83. EXTRAÑOS EN LA LADERA (Nani Canovaca)
Las plantas no necesitaban riego porque había diluviado, pero yo sí que precisaba acercarme a verlas. Era algo vital para seguir en la tarea cotidiana. Sabía que la recovera no me engañó cuando me vendió las semillas y me dijo que no eran como las otras de temporadas anteriores. Después de la intensas lluvias recibidas, tenía la certeza de que algo se habría transformado así que me asomé tapada con mi viejo chubasquero y comprobé como habían crecido una ramitas de las que salían unas protuberancias donde suponía saldrían hojas y más tarde, los capullos de mis maravillosas plantas. Al día siguiente ya los capullitos apuntaban con cierto colorido en los extremos, de donde al tercer día, empezaron a emanar personajillos delicados y variopintos. Algunos tenían alitas y volaban alrededor de las plantas, otros llevaban en sus manos notas musicales que eran con lo que se identificaban. Desde entonces, no estuve nunca sola, no me faltó música, ni alegría por doquier. Tuve que adiestrar al gato y al perro, porque al principio quisieron lamerlos y alguien podría salir mal parado pero más adelante, formamos una gran familia junto a los que supieron aceptarnos y conseguir descubrir un mundo de ensueño.
Qué rara, pero que hermosa la sonoridad de esa palabra, «recovera». Me encanta, lo mismo que tu relato. Lo veo como una suerte de cuento infantil, muy colorista y que causa embeleso en su aparente sencillez. Suerte, Nani. Un abrazo.
Muchas gracias Jesús. A mí también me gusta esa palabras y todas las que suenan a otros tiempos y que fueron tan importantes para nuestros mayores en otros tiempos. Me alegra saber que te ha gustado el micro. De nuevo muchas gracias por tus buenos deseos.
Besicos muchos.
Además de aprender una palabra nueva, recovera, me has dado una idea fantástica para repoblar las laderas quemadas por los incendios. Patenta la ocurrencia antes de que te la roben. 😀
Edita, ojalá pudiéramos repoblar todo lo que los insensatos queman. Estos seres forman parte de mi vida, me acompañan con asiduidad, a veces hasta se meten en mi cocina y me lían embrollos que no se como salir de ellos.
Besicos muchos.
¡Qué bonito Nani! Ese mundo mágico que has creado a través de las semillas, hoy casi todas son transgénicas o algo así, vamos que cuando plantas una semilla, los frutos suelen ser estériles, pero los tuyos no, los tuyos han generado una vida única y no me importaría plantar algunas semillitas en mi jardín.
Me ha encantado, ojalá le guste también al jurado. Mucha suerte.
Muchas gracias Maribel por tus buenos deseos. Me gusta que te guste, :), y sí, ojalá las semillas de hoy en día fueran de las de siempre, por eso hay que al menos crearlas, sembrarlas y rodearnos de colores, aunque sean imaginarios.
De nuevo muchas gracias.
Besicos muchos.
Un cuento precioso y lleno de buenas vibraciones.
En la actualidad necesitamos un poquito de fantasía y fíjate hasta tu perro y tu gato respetan tus plantas y sus «retoños».
Un abrazo y mucha suerte.
Tienes toda la razón Vitolosa, tenemos que rodearnos de fantasía y color y sobretodo, respeto, mucho respeto (nos iría mejor).
Muchas gracias.
Besicos muchos.
Hola, Nani.
Qué semillas tan prodigiosas las que le vendió la recovera a tu protagonista: igual eres tú misma; y coincido con Jesús Garabato en que es una palabra, «recovera», hermosísima. No solo hubo brotes, que estallarían intensamente, como dijo el poeta, hoy que toda simiente es «ful», como apunta Yashira. Además surgieron «serecillos» que convivieron con la protagonista y sus mascotas. Una suerte de cuento de Navidad, muy tierno y muy recomendable. Para niños y menos niños. La difícil y enriquecedora convivencia. Y no es un cuento ñoño. Me ha gustado mucho. Felicidades, Nani, y un beso.
Muchas gracias Martín por tu comentario y todo lo que me dices. Te agradezco que no consideres «ñoño» este micro. Puede ser infantil pero a veces tenemos que rodearnos de inocencia para poder sobrevivir a tanta injusticia, egoísmo y poco humanidad que nos rodea. Los mayores y los niños, necesitamos de aire fresco de vez en cuando y al menos se intenta.
Muchísimas gracias de nuevo.
Besicos muchos.
Nani, bella historia de seres fantásticos y reales que saben avenirse y ser felices. Suerte y Feliz Navidad
Muchas gracias Calamanda. Nunca dejaremos de ser niños si seguimos creyendo en seres fantásticos que nos hagan la vida más dulce.
Besicos muchos.
Nani, pura magia tu relato. Tierno y cautivador. Me ha gustado muchísimo. Besitos y suerte.
