97. Del mar, la vida
Vendrá del mar, tendrá el sabor de la sal y la piel del agua. Su corazón latirá con el ritmo de las olas y como las mareas, unas veces, te arropará y te sentirás acompañada, y otras, se retirará despacio para que disfrutes de tu soledad. Vendrá del mar, con el sol tatuado en el cuerpo y con el tacto de las algas en el alma. Contará historias de marinos y de otras costas, de peces y de otros fondos. Vendrá del mar, te soplará la brisa marina que guardan sus pulmones y te cubrirá con el agua que guarda su sexo. Engendraréis charcas, lagunas y mares… La única certeza, Sara, es que vendrá del mar.
Así decía la carta que me dejó mi querida abuela siendo yo muy niña. De niña fue íntima compañía, de adolescente dulce promesa, de adulta un bello cuento y hoy, sesenta años después, maravillosa realidad.
Un relato muy bello. Vendrá del mar, Sara. Lo dice tu abuela poeta.
Felicidades y abrazos de mar.
Bello y evocador sin duda Eva.
Eva, me gusta mucho tu relato. Está cargado de sensibilidad y me encanta que la abuela sea fuente de sabiduría e ilusión para su nieta. Parece que la espera ha sido larga, pero del mar vino lo que se deseaba con tantas ganas.
¡Felicidades!
Un abrazo.
Delicadeza y belleza en tu historia.
las abuelas son una buena compañia y todo sabiduría en este largo camino de la vida que a veces sabe a mar.
Un abrazo Eva.
eva, bonita profecia en una tierra marinera. Muy poetico y cuidado su lenguaje. Suerte y saludos