ENE68. INEXPLORADO AMANECER, de Julio Olmos de Prada
Cuando desperté no oí eco ni propio ni ajeno. Ninguna parte de mi cuerpo respondió a mi aspiración de sacudirme. Mis ojos incapacitados me devolvieron sólo oscuridad. Frío y atónito evidencié como mi alma alzaba el vuelo.
Buen título y buen micro. Cuatro frases que sintetizan toda una vida que deja de serlo.Felicidades y suerte.
Bueno, sí señor. Escalofría. Una lección para vivir el ahora.
Lines
No sabemos que nos espera al otro lado, pero la tuya es una buena manera de describir el trance. Felicidades.
Suerte y un saludo.
En pocas líneas, veo los sentidos del oído, tacto y vista. No son demasiado impactantes, pero es que has reducido taaanto. Yo creo que daba esta idea para algo más.
Un abrazo.
Pues me gusta mucho, si señor.
perfectamente resumido la angustia de la muerte con esta frase:
«Ninguna parte de mi cuerpo respondió a mi aspiración de sacudirme.»
solamente falta saber si queda consciencia después de la muerte…