103. LA SEMILLA DEL MAL
Nada transcendió de la confesión al obispo que le hizo el sacerdote renegado en su lecho de muerte, pero la persecución iniciada enseguida contra varios ciudadanos, a los que se acusó de practicar la brujería, y lo que se contaba de ellos entre rumores apenas susurrados, confirmó la existencia de una pintura en la que se había utilizado sangre de vírgenes y niños consagrada en misas negras; en ella, decían, se recreaba una mascarada con todos los vicios humanos, tan realista que en el alma de quien la contemplase acabaría germinando la semilla del mal, porque su autor era el mismo Satán. A pesar del celo que puso la Iglesia para buscarla, nunca apareció. Quienes la custodiaban murieron en la hoguera sin revelar dónde se ocultaba, convencidos de que vería la luz en el momento propicio para el que el mundo sucumbiese a su hechizo.
Mucho tiempo después, un pintor encargado de restaurar los frescos de una antigua capilla descubrió, bajo el revoque de yeso de la pared, un mural de tonos rojizos y extravagantes figuras enmascaradas que parecían iniciar una danza. Se imaginó el prestigio que conseguiría cuando su hallazgo fuese conocido. Y decidió colgar una reproducción en Internet.
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Rafa , me gustó mucho este relato y especialmente como lo describes. Por desgracia en la época de la oscuridad se quemaron muchas personas como seguidores de satanás. Pero en realidad los verdaderos seguidores de mal son los mismísimos jueces .Enhorabuena, Sotirios.(Fue seleccionado para publicar un relato mío. El libro se llama “SABOREA LA LOCURA”Lo colgué en mi blog sotiriosmoutsanas.blogspot.com si quieres lo puedes leerlo)
Hola, Sotirios. Me alegra que te dejes ver de vez en cuando por aquí y de que te haya gustado el relato. Tienes mucha razón con lo que comentas sobre esos inquisidores.
Y claro que me pasaré por tu blog para leer el relato sobre la locura. Enhorabuena por la publicación.
Abrazos.
Una explicación mágica sobre el porqué de tantas cosas que estamos padeciendo. Me ha encantado el relato, contado con un ritmo ágil, conserva la intriga hasta el final
Muchas gracias por tu comentario, Paloma. Me alegro de que te haya gustado. Esta será un explicación mágica, pero creo que las razones que podemos encontrar para tanto mal como padecemos son un poco más terrenales.
Un abrazo.
Hola Rafa, este es el típico cuento que a mi me encanta, leyenda, iglesia, maldades varias y regreso al presente. Sin embargo creo, a ver qué opinas, que hay frases muy largas y un poco complicadas como la primera, quizás ganaría más con frases más cortas?
Hum creo que internet realmente hay cosas terriblemente perniciosas la verdad, y más que semillas del mal, son bombas radioactivas.
Hola, Mel. Gracias por pasarte por aquí y dejar tu comentario.Me alegra que lo hayas disfrutado. En cuanto a la frase tan larga te puedo decir que empezó bastante troceada, pero me resultaba un tono muy seco y no conseguía (léase no sabía hacer) que la relación causa – efecto de los hechos pareciera tal: que de la confesión se derivase la persecución, etc. Y una vez solucionado ese problema, al leerla en voz alta, con las comas, no me desagradó. Y así, para dar una estructura interna al relato (pero esto son rollos míos más que nada), decidí utilizar el mismo esquema en el otro párrafo, es decir, una frase larga seguida de otras más cortas. Lo que pasa es que como este es más pequeño se nota menos.
Tomo nota de tus sugerencias. Siempre son bienvenidas. Es bueno aprender a leer con otros ojos.
Abrazos.
Rafa, en tu línea de textos con empaque, factura impecable y esa imaginación tuya que refleja una sensibilidad intelectual cercana a la normalidad, y por eso… cuentas las cosas tan bien por rebuscadas que sean.
Me gusta mucho y ya me estoy preparando porque noto el principio del fin del mundo, miedo me da buscar en San Google por «imágenes».
Un abrazo y mucha suerte aunque te los sueles llevar de calle :))
Muy amable tu comentario, Manuel. Siempre es agradable saber que has dado con la tecla para que te entiendan, aunque sea muy rebuscada la historia.
Y no busques esa reproducción en Google, no la vayamos a liar más de la que nos está cayendo.
Abrazos.
Un relato de leyenda, muy ameno. Me gusta el final, la maldad esparcida de manera viral a través del internet, la tecnología al servicio de Satán. ¡Suerte!
Saludos.
Me temo que Internet, entre cosas, se sirve muy bien para utilizar el mal a su antojo. Gracias por pasarte por aquí y comentar, Beto.
Un abrazo.
Rafa, solo al diablo se le puede ocurrir expandir su obra maléfica por Internet. Este relato apocalíptico da para una novela. Me ha gustado mucho. Abrazos.
Gracias, Salvador. Es que con Internet lo tiene muy sencillo. Todo a un solo clic. Me alegra lo que dices del relato. Quería procurar que fuese muy visual y resumir esa historia en las 200 palabras a las que estamos acostumbrados.
Un abrazo.
