12. ANMA – Inés Z. López
Una mujer está inmersa en el laberinto de las líneas de un hombre. Sus manos expertas trabajan y escuchan, sin palabras, tan solo se percibe el vaivén rítmico de la respiración.
Hay segundos de calma en los que deja descansar su mano sobre el vientre masculino, esperando, confiada, que su intuición le dicte el camino a seguir.
No tarda en escuchar suaves latidos, el corazón de su cliente atrae sus dedos a la cara interna de los brazos. Allí hunde sus pulgares en la Primavera Suprema, profundamente, antes de continuar el recorrido interno de un canal tenue y luminoso.
Ambos se sumergen en un ambiente de paz. Las inspiraciones se conectan. Las expiraciones son más largas.
Los pulgares femeninos siguen la línea hasta la Puerta de la Mente. El hombre, acostado sobre el futón, siente la calma que la presión ejerce sobre ese punto: el estrés le angustia, perturba su corazón.
Ella termina el masaje colocándose en seiza, rozando con sus rodillas la cadera de él. Una mano acaricia Ajna, un símbolo es dibujado sutilmente y, cuando se levanta, las suaves notas de Claro de Luna invaden la estancia. Él permanece acostado: recreándose en el placer de un viaje interno.
Bien Inés buena apuesta, muy sensual tu laberinto casi mejor no encontrar salidas. Abrazos y suerte
Sí, perderse dentro de uno mismo puede llegar a ser muy placentero, aunque a much@s les asuste la idea.
Un fuerte abrazo, Manuel.
Pues me acaba de regalar con una sesión de Reiki. Lo que describes del hombre el exacto y sé que la búsqueda de intuiciones de la mujer es tal como la cuentas. Entiendo que la salida del laberinto es dejarse llevar.
Daniel, aunque solo han sido unos retazos, has notado la presencia del Reiki en el relato; pero tengo que confesar que lo he mezclado con el Anma, masaje precursor del Shiatsu. Las dos técnicas me encantan. Y tienes razón con lo de dejarse llevar, algo en apariencia sencillo, pero complicado a la vez.
Un abrazo.
Inés, nos has ofrecido una muy buena sesión de relajación profunda….he ido directo a escuchar el Claro de Luna de Debussy …y me he dejado llevar.
Besos.
Entonces estoy segura de que has disfrutado, Amélie. La música se siente mejor cuando el cuerpo se abandona.
Un beso.
Desde luego,como dices más arriba,es muy placentero perderse en uno mismo y además se regresa las pilas cargadas.
Centrar la mente, aunque sea un minuto, nos ayuda a tener mayor claridad, a ser más creativos…, como tú bien dices nos recarga las pilas.
Soy bastante neófito en este asunto, pero da la impresión de que conoces perfectamente el mundo de los masajes con todos sus trucos y recovecos, un maravilloso laberinto en el que perderse, desde luego.
Un texto original
Suerte y un saludo.
Gracias, Ángel. La primera vez que vi el dibujo de un cuerpo cubierto por varios meridianos energéticos, me pareció un laberinto estupendo en el que perderse, y créeme que me perdí por un tiempo. Según escribía lo echaba de menos.
Abrazos.
Hermoso viaje a través de un masaje o de una sesión de reiki u otro masaje sensitivo.
Suerte con este bonito relato Inés.
Gracias, Bluess, el Reiki debía estar presente: es otra de mis pasiones.
Besos.
Estupendo viaje el que nos propones. Me ha gustado mucho las formas y sobre todo el destino. Hermoso relato. Mucha suerte 🙂
Gracias, Juan Antonio, el destino es fascinante, pero lo es mucho más llegar hasta él.
Abrazos.
Desconozco esa técnica pero tu relato me fascino.
Un abrazo y suerte
Seguro que la técnica también te fascinaría. Besos, Moli.
Inés, hay sesiones de Reiki en Urueña?, dejo la carrera y voy a pie si hace falta. Según leía, a mi me faltaba la respiración, se me ha puesto el Ajna estresado.
Te prometo que probaré un masaje sensitivo, los que conozco son los de los fisios y son un poco brutos.
Un beso
Epi, qué me dices!! Hay que relajar ese Ajna. Si estás de exámenes tienes que tener la mente clara y abierta.
Si pruebas el masaje ya me contarás, estoy segura de que conoces los beneficios de la relajación en el cuerpo y la mente.
Besos.
Inés, originalísima tu propuesta para este mes, un laberinto de energía positiva que habrá que probar. Abrazos y suerte.
Gracias, Salvador. Está muy bien probar cosas nuevas. Yo te animo.
Un abrazo.
Un laberinto cargado de sensualidad en un texto bien escrito y convincente. Me ha gustado mucho, Inés.
Gracias, Montse. La verdad es que releyéndolo yo también veo el toque sensual, pero lo cierto es que no estaba pensando en eso cuando lo escribí. Me alegra que te guste.
Un beso.
Sensorial relato en el que se mezclan esos elementos hindúes-chinos-japonés. Lo leo en seiza y procuro activar el chakra 7 para escribir un relato aceptable en este mes, pero siento que, con ese masaje, el que se activa es el segundo chakra. Inés Z, me ha gustado este micro, es diferente. ¡Suerte!
Saludos.
Bueno, Beto, activar el Hara no está nada mal, y aprovechando que estás en seiza pon tus manos sobre ese centro, dos dedos por debajo de tu ombligo, y respira, profundo y suave. No te entretengas con pensamientos, déjalos pasar… Estoy segura de que tu relato va a ser mucho más que aceptable 🙂
Besos y abrazos.
Engancha desde el primer párrafo.
Gracias, Lorenzo, no está mal conseguir enganchar con las primeras letras.
Un abrazo.