28. «Esta es la historia de Don Calcetín»
Don Calcetín era un calcetín que había nacido para serlo, vestir un pie, calentarlo, protegerlo del duro calzado…; su función era importante, era ayudar a una persona en su caminar.
Don calcetín, que siempre iba acompañado de su media naranja, se quedó viudo y eso cambió totalmente su realidad. Como vivía en una casa en la que nunca se tiraba nada, Don calcetín se quedó en una esquina, arrinconado en el cajón de los calcetines. Don calcetín se sentía solo y triste.
Un día, inesperadamente alguien abrió el cajón y ¡lo eligió!, no era el pie grande para el que había nacido, era uno más pequeño, que lo tomó con mimo y lo llevó consigo.
Nunca más volvió a su antiguo hogar, y menos aún a esa esquina olvidada.
Lo rellenaron de trapos, le cosieron botones, lanas de colores y fieltro.
Ya no era un calcetín, ahora era una muñeca con ojos, nariz, boca y hasta con varios vestidos.
Don calcetín, que pensaba que no había mayor felicidad que cumplír la misión para la que uno había nacido, se dio cuenta de que había estado equivocado; tras su metamorfosis la felicidad era aún mayor.
Ahora se llamaba Enriqueta.
Hasta las personas a veces se dan cuenta que han nacido para hacer una cosa muy distinta a la que en su diario realizan. Una bonita historia, podría ser un cuento para niños y al final don calcetín, travestido en Enriqueta sale de entre las cortinas saluda a su público.
Suerte Isabel y feliz noche.
Gracias Mercedes.
Que cada Don Calcetín descubra dónde está su mayor felicidad y a ella dedique su vida, verdad?
A veces no es fácil.
Con moraleja, simpático y original tu relato. Felicidades.
Besicos muchos.
Pues muchas gracias por tu comentario, que también es muy simpático.
Y encantada de tu visita.
?
Precioso texto y preciosa metamorfosis, Isabel, al igual que el mensaje que nos transmites: muchas veces en el cambio está la evolución.
Me ha encantado tu texto. Enhorabuena.
Muchas gracias Manoli. El cambio, la metamorfosis, la evolución….todo es lo mismo, es encontrar aquellas herramientas a modo de trapos y botones que nos permiten expresar, de una manera más segura sincera quienes somos y por supuesto qué nos hace felices. Creo que la creatividad personal, su expresión en cada uno, es la manera de conseguirlo.
Gracias por tus palabras
Muy bonito este cuento y muy lleno de significado. Enhorabuena Manoli. Un cálido saludo
Muchas gracias por tu comentario. ?
Isabel, que bueno y gracioso tu cuento; y cuanto cuenta sin decirlo. Suerte y saludos
Muchas gracias Calamanda, me alegro de que te haga gracia. A mí también me hace sonreír.
Besos,
Preciosa fábula revestida de inocencia, que nos hace reflexionar sobre la soledad y el coraje de afrontar los cambios que nos depara la vida sin miedo. Muy bueno, Isabel. Abrazos y suerte.
Dicen que todo en la vida sucede por algo, que los cambios pueden ser una magnífica oportunidad para evolucionar, para encontrar otro camino, el que quizá nos conduzca a la felicidad… En el fondo, la vida es eso, un continuo caminar hasta encontrarnos a nosotros mismos. Creo que algo de esto es lo que pretende transmitir este tierno relato que, como todo cuento tradicional, tiene su «moraleja».
Me ha encantado leerlo, Isabel; es delicioso.
Va a ser verdad lo que dicen (eso de que todo sucede por algo). Hoy yo necesitaba encontrarme con algo bello. Y aquí lo encontré. Gracias.
Un afectuoso saludo y mucha suerte.
Cambios, oportunidades, soledad, coraje… Tu cuento está lleno de enseñanzas y, aunque el tono es el de un cuento infantil, vale para todos los públicos.
Suerte y abrazos,