57. EN COMPAÑÍA DE RATAS (PURIFICACIÓN RODRÍGUEZ)
Alcé la voz y, desde la última fila de la Asamblea Planetaria Bianual, dije a todos los asistentes:
─“Os ruego que reflexionéis sobre el negro futuro que nos aguarda. Hoy, más que nunca, la vanidad de la minoría que posee las riquezas de la Tierra está destruyendo las precarias economías del planeta, y los que sufrimos sus injusticias hemos dejado ya de hacernos preguntas.
Han salpicado de manchas la limpia página de los principios de la ética, y hasta la estética se ha convertido en un borrón. Nos han robado todas las alternativas y lo obvio se ha convertido en una utopía.
Pero yo pregunto a los poderosos: ¿Quién os comprará mañana los productos de vuestra rapiña? ¿No seréis vosotros, tal vez, el próximo y único objetivo de la ira de un ejército de hambrientos? ¿No tenéis nada que decir ante tanto dolor? ¡Hablad, monstruos cobardes!”─.
─“Es lo que hay”─, contestó uno de ellos, parapetado detrás de los presidentes de gobierno, mientras hacía una discreta seña a las fuerzas de seguridad.
Abandoné la Asamblea huyendo por el alcantarillado, como de costumbre. Y, aun en compañía de ratas creo que, en las actuales circunstancias, quizá debería quedarme a vivir aquí abajo.
Sí. Sin duda llevas razón. Pues las ratas con las que hemos de convivir aquí arriba, acaban siendo los auténticos monstruos. Mucho más repulsivas y peligrosas, que aquellas con las que el personaje de tu relato se ha encontrado en el subsuelo.
Muy bueno y apropiado tu relato protesta. Enhorabuena y mucha suerte
Las ratas de alcantarillas tienen más sentido de la equidad que las ratas que pululan en la superficie. Buen micro de denuncia, con el que me solidarizo, suerte.
Saludos.
Eso mismo pienso yo. Muchas gracias y un abrazo, amigos.
Ese «Es lo que hay» suena demoledor. Menudos monstruos más reales nos pintas.
EL título es precioso, Purificación. Y eso que menta a esos animales que no gozan de buena fama.
Con el enunciado, ya nos avisas de quienes son las ratas..
Me ha pareceido una espléndida metafora.
Suerte.
Me gusta mucho el sentido que le das a las ratas en tu relato. Y por supuesto la reflexión acerca de quién les dará de comer a los que tienen cuando no haya nadie para comprarles. Me parece que das un mensaje muy directo a pesar de la metáfora. Mucha suerte 🙂
Y creo que he sido algo suave. Gracias de nuevo y un abrazo, amigos.