ENE08. LOS NIÑOS DICEN LA VERDAD, de Héctor Hernández
—¡Papá, papá, despierta!
—¿Qué pasa, Julián? ¿Por qué tanto escándalo?
—¡Hay un dinosaurio debajo de mi cama y me quiere comer!
—Calma, calma, no pasa nada. Vamos a tu cuarto y me aseguro que no te coma, ¿está bien? Pero tú te acuestas a dormir mientras yo reviso.
—Sí, papá.
—Veamos, de este lado no hay nada, y de este otro lado tam…
—Papá…¿Papá?
—…
Es bueno empezar con una sonrisa.
🙂
Bien hecho.
Un saludo
Es importante comenzar el año así. Gracias por tu comentario, Miguel.
Saludos,
Héctor
Corroboro, corroboro. Ñam, ñam. Saludos.
Gracias por tu ñam, ñam, Aurora.
Saludos para ti también,
Héctor
Se ve que el dino era pequeñito pero matón. Está muy gracioso el relato, aunque menos mal que no todo lo que ven los niños se materializa en la realidad. Saludos y feliz año,
Era matón, sí que lo era. Aunque lo de pequeñito mmm… No lo sé, quizá estaba enrollado o compactado o qué sé yo.
Gracias por tu comentario, Ana.
Saludos,
Héctor
Unas risitas siempre se agrade. Me gusta.
Recibe un saludo
Anna J R
Qué bien que te ha hecho sonreír.
Gracias por tu comentario, Anna.
Saludos,
Héctor
Me gusta este micro con humor. Perfectamente materializado el título del mismo. Si el padre lo hubiera sabido…
Un abrazo.
Amparo Martínez A.
El padre debió tomar las debidas precauciones. Aunque frente a un dinosaurio nunca se sabe.
Un abrazo para ti también, Amparo,
Héctor
Muy bueno. Hay que estar siempre despierto. Todo es posible.
Ciertamente, Jesús.
Gracias por tu comentario.
Saludos,
Héctor
Mira que asustarse por un dinosaurio que cabe debajo de una cama… Un relato muy divertido.
Bueno, quizá el pequeño tenía razón, ¿o no?
Gracias por tu comentario, Jesús.
Un saludo,
Héctor
Lo veía venir y aun así, me gustó mucho como lo acabaste y me hizo reír.
Saludos
Me da gusto que te haya sacado una sonrisa el micro, Miguelángel.
Gracias por tu comentario.
Saludos,
Héctor
Me gusta, es muy divertido!!
Suerte, Hector.
Gracias por tu comentario, Inés.
Suerte para ti también.
Saludos,
Héctor
Oh, oh, me temo que sí, los niños dicen la verdad, pero el papá se enteró tarde.
Muy bueno Héctor, suerte con él.
He ahí las consecuencias.
Gracias por tu comentario, Yashira.
Saludos y suerte para ti también,
Héctor
Hector muy bueno. El papá valiente… la prudenicia e suna virtud :O)
Un saludo
Sí que la es.
Gracias por tu comentario, Ene.
Saludos,
Héctor
Ese final es el mismo que yo esperaba cuando nadie se creía mis pesadillas. Bien, Héctor.
Un abrazo.
Ojalá y ese final hubiese llegado antes para ti.
Gracias por tu comentario, Susana.
Un abrazo,
Héctor
Muy divertido, Hectór, me gusta que has elegido al celebre dinosaurio para tu relato, lo que aumenta la ironía y el humor. Creo que cada escritor tiene un dinosaurio debajo de su cama, que le quiere comer, pero no todos se dan cuenta de ello.
Un abrazo.
Gracias por tus palabras, Nicoleta. Creo que le has dado al clavo.
Yo he luchado varias veces con el mio 😉
Un abrazo,
Héctor
¡Que buen apetito tiene el dino!!
Simpático tu relato, arranca sonrisas.
Suete y…
Besicos muchos.
Gracias por tu comentario.
Suerte para ti también y un saludo,
Héctor
Hector me he reido mucho, además de que compartimos la misma sintonía de micro de diálogo papá-hijo a causa del dinosaurio. Al título, estupendo-le faltaría el subtítulo de «y nunca les creemos».
Mel, muchas gracias por tu comentario.
Mira lo que le pasó al padre por incrédulo :).
Saludos,
Héctor
Ves?, el dinosaurio está y yo intento escribir. A ver, cuál ess el sueño?
¡Escirbir por supuesto!
Enhorabuena.
Lines
¡Y vaya que estaba!
Gracias por tu comentario, Lines.
Saludos,
Héctor
Enhorabuena Héctor me has arrancado una sonrisa con tu dinosaurio glotón
A ver si hay suerte, saludos
Saludos, José. Gracias por tu comentario y lo mismo para ti.
Un abrazo,
Héctor
Sólo cambiaría el título, es demasiado explícito, cuenta demasiado para empezar. Por lo demás, una traca de humor. Genial.
Hola, 1984, te agradezco tu comentario. Con el título simplemente trate de darle fuerza a la idea presentada en el relato. Si consideras que fue demasiado, entonces el error es mio.
Saludos y gracias por leerme,
Héctor Hernández
Je,je. Aquí no hay Pedro y el lobo. Me has hecho reír, y eso se agradece. Por su sencillez y simpatía tendría que estar entre los del mes.
Hola, Ximens. Realmente es un relato muy sencillo con bien dices. Y la verdad que agradezco las palabras de un escritor de tu calibre.
Saludos,
Héctor Hernández
Jjejejeje, bueno no es el mismo dinosaurio que ilustra «Este mes nos inspira» porque es un dinosaurio herbívoro y es gracioso que quepa debajo de la cama, como las caricaturas que de una maleta pequeña sacan todo. Suerte, saludos.
Hola Elizabeth, me hiciste recordar a Sport Billy.
Gracias por tu comentario y saludos,
Héctor Hernández