FASE 1E-Encuentro 9
Edita Nogueira Tallon / Blanca Oteiza / Mar González
Los participantes aquí señalados tendrán que publicar en el espacio reservado a los comentarios de esta entrada del blog, un relato de un máximo de 100 palabras (título no incluido) antes del plazo fijado y que cumpla las siguientes condiciones.
TÍTULO: Incluir un color
INCLUIR EN EL TEXTO: Septiembre
INCLUIR EN EL TEXTO: Martes
APARECEN: 5 personajes
PLAZO: antes de las 20 horas del domingo 18 de enero.
El domingo 18 de enero recibiréis en vuestro mail un enlace para que votéis a un relato de los tres de otro encuentro (se os asignará al azar) Para continuar en competición tendréis que hacerlo obligatoriamente entre el domingo y el lunes19 de enero.
El resultado de este encuentro se hará público como comentario en este entrada del blog y en una entrada general de la sección EnoTiCias.
GRIS ZORRO
Septiembre avanza veloz; las primeras hojas arremolinadas a su puerta presagian un otoño revuelto. El marido se ha empeñado en que las tres hijas pasen este curso en un internado londinense. Para perfeccionar el inglés, dice. Ella sabe que ese no es el motivo, sino una simple coartada. El martes pasado cuando, indispuesta, no asistió a la sesión habitual de Pilates, descubrió en el gesto contrariado de su esposo lo que debía haber visto hace tiempo. Pero no se atreve a impedir el destierro de las niñas por miedo a que él sospeche que ha siso descubierto.
COLOREANDO EL NEGRO
Los martes después del colegio pasaba la tarde con la abuela. Ella me enseñaba a hacer rosquillas mientras me contaba historias. No eran cuentos como los de mamá, eran cosas que pasaron de verdad en una época en la que las novias se casaban de luto. No había tele pero había campo, monte y charcas donde las ranas croaron todas a la vez el día que el abuelo llegó al pueblo. Fue mucho antes de aquel mes de septiembre que no paró de llover y no pudieron salir de casa. Nueve meses después nació el tío Antonio.
MIRADA GRIS
Regresó el último martes de Septiembre, cuando el otoño comienza a adueñarse de las calles. Ya nadie le esperaba, ni siquiera sus compañeros de banda.
Un jueves al principio de la primavera se fue a una orquesta para recorrer kilómetros y conocer pueblos. Tras la experiencia veraniega volvió con ojos apagados de quien pide una segunda oportunidad. No se encontró a nadie camino al local de ensayo, pensó que mejor así, no quería dar explicaciones a los vecinos. Entró, estaban los cuatro que emocionados no dudaron en abrazarlo. Ya piensan en el próximo concierto en el bar de la esquina.
Chicas, ¿os habéis fijado en los tres títulos? ¡Qué trío más oscuro! 🙂
Sí, cuando colgué el mio lo vi y pensé lo mismo!
Mira que hay colores para escoger… yo creo que ha sido al asociarlo con Septiembre, mes melancólico por excelencia.
Por cierto, preciosos relatos!