SEP31. CON LA FRENTE MARCHITA, de Esther Gómez
Es un oscuro barrio de paredes grises y ropa tendida, en el portal los diferentes olores de guiso componen una densa sinfonía, la banda sonora de todo el edificio sale de una vieja radio, suena un tango.
Allí reside Amanda Durán, hace más de veinte años que vive sola. Desde aquel día que su marido fue a comprar tabaco y no regresó, a partir de ese momento, su corazón de treinta años se vistió de negro, sus cabellos de blanco, la mirada perdida en algún inalcanzable horizonte. Nunca más volvió a pintar sus labios.
La cama de matrimonio parece burlarse de ella, dándole a elegir entre los dos lados. Estaba recostada cuando un escalofrío recorrió todo su cuerpo, supo que algo sucedía. Sintió sus pasos lentos y vencidos, que aún conservaban cierta arrogancia, subir las escaleras. El inconfundible olor a madera, a ron y a taberna impregno todo el espacio, clavándosele como un puñal en el estomago. No se asusto cuando el sonido seco y abrupto del timbre rompió el silencio.
A lo lejos la música sigue sonando “volver con la frente marchita” en la puerta llaman insistentemente. Puso su cuerpo en posición fetal y respiro profundamente llenándose de olvido…
Me ha gustado mucho, una historia triste pero contada de forma muy poética. Las mujeres de tus relatos sufren siempre con dignidad. Muy plástica y evocadora. El principio me ha recordado a la canción: «Mi calle tiene un oscuro bar de húmedas paredes, pero sé que alguna vez cambiará mi suerte…» Vidas grises, en barrios grises de canciones tristes. Cada mes te superas, sigue así.Un besazo y mucha suerte
Si me supero es gracias a los tirones de orejas, no hay nada mejor. En las situaciones dificiles es donde habitan los recursos,.la dignidad es uno de ellos,.en los barrios grises ,vive mucha gente que nace ya perdiendo. Conozco la canción y me gusta mucho siempre podemos esperar que cambie la suerte. Gracias Raquel un besazo fuerte tambien para ti.
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Curioso, ya que he coincidido con Raquel en la imagen recordada de aquella balada rockera de Lone Star, Mi calle. Qué grupazo. Efectivamente, una calle triste de un barrio triste para una vida triste y truncada doblemente, a juzgar por el segundo párrafo de la narración. Hay retornos que nunca debieran conjurarse. Me ha gustado mucho.
Muchas gracias por comentar y me alegro que te haya gustado.Hay una versión de esa misma canción de un grupo llamado «Desperados»seguro que tambien los conoces; la verdad que es una temazo.Un saludo
Esther, las descripciones nos llevan por el edificio y nos introducen en la casa y en la alcoba; allí claramente se siente el temblor de la mujer. Su prosa fluida lo hace ritmico y fácil de leer. Suerte y saludos
Si en tu opinión he conseguido crear un ambiente, una atmosfera ya me doy por satisfecha. Muchas gracias por pasarte por aquiu.
Un beso
Muy buena la descripción del lugar, olores, sensaciones,todo queda reflejado a medida que avanza el relato.
Un abrazo
Suerte
Rosa
Muchas gracias por comentar, esta historia no podía ser en otro lugar y no podía tener otros olores.
Otro abrazo para ti.
Me ha gustado mucho tu narración.
Hay regresos inútiles que no merecen que se les abra las puertas.
Suerte y recibe mi saludo.
Muchas gracias Anna por comentar mi relato. Estoy de acuerdo contigo, a veces volver esta lleno de inutilidad.
Saludos.
Sirva este comentario desde la lejania para decir…!Este sí me gusto mucho!
Tu hermano.
Esa lejanía es la que nos tiene acostumbrados a muchos «Volver». Me alegro que te haya gustado. Muchas Gracias por comentar , me lleno de emoción.
Tu Hermana.
Esther, como escribes me encanta este relato tiene mucha arte. Las descripciones fabulosas y una historia muy humana. Ha sido un auténtico placer leerte amiga, Sotirios.
Ha sido un autentico placer leer tu comentario ,amigo Sotirios. Muchas gracias y Un beso.
Las imágenes que nos transmites con las descripciones componen un escenario perfecto para esta historia de soledad. Me ha gustado mucho. Un saludo.
Son historias reales, en barrios reales.Cuantas mujeres sufrieron esa soledad, ese abandono.Gracias por comentar.
Un beso
Una historia muy bien contada, se siente ese estado de soledad de la protagonista, a la que los recuerdos la visitan como fantasmas. Muy bueno, enhorabuena. ¡Suerte!
Saludos.
Me alegro que se puede sentir el grado de soledad y de abandono que tiene la protagonista del micro, a veces volver no es buena idea, ni siquiera volver al recuerdo.
Gracias por comentar.
Saludos
Me alegro que se puede sentir el grado de soledad y de abandono que tiene la protagonista del micro, a veces volver no es buena idea, ni siquiera volver al recuerdo.
Gracias por comentar.
Saludos
Hola, Esther.
Si ves a la protagonista de tu relato le dices de mi parte que en el mundo hay más hombres (muchos más que longanizas), que no me gusta imaginar su corazón triste por quien no merecía la pena, que se tiña el pelo (hay colores muy monos que sientan fenomenal) y que me he comprado un «rouge» para los labios que ni te cuento…
Las cosas, al igual que las personas, no pueden rompernos tanto por dentro. Díle que aquí estoy yo y que estoy dispuesta a sacarle una sonrisa (además, debemos de ser de la misma quinta).
Ahora, en serio, el micro me ha gustado mucho porque en el fondo el ser humano es frágil y tú describes maravillosamente esa condición.
Felicidades, bonita, que tienes una forma de contar las cosas que, a mí, me encanta.
Un beso muy grande y muchísima suerte.
PD: He estado muy vaga para leer, para escribir, para todo lo que sea moverme del sofá, pero ¡he vuelto!
Towanda, no sabes como me alegro de tu vuelta este blog sin ti no es lo mismo. Te echaba de menos.
Gracias por tus comentarios siempre llenos de vitalidad y personalidad.
Un beso muy grande también para ti.
PD: Algunas veces que maravilloso es vaguear.
Towanda, no sabes como me alegro de tu vuelta este blog sin ti no es lo mismo. Te echaba de menos.
Gracias por tus comentarios siempre llenos de vitalidad y personalidad.
Un beso muy grande también para ti.
PD: Algunas veces que maravilloso es vaguear.
Buen relato de nostálgica y acompasada lectura. Me gusta.
Felicidades
Muchas gracias Maria por pasarte por aqui y comentar me alegro que te haya gustado, el relato al igual que el tango tiene ese aire de nostalgia.
Un beso
Has trasmitido muchas sensaciones además del mensaje. Y me ha gustado mucho el final, bravo por ella.
Felicidades,
Me alegro que te haya gustado y que su lectura te haya llenado de sensaciones.
Muchas Gracias y un beso
Esther, me ha parecido muy logrado tu relato por las sensaciones que logras transmitir con unas acertadas descripciones del lugar y de la vida de tu protagonista. Y me gusta los contrastes que al menos yo percibo, o me ha sugerido el relato al leerlo, como el nombre de tu protagonista y su vida en soledad durante veinte años, o la misma frase final, ese ser frágil que se coloca en posición fetal al mismo tiempo que es capaz de olvidar.
Un abrazo y suerte.
Muchas gracias Rafa por tu comentario, es la fragilidad de la protagonista la que la llena de grandeza.
Un abrazo para ti tambien.