SEP167. ÚLTIMA LLAMADA, de Mariano Álvaro
Hoy he vuelto a quedarme absorto mirando la pantalla del móvil fijamente. Quería llamar a un conocido, pero mis dedos se han deslizado torpemente por la pantalla hasta detenerse en tu nombre. He pensado en pulsar el botón verde, pero sabía que no responderías; ni siquiera sé por qué conservo todavía tu número, si sé que nunca volveremos a hablar.
De pronto los recuerdos de nuestro último encuentro han vuelto a golpearme como puños de acero en la boca del estómago. Media hora de discusión arrasando toda una vida juntos. ¿Cómo empezó? Desde entonces no he podido recordarlo; algún asunto banal se fue colando entre nosotros como el veneno de la serpiente se mezcla con la sangre de su víctima hasta acabar con ella.
El sonido melódico del teléfono me ha devuelto a la realidad. Por un momento he sentido un escalofrío; he creído volver a escuchar la voz de tu madre, diciéndome que había perdido a mi mejor amigo en un fatal accidente.
El relato me ha «engañado», pensé que te referías a una pareja rota en todo momento, hasta llegar a la línea final. Me ha tocado mucho porque perdí a una buena amiga en un accidente hace muy poco y aún conservo su móvil y sus correos electrónicos, como tu protagonista, y también me sigo deteniendo en ellos de vez en cuando. Que la pérdida de un amigo se produzca en un momento en el que por algún motivo absurdo no os habláis debe de ser para volverse loco. Me ha dado escalofríos. Saludos y suerte.
Gracias Ana por acercarte al relato y por tu comentario. Un saludo.
Mariano, buen giro final. Suerte y saludos. Calamanda
Gracias Cala tu comentario. Un saludo.