67. El adúltero (Lorenzo Rubio)
Cada quince días, Víctor aprovecha que César trabaja de noche para dormir en su casa. Está enganchado a ‘El adúltero’, un libro que encontró lleno de polvo en la biblioteca de su colega.
Víctor lo suele leer recostado en la cama, cuando la mujer de César ya duerme, y, antes del alba, lo devuelve al anaquel. Pero la noche de la que os hablo, el libro aparece en la mesita. Le extraña hallarlo allí y, aún más, que el marcapáginas señale una hoja más avanzada a la que él había apuntado hace dos semanas. Intrigado sigue el punto de lectura:
“El adúltero observa una obra a centímetros de sus ojos. El cornudo sabía que la presencia de ese libro no pasaría desapercibida.
—¿Has visto la novela que lee tu marido? —dice sorprendido.
—No te preocupes. Nunca sospecharía de su mejor amigo —responde y ríen a carcajada tendida.
El traidor decide hojearlo y lee la página marcada por una tela roja:
<<Abrazado por mi mujer, acaricia mi piel de papel mientras el veneno se va adhiriendo a las yemas de sus dedos. Un regusto amargo va creciendo en su paladar. Será carmín, piensa. Intenta paliarlo besándola apasionadamente una y otra vez…>>”.
Hola, Loren.
Intrigantes esos dos personajes: el adúltero y el cornudo. No le auguro un buen final al primero. Creo que el marido cornudo leyó El nombre de la rosa y entiende de venenos dosificados entre las páginas de un libro.
Buenísima apuesta, Loren. Tiene mucha miga tu micro y este mes puede ser el tuyo.
Un abrazo muy grande.
PD: Loren, si le pones el número a tu micro (desde la edición) le ahorras el trabajo a Jams, pobrecillo, que tiene mucho curro.
Besos.
Gracias por tus gratas palabras. Hay mucha calidad en este blog y todos se merecen que sea su mes. Veo que tú también eres una gran lectora. Un abrazo.
PD: Editado con el número. Gracias por el consejo.
Lorenzo, me ha parecido una excelente narración desde su inicio te atrapa para querer llegar al final y conocer el desenlace. De lectura amena y ligera.
Que tengas mucha suerte como es habitual en ti.
Gracias por tu lectura: Es muy grato ver que he creado intriga. Igualmente con la suerte.
Intriga muy bien narrada. Atrapa al lector de cabo a rabo.
Sí, que se lo digan a Víctor. Gracias por tu visita, Edita.
Un relato que fusiona realidad y ficción y obliga al lector a reubicarse. Muy logrado, Lorenzo. Suerte.
Un abrazo.
Hola, Rafa, qué alegría verte por aquí. Esa era mi intención crear una historia muy enredada como unas cajas chinas. Otro abrazo para ti y suerte.
Sin prisa, lenta y efectivamente, el relato se le va metiendo adentro al lector igual que el veneno se le va metiendo al adúltero por las yemas de los dedos. Ahora entiendo por qué dicen que lo bueno- y que el veneno- viene en frasco chico, LORENZO. No me había percatado de ese guiño a «El nombre de la rosa» hasta que lo señalaron, pero qué buen guiño, che. Unos desgraciados el y la adúltera. Y el marido será muy cornudo pero qué bien la planeó a la venganza… 😉
Me gustó más que mucho el relato.
Nos leemos. M.
Gracias por tu análisis e interesantes palabras. Por supuesto, que nos leemos por aquí.
Y digo yo, si ella no le quiere y estos dos sí se quieren, por qué acabar asi con los dos? Bueno, que no se quejen, es una manera muy bonita de morir!!!! Lorenzo, matas muy bien Jajaja
Me ha gustado.
Muy ocurrente ese juego, lectura-realidad !Suerte!
