27. ESTANCIAS DEFINITIVAS
…donde el cielo se une con el mar,
lejos de aquí.
Nino Bravo
“Los paraísos existen, pero no permiten nunca estancias definitivas”, decía la nota de Giovanna. En la puerta del frigorífico, hábitat natural de todas las notas de despedida.
Mi matrimonio empezó a torcerse el mismo día de la boda. Versado en las artes del machismo, quiso enseñarme donde estaba mi sitio. Si hace falta, a hostias, decía. Por eso lo del vecino, las primeras veces con carga de culpabilidad, después con un “que se joda” que le dedicaba tras cada polvo. Luego, su compañero de trabajo, para que doliese, y al final su hermano, para que doliese más. Hasta que apareció Giovanna, como una isla imposible en mitad de aquel desierto que era mi vida: risas, curvas, besos… Me habló de un lugar que algunos marinos de su costa juran haber visto en atardeceres tardíos, una isla que no está en el mapa, donde no han llegado nunca los hombres y de la que jamás regresan las mujeres.
Tengo ya la isla incrustada en mi memoria y la cabeza llena de maletas, el viaje hace tiempo que empezó. Tal vez sea cierto eso de que los paraísos existen.
Pues que no se lo piense, y siga adelante.
Fuerza tiene este relato.
Saludos.
Hay paraísos, Fran, aunque algunos están aquí.
Fran, a grandes males grandes remedios, pares decirnos. Bien contada esta trama tan enredada en infidelidades. Suerte y saludos
Luego de la decepción queda flotando un sueño, que no dejará pasar.
Un abrazo y suerte.
Fran, creo que es hora de que tu protagonista se decida a buscar y a encontrar ese paraíso. Buen relato. Un beso
Ah pero qué no existen los paraisos??? Cómo que no?? ya os digo yo que si, que yo tengo varios.
Buen relato Fran, con una escritura impecable.
Buen relato lleno de optimismo.
Felicidades
Parecemos obligados buscar ese paraíso donde el cielo se une con el mar, lejos de aquí, como dijo Nino Bravo, o quizá no haya que viajar tanto y todo esté más cerca de lo que pensamos y no sepamos verlo, quién sabe, el caso es que siempre estamos a la espera de ese algo más que no tenemos, un terreno idílico o una persona ideal que se supone nos colmarán para siempre.
Un saludo y suerte.
Es una historia muy bonita, que toca muchas teclas. Lo has envuelto todo en metáfora y creo que te ha quedado muy bien. Mucha suerte 🙂
Me he despistado un poco con la nota del frigorífico del principio de tu relato. Nos dices que es el habitat natural de las notas de despedida, pero es una nota de Giovanna, con la que parece dispuesta a fugarse al final. ¿Se está despidiendo Giovanna? ¿le está dando un ultimatum? No sé, no me ha quedado claro, aunque me ha gustado mucho como has desarrollado la historia y el lenguaje que empleas. Debe ser que ya se ha hecho muy tarde, mañana intentaré volver a leerlo.
Un beso
Felicidades Fran! He tardado en volver a leerlo (menos mal que el jurado ha tenido el acierto de ponerlo de nuevo en mi camino) y en una lectura más atenta he podido entender bien la historia de esta mujer atrapada entre hombres que encuentra por fin su isla paradisíaca (GIovanna).
Enhorabuena.
Felicidades, Fran, por esa mención. Un relato de venganzas y huidas. Me cuesta un par de lecturas hasta comprender la nota inicial. Luego todo cuadra.
Han de existir Fran, pero como me dijo un hijo mío, igual se sufre aquí y allá. Excelente relato. ¡Muchas Felicidades!
Felicidades, Fran, muy buen relato lleno de libertad.