurora yo he querido ver una venganza de la naturaleza que descargará en breve toda su fuerza de agua y tormenta sobre él y ojalá puedadevolverle la vida a los peces. No tengo nada contra la pesca pero creo que este pescador no ve más allá de su caña. Suerte
Y bien visto, Manuel. Además de agua, descargará el rayo, el último para él.
Mil gracias por tu comentario.
Abrazo
Sí, está claro que la Naturaleza le tiene preparada un cruel venganza para rebajarle al nivel de un simple mortal. Y en este caso la pieza cobrada será él. Enhorabuena, Aurora por este micro tan potente. Un abrazo
Sí, al final es lo que somos frente a la Naturaleza, simples mortales. Mil gracias por tu comentario, me ha mucha ilusión, Gloria.
Abrazo
Hola, Aurora.
Me encanta el clima que has generado para contar esta historia. Se crea esa magia de la escritura que hace que te imagines esa escena en la cabeza e incluso puedas experimentar sensaciones de los protagonistas mentalmente, como esa sequedad en los labios y el regusto del salitre.
Mi más sincera enhorabuena. Cálidos saludos.
Muchas gracias por tu comentario, Ángel.
Me alegra saber que has apreciado ese detalle de los labios resecos y el regusto del salitre.
¡Con ganas de leer pronto tu relato!
Abrazo
Hola Aurora, me ha encantado. Quiero ver solo la satisfacción y la felicidad de este humilde pescador por algo en apariencia tan nimio, pero que le llena tanto …
De verdad, fantástico¡¡¡¡¡
saludos
Igor, muchas gracias por compartir tu sensación tras lectura, me resulta muy enriquecedor.
Abrazo