En el primer párrafo me ha faltado «pelín» de aire, en algunas frases…, para poder terminarlas 😉 pero eso no quita para que me haya encantado, has tratado un tema que me gusta, y como a Satán no le tengo miedo, serías tan amable de darme el enlace?
Un abrazo
¡Uf, lo siento Rosy! No era mi intención. Ya he tomado nota (puedes ver la respuesta a Mel más arriba, si quieres). Pero me alegra que te haya gustado. En cuanto al enlace, ¡cuánto morbo, eh! Mejor será no tentar a la suerte, digo al diablo.
Un abrazo.
Hola, Rafa.
Una apuesta original y, para mí, muy buena. Me gusta todo el oscurantismo que rodea a estas cosas que custodia la iglesia y encima le metes misas negras y todo… Un cóctel explosivo que a mí me ha gustado.
Un abrazo.
Hola, Towanda. Gracias por pasarte por aquí y por tu comentario. Pues ya ves, una vez metidos en harina, lo de las misas negras vino rodado; casi me lo pedía a gritos el relato, y yo encantado.
Un abrazo.
Juan Pérez, me basta con que a usted le haya gustado el relato. El «exorcista» ya tuvo lo suyo. Y te haré caso: buscaré el Ritual Romano.
¿Y si nos hacemos con el Necronomicon del árabe loco?
Un abrazo.
Una leyenda negra de Satan y su curriculun de actividades maleficas diseminada en la blogosfera, esa pantalla a la que todo l mundo tiene acceso. La maldad está servida.
Hola, Andrea. Internet casi no necesita nada de eso para sembrar el mal, pero mejor no darle ideas a nadie. Gracias por pasarte por pasarte por aquí y comentar.
Abrazos.
El principio me parece acertadamente bíblico, muy profético; me gusta como lo rematas. Un relato inquietante. A mi todas esta temática me gusta, así que te dejo bendecido y te deseo suerte 🙂
Me alegra que te haya gustado, Juan Antonio. Muchas gracias por tus deseos, tus bendiciones (espero que no procedan de misas negras) y por tu comentario.
Abrazos.
Gracias por tu comentario, Ana. Se hace difícil ser original con tantos relatos y casi a fin de mes, así que valoro un montón tu comentario.
Un abrazo.
Una idea muy original, en la que se unen leyendas antiguas con la tecnología más moderna, para que el mal se propague con la mayor rapidez posible. Además, realzas la imagen del carnaval como algo totalmente impío, casi demoníaco. Me ha gustado mucho. Suerte y un saludo.
Gracias por tu comentario, Ángel. La Iglesia ha tenido una dura cruzada contra los bailes, así que ya te puedes imaginar si encima son de máscaras. Aunque aquí no se imaginaba lo que estaba protegiendo sin saberlo.
Abrazos.
Vaya, Internet como transmisor de la semilla negra… Muy interesante.
un saludo
JM
Ya ves, Juan M., parece el lugar idóneo para llegar a mucha gente lo más rápido posible, para bien o para mal. Gracias por pasarte por aquí y comentar.
Un abrazo.
Rafa, me gusta el entramado de tu historia. Supersticiones, brujeria, el mal y el bien…Satán viajando en el tiempo aprovechándose de las nuevas tecnologías, seguro que obtiene réditos.
Muy original e intrigante.
Saludos
Muchas gracias por tu comentario, María Elena. Ahí está esperando su oportunidad para aprovecharse de las nuevas tecnologías, y parece que ya lo tiene preparado para que su estrategia dé sus frutos.
Un abrazo.
Es uno de esos mitos antiguos, con todos los ingredientes clásicos, pero de repente le das un giro actualizado metiendo internet. Muy original.
Suerte y abrazos
Gracias por tus palabras, Anna. Quería mezclar la tradición antigua con las tecnologías modernas para ver qué podía salir y apareció esta mezcla de antiguas leyendas e Internet.
Abrazos.
Buen relato. Más sabe el diablo por viejo que por diablo. Ja,ja,ja.
Abrazos.
Yo creo que sabía ser paciente y esperar su momento. Gracias por pasarte por aquí y comentar, Maria.
Un abrazo.
Brujas, Iglesia, Satán e Internet, una mezcla estupenda para un relato
lleno de misterio. Un placer leerlo. Felicidades y Suerte
Un beso
Me parece estupendo que esta mezcla tan ecléctica te haya gustado, Esther. El placer es mío. Gracias por tus palabras.
Un abrazo.
Se lee muy bien y nos llevas de la mano al infierno. Aplaudo la ocurrencia y forma de plantearla. Suerte.
Ya veo que lo has localizado, Javier. Estaba a punto de pasarme por tu relato para darte el número que no encontrabas. Muchas gracias por tu comentario y por acercarte por aquí.
Un abrazo.
El tema me va y mucho, por eso me gusta como has mezclado mito y realidad en esa primera parte para llevarme a ese final que es muy inquietante donde encajas muy bien ese título. ¡Pobre pintor… !
Mucha suerte
Besitos
Ese pintor ya empezaba a sentir el influjo, en este caso de la vanidad, aunque bien pudiera ser que como artista ya tuviese la suya propia. Gracias por tu comentario, Elysa.
Un abrazo.