DIC138. EL BOOMERANG, de Arantza Portabales Santomé
Apareció por Navidad. El año en que cumplí diez. El mismo en el que había alcanzado la madurez suficiente para saber por qué llevaba solo el apellido de mi madre. Un día llamó al timbre y me dijo, «Hola Andrés» mientras me sacudía el pelo. Yo me quedé callado y cuándo mamá se acercó a él y se abrazaron con fuerza comprendí quién era. Y que si deseas algo mucho, sucede.
En los días siguientes descubrí que tener padre era lo más. Venía cargado de historias de viajes y de su mochila extraía todo tipo de objetos fascinantes: un boomerang, un látigo o una máscara de faraón…No me cansaba de escucharle.
Cada detalle de las siguientes dos semanas está clavado en mi memoria: la sopa de tapioca de Nochebuena, el vestido que estrenó mamá en Navidad, a Michael Jackson vestido de zombi en fin de año y la cabalgata de reyes.
Pero sobre todo recuerdo la sonrisa de mamá y lo feliz que parecía.
Cuando desperté el día seis, mamá tenía los ojos rojos. Ya no sonreía.
Desayunamos en silencio. Solos. Bajo del árbol encontré el boomerang.
Me asomé al balcón y lo tiré con rabia.
Inexplicablemente, tampoco volvió.
Bajo el árbol. Perdón por la errata….
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Este mes te has hecho esperar, Arantza, pero mereció la pena. Otro gran relato, encantadora la visión del niño y la comparación de su padre con el boomerang. Te veo otra vez de jurado.
¡Buen año!
Ya me han vetado, no me quieren más de dos veces….una lástima, tengo odas para rato, jajaja. Este mes es horrible. de trabajo hasta arriba y luego todo lo de la Navidad…..estoy agotada…entre ser masterchef y mamá noel no queda tiempo para nada…Felices fiestas Rafa
Muy bonito el relato y gran metáfora la de ese boomerang.
Arantza, el giro que das al final y que todo volvió a estar como estaba me parece espectacular. Te deseo unas felices fiestas y mucha suerte, Sotirios.
Gracias Lorenzo y Soti por vuestros amables comentarios. Felices fiestas
Arantza yo creo que ese niño alcanzó la madurez suficiente como para dejar de esperar a papá noel, los reyes y a su padre. Una navidad de transiciones ha tenido el pobre. Un abrazo y feliz año!
Arantza, muy bonito relató el que has dibujado. Es como una montaña rusa de emociones. Muy visual. Sí señor.
Con todo, lo que me ha parecido un micro en sí, un auténtico hallazgo, es esa última frase (ya sabes lo que me gusta el surrealismo, la incógnita sin muchos visos de resolución). Parece encerrar una elipsis sobre la extrañeza (y perdona que esto te pueda sonarte a resaca berbenera). Tú léela tal cual, sin tener en cuenta el tema de este mes ni nada.
«Me asomé al balcón y tiré el boomerang con rabia. Inexplicablemente, tampoco volvió»
PD 1: ¿Demasiado loco? (vale, vale, me voy a tomar el haloperidol).
PD 2: un abraaaaazo enorme
Arantza, muy bonito relató el que has dibujado. Es como una montaña rusa de emociones. Muy visual. Sí señor.
Con todo, lo que me ha parecido un micro en sí, un auténtico hallazgo, es esa última frase (ya sabes lo que me gusta el surrealismo, la incógnita sin muchos visos de resolución). Parece encerrar una elipsis sobre la extrañeza (y perdona que esto te pueda sonarte a resaca berbenera). Tú léela tal cual, sin tener en cuenta el tema de este mes ni nada.
«Me asomé al balcón y tiré el boomerang con rabia. Inexplicablemente, tampoco volvió»
PD 1: ¿Demasiado loco? (vale, vale, me voy a tomar el haloperidol).
PD 2: un abraaaaazo enorme
Mi querido talismún. lancé el boomerang y se enganchó en una aleta de tiburón, jajajaja. Tienes razón que casi funciona como mini micro.
Besos con Zolpiden.
Está muy logrado por la voz del niño y por el paralelismo del boomerang. Y por supuesto por la mano de la autora. Tres perfiles en muy pocas líneas que dejan mucho a la imaginación del lector para completarlos a su gusto.
Un abrazo.
Arantza, un microrrelato donde el boomerang final lo marca todo.Me ha gustado esa escena final después de todo un vaivén de sentimientos.
Muy bien escrito.
¡Suerte!
Abrazos.
Los sentimientos por alguien no suelen ser de ida y vuelta, cuando se van es casi imposible conseguir que regresen. Lo has expresado muy bien con ese boomerang. Un abrazo.
Hola, Arantza.
Me parece que es un micro cargado de aciertos. Primero, la voz narrativa en un niño. Segundo, la transición de escenas coincidiendo con las fiestas. Tercero, lo visual de ese día seis desayunando solos y con esa mamá con los ojos rojos…
Y, por último, ese boomerang que no vuelve.
Estupendo, para podium o laureles…
Felicidades.
Un abrazo fuerte.
Fantástico micro. Tiene todos los ingredientes de un relato ganador.
Felicidades,
Arantza, lo que sí ha vuelto es la desilusión de una madre y un niño. Me ha encantado. Abrazos y felices fiestas.
Excelente microrrelato con buen final.
Abrazos
Buenísimo micro, el final es para mi tan perfecto como demoledor.
Felicidades, porque parece sencillo, pero meternos en la historia y retratar así a los personajes, no lo es en absoluto.
Besos
Una historia muy completa y bien contada.Un final muy conseguido. Suerte y abrazo.
Precioso relato, Arantza, como siempre. Un micro con mucha sensibilidad.
¡Me ha encantado!
Pos a mi también me ha gustado. Poco duró la felicidad. Padres de mala calidad y boomerangs defectuosos. Mucha suerte aunque estes vetada. Felices fiestas.
Abracísimos.
Arantza como siempre admirador de su obra, de sus personajes y sus perfiles, de su acción y de sus cuentos en pequeño que nos hacen grandes lectores a todos.
Ojalá el boomerang no haya vuelto porque ha golpeado al padre en la nuca.
Abrazos y ay puestos feliz añuco
Como siempre excelente, amiga. Ese boomerang impacta -contundente- en el lector.
Un abrazo admirado.
Lo he leído dos veces, Arantza, por el regusto de disfrutarlo. Has conseguido que imagine muy bien lo que puede sentir un niño viendo que falta el padre, y grabando en la memoria esos días de felicidad en la madre. Un acierto lo del boomerang.
Bonita historia, aunque le haya durado poco la felicidad a la madre.
El detalle del boomerang muy bueno.
Un abrazo
Tu historia Arantza, simboliza esas idas y venidas de los adultos que «dividieron sus vidas» en un momento determinado y la tristeza que provocan las ausencias. La figura final del boomerang que no regresa, es esa parte de la historia que resume los sentimientos del niño.
Me gusta Arantza. Un abrazo para ti.
Gracias a todos. Me resulta imposible contestaros a todos pero os agradezco de corazón que os hayáis acercaros a leerme. Esta mañana lancé mi boomerang desde mi balcón, desde donde hay una vista impagable del Pico Sacro y llegó cargado de todos vuestros mensajes de apoyo. Feliz Navidad chicos y que en 2014 sigamos construyendo micromundos para compartirlos. Gracias por estar siempre ahí.
Un remate fantástico Arantza, me gustó mucho.
Abrazos, feliz año.
Felicidades, Arantza, por esa mención.