Muchas gracias Mª José. Qué no se pierda la magia!! Me gusta que te guste.
Besicos muchos.
Un bonsái social, un mundo de bolsillo. Nani, deberías de patentar esto antes de que se te adelanten. El remedio a la soledad en nuestras manos. Enhorabuena Nani!!! Muchísima suerte!!!
Bssssicos a cienes!!!
Muchas gracias Juancho. Pues sí, habría que patentar la felicidad y la magia de seres que sean capaces de hacernos felices.
Muchas gracias por tus buenos deseos.
Besicos muchos.
Precioso relato, Nani. Ojalá fuera tan fácil plantar las semillas de la fantasía.
Un beso.
Muchas gracias Carmen. Ojalá fuera tan fácil. Pero quién nos dice que no podemos hacerlo?
Besicos muchos.
¡Qué bonito, Nani! Me ha encantado la manera de lo, a decir verdad, es un maravilloso cuento infantil. Buon Natale, Sotirios.
Muchas gracias Sotirios. Agradecida.
Feliz Navidad.
Besicos muchos.
Bonita historia colorida y musical, que bien podría ser un cuento infantil.
Suerte
Blanca, me gusta que te parezca colorida y musical. Al menos eso intentaba. Muchas gracias.
Besicos muchos.
Qué envidia Nani, yo también las quiero, ya me dirás dónde has comprado esas plantas…
Imaginación al poder, te ha quedado muy bonito, ya verás cuando se lo leas a tus nietos…
Un besote grande con mis mejores deseos para estas Fiestas…
Ya lo cuento Rosy, me las vendió una recovera, ellas son mágicas y haberlas ailas también.
Espero que le gusten mis cuentos a Mario e Iván, es una satisfacción escribir pensando en ellos.
Feliz Navidad también para ti y los tuyos. Muchas gracias.
Besicos muchos.
Vaya patada que le he dado al diccionario, «haylas», quise decir.
Este mundo competitivo y lleno de enfrentamientos, dominado por el egoísmo, cuando no por el odio visceral y sin sentido, a menudo nos desagrada, pero no tenemos otro. Tratamos de sobrevivir en él y, a veces, mejorarlo aunque sea de una forma mínima, pero muchas veces nos supera. Pese a todo siempre hay espacios en los que volcar la imaginación, lo mejor de nosotros, por eso leemos y escribimos, necesitamos universos amables y, si no existen, inventarlos, donde la ilusión y la bondad sean posibles, aunque nos tachen de ingenuos. Tu protagonista ha creado un micromundo en su vida cotidiana que le recarga las pilas para poder continuar en la otra realidad paralela, la tangible, la que no se puede eludir, llena de punzadas.
Este bimestre unos cuantos hemos elegido jugar con la utopía con la excusa de la magia, como tú en este hermoso relato. Muchas mentalidades prácticas nos tacharían de ilusos. Digan lo que digan, es una evasión necesaria y bendita sea.
Un abrazo, Nani. Suerte y felices fiestas
Así es Ángel. Bendita utopía, ilusión, magia e incluso, ingenuidad. Sobre todo a nuestros niños debemos ofrecerles el poder de soñar, la vida ya se encarga de demostrarnos otras cosas, pero mientras tanto, la imaginación al poder. Al final también la vida nos demuestra que otros saben presagiar el futuro, así bendita imaginación. Muchas gracias por tus buenos deseos.
Felices fiestas también para tí.
Besicos muchos.
Me imagino al narrador en una especie de asilo o lugar apartado donde transita la vejez y necesita de esa planta y esa ilusión para poder seguir viviendo. Es original tu cuento y esperanzador. Suerte.
Muchas gracias Ximens. Creo que todos necesitamos de cuentos esperanzadores y que nos aporten un poco de ilusión y fantasía. Qué sería de la vida sin los cuentos?
Besicos muchos.
Qué bonita manera de llevarnos al reino de lo fantástico, de ese universo paralelo que habita en nosotros y que no siempre sabemos ver. Me recuerda tu bello cuento, aquella frase del Principito que decía que «Lo esencial es invisible a los ojos.» Gracias a ti, hemos podido verlo. Un abrazo. Feliz 2018. Gracias por pasar por mi relato.
Hola Manuel. Muchas gracias por tu comentario. ese universo paralelo es muy necesario hoy en día, ya que como bien comentas en la frase del Principito, «Lo esencial es invisible a los ojos», al menos si no lo vemos, si sentirlo y compartirlo. De nuevo muchas gracias.
Besicos muchos.
Genial la recovera que vende sus semillas mágicas a quien las necesita.
¡FELIZ AÑO 2018!
Muchas gracias por tu comentario Isabel. La recovera sabía lo que hacía.
Feliz Año Nuevo parta ti también.
Besicos muchos.