SEP32. VANGUARDIA, de Miguel Ángel Cejudo López (La Marca Amarilla)
La noche en la trinchera es muy dura, “más que la vida” dice mi compañero Miguel, como si la guerra fuese ajena a la vida.
Aquella noche nos dijeron que sería nuestra última batalla, que después volveríamos a casa y nos reemplazarían en la vanguardia. Luchamos con aquella idea y eso nos hizo ser más temerarios en un combate cruel y pernicioso.
Las primeras luces del día insinuaban una sangría rebozada en barro pero una niebla atenuadora conseguía disimular la barbarie. Miguel me hizo gestos de que aquello había terminado y señaló el punto de encuentro de nuestra Compañía. Nos abrazamos emocionados al comprobar que nuestros cuerpos no tenían muy mal aspecto.
El Capitán hizo el recuento de soldados, suspiró aliviado a pesar de que sólo estábamos allí una tercera parte del total y ordenó la partida, la vuelta al hogar. Empezábamos la marcha adentrándonos al bosque a través de una acogedora niebla carente de humedad cuando un soldado despistado interrogó al Capitán por los heridos y los cadáveres.
– Pronto vendrá la Cruz Roja al auxilio de los heridos – gruñó el oficial – y por los muertos no se preocupe usted, también volverán a casa.
No hacen falta las guerras para darnos cuenta que nacemos para morir y de lo estúpido que somos por aceptarlas.-Héctor
Cierto Héctor!! Gracias!
Un saludo!
Genial ritmo narrativo Marca, una buena historia contada con mucho estilo. Al final volvemos todos.
Nos vemos en las trincheras microlunáticas.
Muchas suerte golfo!
Oichhhhh … Me ruborizaaaaassss, Tindaro!! Gracias! Un saludo microlunático!
Oh… como debe molar ser de vuestra secta micromachine o como se diga. Yo también quiero ser vuestro amigüito. Enviadme el formulario. Y ya entonces podré vestir de Batman y de Paco Martinez Soria ?
Capullo, que me ha encantado tu relato. De hecho, como soy tan retorcido, me imagino una hilera de almas ( sus cuerpos muertos me temo que se quedan donde están ) regresando a su hogar y todavía más intensidad siento que tiene tu narración.
Y ahora, venga para la casa microlunática !. Que ya es hora, viene lloviendo y te queda mucho trabajo por hacer !
Gracias Modes, te enviaré el formulario y una camiseta de Batman!! Un saludo! Se agradecen tus palabras!
Miguel Ángel, las batallas, como la vida, parecen estar llenas de normalidad y rutina; la muerte tiene su espacio y se cuenta con ello para resolverla de la mejor forma. Buen ritmo y buenas imagenes. Suerte y saludos.
Gracias por tus palabras, Calamanda!!! Un saludo!
Secuencia bélica muy bien narrada. Ese regreso es la mayor victoria.
Suerte y recibe mi saludo.
Muchas gracias Anna!!! Un saludo!!!
Me gusta, Marca. Muy bien como lo cuentas y esa respuesta final que no cierra nada, y deja un resquicio abierto para quien quiera imaginar. Interesante, noraguena.
Abracísimos, compadre.
Barlon!!!! Muchas gracias por tus palabras!! Esa fue mi intención! Saludos!
La guerra es tan cruel que muchos la quisieran separar de la palabra «vida». Buen final. Los muertos muertos están.
Felicidades.
Gracias por tus palabras, María. Recibe un saludo!