Esta Noche Te Cuento. Concurso de relatos cortos

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98,El secreto

Escucha las primeras gotas romperse contra el ventanal de la cocina y siente un cosquilleo en la nuca. Se asoma, mira al cielo y piensa que tal vez tenga suerte. En cinco minutos está diluviando. Adoro el otoño, piensa, y advierte que sonríe de pronto.

—Cariño, bajo a la compra, ¿vale?— Vocifera camino del dormitorio. Su marido tarda en contestar que vale. Se calza deprisa, abre el cajón de la mesilla, busca el vibrador y lo guarda en el bolso. Luego coge las llaves del coche y sale de casa. Continua sonriente, bajo el confeti de agua que resbala por su impermeable, mientras corre hasta el Volvo familiar.

Sabe lo que vendrá después: la piel del pecho endurecida, los pies apretujando la alfombrilla entre los pedales, su boca abierta reflejada en el retrovisor. Supone que esto no cuenta como pecado. Y menos aún como infidelidad. Lo ha pensado muchas veces.

Los regueros que se escurren por las ventanillas forman una cortina tupida, la calle está desierta, el capó repiquetea. Coloca el móvil en el cuadro de mandos, le da al play con una mano y con la otra se sube la falda. Adora el otoño.

16 Responses

  1. calamanda

    Violeta, nos vas llevando hacia esa infidelidad de la mano de la protagonista lentamente. Se visualizan bien las imagenes que nos cuentas. Suerte y saludos

  2. Yo no creo que cuente como infidelidad, todos somos libres de disfrutar de nuestro cuerpo, sobre todo con nosotros mismos, digo yo.
    Es un relato muy visual, muy bien contado.
    Saludos

  3. Antonia

    El doctor Joseph Mortimer Granville inventó el primer vibrador eléctrico para tratar lo que entonces se llamaba “histeria femenina”.

    Hysteria, es la película al respecto.
    http://www.filmaffinity.com/es/reviews/1/567277.html

    Tanto por el ritmo, la ambientación, los elementos que utilizas para crear la atmósfera , el contenido y la forma de narrarlo, me parece un micro perfecto, digno de estar entre los ganadores. Un soplo de aire fresco, diversión y originalidad. Mucha maestría veo ahí, me encantará volver a leerte. 🙂

  4. Juan Antonio

    Te desmarcas muy bien de las tormentas para utilizar en beneficio de tu divertida y original historia. Me ha gustado mucho. Me parece además que has descrito la escena con mucha maestría. Enhorabuena. Suerte.

  5. Hola, Violeta.
    ¡Ostras! Vaya señora más entusiasta del otoño; esa es una fan de la estación y lo demás son tonterías.
    Me encanta. Es sutil y sugiere la acción sin llegar a desvelar muchos más detalles. Es buenísimo.
    Unos besos y que tengas mucha suerte porque es rompedor y diferente.

  6. Valiente y muy medida, sin caer en el mal gusto. Me ha encantado la historia de esta señora tan «amante» del otoño. Es evidente que, como en todo buen micro, aquí se esconde mucho más de lo que se cuenta. Es posible que ese matrimonio no funcione bien o, sencillamente, que la relación hayq caído en la rutina o el aburrimiento o,por qué no, que la mujer, como todos, también tiene derecho a tener sus secretos al margen del matrimonio.
    Enhorabuena

  7. Muy original, Violeta. Cada uno tiene sus secretos y sus desahogos y sus modos de disfrutar.Espero que tu prota viva en algún lugar donde la lluvia sea frecuente, pero no excesiva (que lo mucho también cansa). Suerte y un beso.

  8. Pues yo hecho de menos unas fotos para darle más realismo. Lo que me intriga es el móvil ¿Le da al play para ver un video rótico? ¿pa gravarse? ¿pa una videoconferencia con un señor como dios lo trajo al mundo? Porque pa arrimáselo allí tenia el vibrador. Intrigante. El relato es original, si señor. Pero eso, con unas afotos…

    Abracísimos.

  9. Violeta Moreno

    Muchas gracias por vuestros comentarios.
    La prota me dijo que se lo pasó muy bien aquella tarde, que no se hizo fotos del momento, y que efectivamente estaba un poco aburrida de su Pepe…
    Besos de las dos.

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