Jaja, Rosy, ahora entiendo por qué me dicen que beso de muerte. Ay, cuántas parejas seguirán conviviendo por lo que sea y divirtiéndose con otros al mismo tiempo. Gracias por tu divertido comentario.
Mensajes y venganzas escritas en los libros aplicables a la vida cotidiana, homenaje a «El nombre de la rosa». Previsible drama que no por tener un carácter intelectual lo es menos, aunque yo también creo ver cierta comicidad. Buena apuesta.
Un saludo y suerte.
Hola, Ángel, gracias por este comentario tan analítico y por tus deseos que te los devuelvo a esos versos de plomo.
Lorenzo, te sigo cada vez con más interés, de verdad. Creo que tienes muy buenas intuiciones para dar forma a los relatos, a los que sabes dotar de gran plasticidad. Y, personalmente, algo que creo que compartimos: cierta tendencia a lo libresco, a la literatura sobre la literatura. Este mes, tu micro no solo hace un guiño a «El nombre de la rosa», sino que la construcción circular y el recurso del lector sorprendido por la ficción que tiene entre sus manos, recuerda al Cortázar de «Continuidad de los parques»: excelente modelo. Enhorabuena.
Vaya solo por haber leído este comentario ya vale la pena todo. Que un gran microrrelatista como tú me haya dicho ya me ha dejado contento. Plasticidad, libresco uyuy que me sacas los colores. Y has acertado en el modelo pensé en ese relato, que podría decirse que es uno de mis preferidos sin lugar a dudas. Pero solo lo recuerda que estamos hablando de los más grandes. Muchas gracias por tus palabras que me las quedo como arenga. Un abrazo, Eduardo.
Nos dejas un relato con una explosiva mezcla que funciona muy bien. Nos has planteado una partida de ajedrez entre una serie de personas reales vehiculada a través de un libro, que nos mantiene a caballo entre lo que explica y lo que significa. Vas girando la historia una vez y otra y haces que coquetee con nosotros. A mi por lo menos, me ha atrapado y me ha empujado a leer hasta el final con interés malsano por conocer el desenlace. El relato hace un guiño al Nombre de la Rosa, pero escrito con una vis Hitchcokiana. Enhorabuena. Te deseo mucha suerte. 🙂
Qué espléndido tu comentario, Juan Antonio. Tienes razón en la historia cada uno juega sus piezas y sus bazas en el tablero. además, es un lujo leer los nombres de grandes que estáis dejando por aquí. Me alegro de que os evoque a esos artistazos. Y veo que estáis coincidiendo en algo: intriga. Gracias una vez más por pasarte por mis posts.
Un abrazo, seguimos leyéndonos que esta semana nos espera el cielo.
Señores, ya pueden descorchar la absenta que ha venido el respetado Juan a visitarnos. Dejadle que elija la mejor room del blog y servirle todo lo que pida, ya sea en plan Casanova o Vidente del Oropel. Que no me entere que se queja de nuestra hospitalidad ¡eh!
-¿Y si pide un masaje?
-¿Me has oído? Lo que pida. Que nadie meta la pata. Este edificio se mantiene gracias a gente como él.
Hola Lorenzo, gran relato lleno de intriga que te lleva hasta ese final tan sorpresivo con veneno incluido, los adúlteros no tienen buena prensa y tus protagonistas no van a ser menos.
Me gustó .
Un saludo
Hola, Puri, si es que al final todo se sabe. A lo mejor ese libro con tanto polvo se usaba más de que el otro se creía. Es difícil el cuerno perfecto.
Buen trío de personajes, al final el marido es más listo que ellos. Ya se sabe, el que ríe el último, ríe mejor.
Saludos.
Tienes razón, aunque en esta ocasión las risas son tristes. Gracias por tu visita, Asun.
Un cornudo será siempre un potencial asesino, este parece que ha cometido el crimen perfecto. Lorenzo D. tu relato me ha gustado mucho por esa mezcla de lo que se lee en el libro y la realidad. ¡Suerte!
