124. FANTASÍA INACABADA
“Cuando seamos mayores, quiero casarme contigo”, le dije a mi amigo invisible aquella tarde lluviosa mientras contemplábamos a través de la ventana cómo los hoyos se convertían en charcos.
Y pasó el tiempo. Y corrimos por la playa y dejamos nuestras huellas tatuadas en la arena. Escalamos los rayos de la luna y esculpimos nuestros bustos en las estrellas. Leímos historias interminables con las páginas manchadas por el tiempo y escribimos nuestros sueños de otoño en las hojas doradas de los árboles.
Y el tiempo pasó. Y una tarde lluviosa, con mi futuro bajo el brazo y la boca llena de preguntas revueltas, me fui sin despedirme mientras un pez de colores boqueaba en mitad de un charco.
Hoy contemplo el paso del tiempo a través de la ventana mientras las sombras de la noche se ocultan silenciosas bajo la cama. Y sobre mi viejo escritorio, al lado de un ramo de flores aburridas, una hoja dorada reclama el epitafio que nunca escribí.
Una protagonista que siente la vida como un futuro abierto, donde reina la fantasía y todo es posible, incluso un amigo invisible e inseparable. Una joven imaginativa y sensible que, llegado un momento, opta por abrazar la realidad y deja esa existencia ilusionante a la mitad, que cuando pasa el tiempo es dominada por la sensación de de haber abandonado lo que realmente quería.
Un texto para deleitarse en su poética sin perder de vista su fondo.
Un abrazo, Margarita. Suerte
Muchas gracias, Ángel, por tu tiempo, por tus palabras siempre acertadas y por esas caricias literarias.
Un abrazo
Me llena de nostalgia. Para hacerse mayor a veces hay que dejar muchas cosas de lado. Algo que tarde o temprano tenemos que aprender. Pero no por eso se las olvida
No podemos cargar con todo el peso de nuestro pasado, pero por suerte los recuerdos son livianos.
Muchas gracias por tus palabras, Patricia.
Una bella prosa poética. Una historia que boquea nostalgia, otoño, lluvia y un tiempo perdido entre unas marchitas flores y un papel vacío de epitafio.
Me encanta como escribes siempre, allá por donde te lea.
un beso guapa.
¡Belén! Vamos a dejarlo en intento de prosa. La poesía la has añadido tú con tu comentario, ¡gracias!
Un beso
Concuerdo con Belén tu prosa es hermosa, resumes sueños y vida, extiendes el tiempo para volver al origen y recordar el ayer.
Hermoso.
Un abrazo y suerte.
Gracias por el hermoso calificativo, Moli. Y por tu visita.
Un abrazo