31. Alma libre
Abro la agenda que la regalé, mientras me pregunto si tiene sentido seguir llamando así a ese amasijo de papeles rasgados, recortes aleatorios, mandalas imposibles y dibujos que no comprendo. Las fechas impresas en la esquina superior derecha apenas se adivinan, enterradas entre pegatinas de caritas sonrientes y flores de mil colores. Y, sabiendo que ya nadie descolocará mis calcetines para esconder una carta de amor entre ellos, ni desordenará las baldas de la nevera para encajar un bizcocho recién horneado, tan deforme como apetitoso, ni me llamará en medio de una importante reunión para regalarme un te quiero, vuelvo a dejarla en la caja que vendrá a recoger mañana, vete tú a saber a qué hora.
El caos de esa mujer, en apariencia tan desordenada, no estaba reñido con su fondo de buenos sentimientos, traducido en detalles. En ello había belleza y autenticidad, que es lo que de verdad cuenta, pero a veces la convivencia no lo soporta todo, y las formas también tienen su importancia.
El personaje de la mujer es un alma libre, no sujeta a convenciones, una forma de vivir queaprisionaba a su pareja, que al final también se convierte en un alma libre.
Un relato interesante y nuy bien construido sobre las relaciones y sus problemas, que corrobora que somos seres que necesitamos la sociabilidad, aunque complejos y, por ello, cambiantes.
Un abrazo y suerte, Sara
Muchas gracias por tu lectura y tu acertada reflexión, Ángel. Un abrazo!
La vida es un cúmulo de pequeños acontecimientos cotidianos, así se cimenta una relación o se deteriora como en tu relato. Dos personas antagónicas que al final se separan. En otros tiempos la pareja tenia que aguantar “hasta que la m…..” por fortuna ya no suele ser así.
Un dibujo de trazo fino y conseguido. En hora buena.
Muchas gracias Rosa, sí, menos mal que lo de aguantar ya forma parte del pasado, al menos aquí… un abrazo!
Ohhhh, qué final más triste. Se nota que aún le quiere pero a veces la vida es así y no queda otra que resignarse… ¿o no?
Podrías escribir una continuación en la que le reconquiste cuando él vaya a recoger esa caja llena de recuerdos compartidos. Para la próxima convocatoria, quizá?
Jejeje, sólo es una idea loca. Me ha encantado Sara, un abrazote.
Muchas gracias Ana María, quién sabe dónde nos llevarán las musas la próxima vez, son taaaan caprichosas, jaja. Un abrazo!
Ay, Sara, qué bonita historia de (des)amor entre dos personas tan diferentes… Confieso que pensaba que la caótica había muerto, así que yo también espero que su reencuentro sea un nuevo inicio.
Un abrazo y suerte.
Muchas gracias Rosalía, quién sabe si esta pareja tendrá otra oportunidad, las musas mandan! Un abrazo gigante
Bonita historia de amor, en la etapa de la despedida o separación, quién sabe si definitiva o no. Me ha gustado mucho el caos que nos muestra el narrador tanto en la agenda como en otros lugares de la casa, imágenes claras y precisas. También ese sentimiento de estar dejando escapar algo muy bello. Un abrazo y mucha suerte
Muchas gracias Jesús, justo estoy tratando de acortar un poco los micros y ser más precisa, así que si te transmite todo eso me doy por más que satisfecha. Un abrazo de vuelta!