Saludos.
Gracias, Beto, por tu comentario. Era eso lo que pretendía hacer un relato cíclico que mezclase realidad y ficción.
En efecto, buena apreciación y buen verso para definir este triángulo. Gracias por tu visita, Ana.
Piel de papel, preciosa definición para tu vengativo personaje.
¡Suerte!
Me gustó esa paradoja, mientras la mujer abrazaba a Víctor, él acariciaba su piel, pies son personajes de libro.
Me hace gracia la frase de ella «No te preocupes. Nunca sospecharía de su mejor amigo» pero si se lo están poniendo en bandeja.
O sea que el amigo y la adúltera, porque ella es adúltera, se acuestan y más, y luego le dejan el libro ¿p´aqué, p´aqué? Pues para que sepa lo que está pasando.
Tinto y en jarra.
Se merecen lo que les pase.
Abrazos.
Coca Cola está clarísimo, jaja. Sí son un tanto inocentes, de hecho él piensa que es carmín el veneno jaja.
Se nota que tu César es un tío leido y se ha empapado de la sutileza clásica del veneno. Si fuese un poco más modernito se habría cargado al colega al mas puro estilo recorta-cabezas de juego de tronos o similares y habría salido en algún programa sobremesa que no quiero nombrar.
En este caso, como mandan los cánones, el César se convierte en «Victor-ioso», y Victor, ah, se siente, pierde la partida. En cuanto a la esposa del Cesar no solo debe ser honesta, sino parecerlo. O al revés, en este caso.
Me ha gustado mucho como juegas con los personajes.
Abrazo.
Muy bueno, Aurora, has acertado en el porqué de llamarse César y Víctor, aunque sea anecdótico, a Víctor lo llamé así porque se piensa que se lleva la victoria en este juego; a César, precisamente por esa frase que has dicho de que «no solo serlo, sino también aparentarlo» y parece que ella no consiguió ni una ni otra cosa. Y al final, hay que dar al César lo que es del César. Gracias por tu análisis, Aurora.
Lorenzo, este drama es digno de un guion cinematografico; el trio no tiene desperdicio. Nos llevas por sus caminos con ritmo y suspense. Suerte y saludos
Oh qué halago, gracias Calamanda por tus palabras.
Lorenzo, con sutileza la intriga nos ha llevado a una irónica y original venganza. Muy bueno. Abrazos y suerte.
Muchas gracias; te deseo la misma suerte.
Estupendo relato Lorenzo. Tan intrigante como bien construido. Mucha suerte, la mereces.
Abrazos
Me alegro de que te haya gustado Montse. Te deseo la misma suerte.
De todas maneras Lorenzo, no es una mala muerte. Lo he leído dos o tres veces para enterarme bien como lo has escrito. Superior.
Un abrazo
Gracias por tu comentario y el tiempo dedicado a releer el micro. Un abrazo.
Tu relato me ha gustado mucho por esa mezcla de lo que se lee en el libro y la realidad. Y en una segunda lectura me llama también la atención el nombre de los protagonistas y me gusta como los has utilizado.
Mucha suerte
Besitos
Gracias Elysa; me alegro de que hayas encontrado alguna significación en los nombres. Te agradezco tu comentario y relectura.
Manejas muy bien la intriga Lorenzo, y esta mezcla entre lo leído y lo real funciona fantásticamente, aunque reconozco que lo he tenido que leer dos veces para entenderlo (estoy un «pelín» espesa).
Suerte y saludos
Hola, Anna, el relato reclama una segunda lectura, no es espesura. Muchas gracias por tu comentario.
Ecos de Eco, de matrioskas, de Vértigo…
Agite estos ingredientes (con absoluta maestría), y haga disfrutar a los lectores con un relato msgistrsl.
A mí me lo ha parecido.
Bueno, bueno, bueno.
Un abrazo, Lorenzo.
