AGO112. SALTO DE ESQUÍ, de Ángeles Sánchez Gandarillas
– Hola Juan, ¿vienes contento de tus vacaciones por Austria?
– Contentísimo; por fin pude asistir en directo a las pruebas olímpicas de salto con esquí. Me compré una entrada al lado del podium, por cierto que carísima, y además, tuve la suerte de presenciar un salto que superó en 50 metros el record mundial que tenía Johan Remen. Aquel hombre parecía volar, incluso, pasó por encima del vallado de protección de la pista…
– ¿Le pediste un autógrafo cuando recibió la medalla de oro?
– No se la pudieron entregar porque no aterrizó.
– ¿…?
– ¿Te has fijado como queda un mosquito en el parabrisas del coche en marcha, verdad? Pues así quedó el saltador sobre la cristalera del piso diez de una urbanización cercana.
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Parece como si estuvieran comentando el paisaje sentados en una terraza. Pienso que es el mérito del relato, lo bien que trasmite la insensibilidad humana.
Un abrazo.
Hola Susana. Pretendía hacer sobresalir las importancias relativas en las prioridades de algunas personas. Había que buscar emociones, curiosidad, descoloque con relación al tema propuesto, porque en invierno pocos insectos se asoman por ahí, una terna de giros, máximo dos personajes…, y como no soy muy buena en concentrar al personal, debía de lavar el relato para encogerle de palabras y clarificarle, total que no me quedó otra que pillar un mosquito, azotar el señor y dejar sin sensibilidad al personal.
Gracias por leer hermosa.
Abrazo GRANDE.
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Ángeles, trasmite la conversación, tan superficial, acerca de ese hecho de fatal consecuencias. Suerte y saludos
Hola Calamanda, y gracias.
Ya lo sé, que me escalofriaba al corregir.
Si te paras a pensar, ¿no es cierto que mientras nos alimentamos, descansamos, o incluso, en la misma cama, vemos imágenes en televisión que a fuerza de mostrarnos ese tipo de dramas-guerras, asesinatos, hambre, humillaciones, paro, accidentes, miseria, violaciones, bichos repelentes, etc., seguimos tan panchos?
Ay, me parece que sin querer, cada vez hay más «personas» metidos en ese conjunto.
Abrazo laaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaargo.
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Ángeles humor negro en estado puro, me ha dado penilla, además me acordé de los saltos que solo veo el día de año Nuevo.
Saludos.
Hola Asun, gracias por tu lectura.
Claro, como no te iba a dar pena. Mira que es ficción, que lo puedes borrar en un pis pas de tu mente. Nadie podrá dar un salto así. Tenía que arriesgar para ver si sorprendía, y lo hace. Es diferente. Me encanta este ejercicio de buscar referencias distintas. Mira que somos concursantes, mira que se parecen muy poco los textos. Mira que así es más divertido. Que te alterase significa que conseguí sorprender y pasar emociones. A lo mejor he mejorado en estilo. Yupi!!!
Abrazo integral, es decir, apretado y con toda la fibra.
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La verdad es que transmite esa sensación de insensibilidad tan habitual en nuestra época en que hasta la tragedia se vanaliza.Gloria
Gloria, gracias por pasar a leer.
Bien, comprendiste la historia. Según dice una de mis hermanas: «De tanto normalizar los sentimientos adversos, cabe la posibilidad de que perdamos todo sentimiento». Esto entronca con lo que decían los abuelos, «A todo se acostumbra uno, hasta a los palos». En fin, espero que no sea así. El humano se adapta y supera mucho…
Un abrazo, dos abrazos, tres abr…
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Venía todo el relato diciéndome ¿y los insectos?, ahhh claro qué bichos los contertulios!!!, suscribo comentarios anteriores.
Abrazos sin partir.
Hola Mel, como tampoco especificaba el concurso si tenía que ser todo el relato lleno de bichos, opté por incluiir en este relato insensible de humor negro, un solo insecto; pretendía ser menos salvaje, pero se supone que hay que arriesgar en los microrelatos, dar algún giro, sorprender, emocionar o alterar, salir un poco de la realidad… Sabes, a lo peor ando floja de reflejos-recursos… literarios.
Mel, princesa de las letras, a ver si podemos vernos en tu zona a finales de septiembre. Y gracias por estar al quite… Paso a ver tus letras.
Abrazos partí dos.
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Lines, expresas muy bien la insensibilidad de determinadas personas ante una tragedia como esta, ver estrellarse a alguien. No obstante yo creo que jamás ha habido tanto voluntariado como ahora y no hay más que ver como se movilizan las personas ante una catástrofe. Tenemos el caso cercano ocurrido el mes pasado en el accidente de tren, aunque también los hubo, entre ellos ciertos medios de comunicación que sólo iban buscando el morbo. Es cierto que las hay que banalizan todo cuanto se les pone delante, pero prefiero pensar lo contrario.
Me gustó mucho.
Un saludo y suerte.
Elena
Hola María Elena Sánchez. tiene un nombre que reconozco en una vecina exporádica de este pueblucu.
Gracias por leer, gracias por ser positiva-asertiva, gracias por poner la esperanza donde se pueda ver y palpar. Sin ella, nada sería posible y sin la gente comprometida, menos. Eso nos salva de casi todo, eso ayuda en casi todas las ocasiones, esto es lo normal…
Un abrazo de quien siempre fue ayudada por los demás. Desinteresadamente.
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¡Virrrrren de Apañpalucos, qué definiciones!, palabra que no quería ir tan allá! Desde luego que sí, Ana U, nos volvemos insensibles en general. Intenté dejar en el aire esa sensación de costumbre que se nos cuelga de la espalda y que deja de pesar a medida que caminamos por la vida. Así somos, y tendremos que volver atrás, que es difícil, y retomar la sorpresa ante lo bestial.
Un abrazo AnaU, Un abrazo inmenso para que la energía nos devuelva la opción de la sorpresa y por lo tanto, la reacción.
Gracias amiga, gracias por leer-entender esa filosofía.
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El humor negro está presente, pero como han dicho muy bien en los comentarios anteriores, lo que más destacaría del relato es cómo los protagonistas banalizan las tragedias que no les afectan, cómo hemos llegado poco a poco a ese estado de insensibilidad social en el que nada nos perturba. Y, por cierto, lo de conseguir descolocarnos lo consigues de largo.
Un abrazo y suerte a fin de mes.
Juraría que te respondí, pero no …
Gracias por tu comentario, por la lectura, por todo.
¿Te descoloqué?, huy, eso sería el mejor haago para mis letrs. ¡Vaya qué sí!
Me paso a leer tu relato.
Abrazo. Lines