AGO113. RENACER, de Miriam García León
Cuando me enamoré por primera vez, yo era una flor joven y bella que nunca había salido del invernadero. Mi amado me eligió un día después de unas cuantas visitas a mi hogar.
Al principio todo era perfecto, él me regaba, cuidaba mis hojas y yo le regalaba mis más vivos colores y un aroma que embriagaba.
Una mañana muy soleada, decidí abrir mis pétalos al sol para absorber todo su calor, pero al parecer a mi amor eso no le gustó. En los días que siguieron a ese, no recibí ni agua ni ningún otro cuidado por su parte.
Poco a poco mi belleza se fue perdiendo porque tan solo me regaba muy de vez en cuando, yo sacaba fuerzas de donde podía porque era muy joven para dejarme llevar. Un día de una de mis hojas cayó una semilla y por un instante volví de nuevo a la vida.
Intenté ocultar el brote, porque sabía que si él lo veía acabaría con nuestras vidas. Así fue, ese día caímos por la ventana. No me importó ya que ahora podría regresar a mi hogar y perder de vista al insecto que nos había hecho perder nuestro encanto.
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La personificación es enigmática y efectiva hasta el segundo párrafo. Confieso qu eme perdí un poco en las tres últimas líneas. Saludos.
Es una visión de un pasado, en el que gracias a las buenas decisiones, ahora la flor está más bonita que nunca. Un saludo.
Dura vida la de la flor ante un amo tan ingrato.Un saludo.Gloria
La verdad es que la vida es dura si te toca vivirla con alguien a quien no le importas, ya seas planta, animal o persona. Un saludo Gloria.
he vivido lo de esta flor… y en efecto los retoños te dan valor y vida…
metáfora muy bonita y bien llevada…
Muchas gracias Christine, la verdad es que un gran paso, el mayor paso para una mujer, pero te cambia la vida para mejor. Un saludo.
Relato que por cómo se inicia sabes que va a resultar una historia triste, pero que finalmente, aunque la decisión no sea de tu protagonista y sea vea abandonada, tiene la valentía de seguir seguir adelante. Muchos de esos insectos quedan todavía sin fumigar.
Saludos y suerte.
Gracias por tu comentario, hay que seguir adelante sea como sea, y si por mi fuera exterminaría a todos esos insectos que amargan la vida.