Este comentario, viniendo de un ganador y del autor de mi relato preferido del mes, es todo un honor. Muchas gracias, Modes.
Me encanta tu relato. Por lo bien escrito, los diálogos, el movimiento de los personajes y el final que cierra con poética descripción los asesinatos. Fíjate yo lo titularía. «Una y otra vez…»
¡Bien1
Gracias por tu sugerencia, María, es muy acertada. Me alegra mucho leer tu comentario tan agradable.
Que intriga más sutil, una venganza propia de Agatha Christie, te confesaré que, inocente de mi, pensaba que el amigo ‘solo’ iba , ‘de verdad’ a leer el libro. Enhorabuena y mucha suerte, Lorenzo.
Hola, Eva, me alegra de que hayas pensado en eso, pues cuando lo escribí quería llevar al lector por ese camino para potenciar la sorpresa. Muchas gracias por tus palabras.
Hola, Eva, me alegra que hayas pensado en eso, pues cuando lo escribí quería llevar al lector por ese camino para potenciar la sorpresa. Muchas gracias por tus palabras.
Muy buena trama y ritmo narrativo. Como ya han dicho antes, me gusta mucho el guiño a «El nombre de la rosa» en el final, hace el relato redondo. Mucha suerte este mes Lorenzo!!
Un abrazo microlunático
Gracias, Tíndaro por tu comentario y lectura.
Lorenzo, lo he leído tres veces y ha sido imposible, no me ubico en los personajes. Luego leo los comentarios (El nombre de la rosa, adúltera en vez de adultero) que todos son de alabanzas y me da rabia no llegar. Menos mal que encuentro a dos que dicen que han tenido que leerlo varias veces. Lo intentaré.
«El adúltero observa una obra a … (¿Obra? ¿Se refiere a un libro?). Luego no se cierran las comillas y el diálogo (que creía dentro del libro) resulta que está fuera (cachis, a releer). «El traidor decide hojearlo y lee…» Pero no estaba leyendo ya? La marca roja es distinta del marcapágina. Hasta la respuesta de ella no me enteré que dormían juntos, inocente.¿ Luego la escena del veneno, ¿se chupa los dedos al pasar página…? En fin, que hoy estoy lentito, problema mío, seguro. Suerte a fin de mes.
Hola, Ximens, nunca es culpa del lector no coger el hilo, seguro que alguna pieza no está bien encajada. El relato es una especie de caja china en la que Víctor se acuesta con la mujer de César en su propia cama; y lee después del coito un libro que se llama El adúltero… un libro que trata sobre uno que le es infiel a su mejor amigo y lee un libro, donde uno que pone los cuernos es envenenado a la manera que se envenena en el nombre de la rosa, con veneno en las páginas, y como al pasarlas uno se lame las yemas se envenena… es la realidad dentro de un libro, dentro de otro libro…
Está muy bien esta intriga metaliteraria con un «regusto» a El nombre de la rosa. No había caído en la metáfora de los nombres. Menos mal que siempre hay más ojos para ver.
Suerte y saludos.
Gracias, Rafa, por pasarte por aquí. En realidad, los nombres fueron buscados a propósito y, aunque le den un valor añadido, es casi anecdótico, pero todo suma. Un abrazo.
Enhorabuena, Lorenzo, por la mención.
Muchas gracias, Ximens, lo mismo digo, que eres todo un veterano en recibir menciones en ENTC.
Felicidades Lorenzo por esta merecida mención. Este mes tanto ganadores como mencionados estáis en un nivel tan alto que no se cómo el jurado ha podido decidirse, pobrecillos.
Un abrazo
Gracias por tus palabras, Anna. Sí la verdad es que debe ser todo un dilema elegir solo tres vencedores con tanta diversidad y calidad.
¡Es que es muy bueno!, no me extraña la mención.
¡¡¡Felicidades!!!
Muchas gracias, Rosy.