AGO95. EL MISMO AZUL DE SIEMPRE, de Magdalena Carrillo Puig
Unos días éramos sirenas; otros, estrellas de mar; la mayoría de las veces gigantescos cefalópodos, ballenas o tiburones. Y a bordo de las olas, recorríamos entusiasmadas los siete mares buscando nuestras incautas presas.
Nos hicimos mayores y ya no somos nada. Dejamos que nuestros
recuerdos floten ingrávidos como nuestros cuerpos en el agua. No nadamos, solo hablamos y recordamos. Con nuestros sombreros bien atados a la cabeza, como entonces, sentimos que el tiempo no pasa y no pesa y seguimos foltando y charlando. Los pececillos nos mordisquean los pies, pero les dejamos hacer, estamos acostumbradas, nos creemos que son los mismos de siempre, aquellos de cuando éramos niñas…
Un principio completamente mágico y aventurero y de repente esa potente afirmación «y ya no somos nada».
Narrando un espacio y un tiempo con brevedad, has construido una historia intimista y con mucha reflexión.
Me ha encantado la puesta en escena, como unos sombreros y unos peces pueden componer un ayer y un hoy.
Felicidades.
Me ha sorprendido el final Magdalena porque parecía un relato de lo más mágico y se quedó en el sueño y los recuerdos de dos ancianas, muy bonito, me has hecho sentir un poco como ellas, recordando esa niñez dónde todo era posible.
Que tengas mucha suerte.
Melancólico. Y triste, por la frase «ya no somos nada». Seguro que sí son algo, o mucho, unas mujeres mayores compartiendo sus recuerdos.
Un abrazo.
La vida, inevitablemente, arrasa con los sueños de la niñez. Gracias por vuestros comentarios.
Me has llevado a Ibiza. Las matronas entradas en años, de cháchara, reparando redes bajo sombreros de paja sobre el pañuelo negro, con sus rodillas apuntando a la pared encalada por sentir mas el fresco y guardar la pudenda de costumbre milenaria.
Muy bonito.
Saludos
Magdalena, muy bonito tu relato evocador de la edad de la inocencia. Un abrazo.
Un micro que nos hace viajar hasta nuestros primeros y más inocentes pasos a través de un azul suave y confortable.
Narrado de una forma envolvente y lleno de preciosas imagenes.
Excelente, me ha gustado mucho.
Felicidades y un fuerte abrazo, Magda.