Esta Noche Te Cuento. Concurso de relatos cortos

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FEB106. JACULATORIA, de Javier Ximens

¡Ahí está!, embutida en un traje corto y generoso de escote. Y él con la mirada en su culo.
Mi Manolo me quería. Cuando fallecí, sacó mi fotografía y la puso sobre el televisor. Desde aquí veo la mesa, el sillón y, encima, el Sagrado Corazón en su vitrina. He sufrido al verlo padecer con el Betis y cenar sardinas en lata.
Una noche bajó la vecina que tendía la ropa chorreando. Se desabrochó tres botones de la blusa y al poco apareció él con el salero.
Sólo habían pasado siete años cuando Manolo empezó a salir los domingos. No se lo reprocho, yo me encuentro más ajada y él tan fresco, pero esta mañana me extrañó que limpiara por primera vez el polvo, sacase la imagen de la vitrina, la colocara mirando hacia la pared (cuando sabe que así se puede vencer), y que pusiera la mantelería de Lagartera.
Ahí están, comiéndose un pollo frito. No paran de reír, pero… ¡Será golfa!, pues no va y se tumba despatarrada en el sillón, ¡cacho pendón! y… ¡Ah!, ¿pero qué haces Manolo?, ¿adónde me llevas? ¡No!, ¡otra vez al cajón de la cubertería, no!
¡Sagrado Corazón de Jesús, en vos confío!

http://ximens-montesdetoledo.blogspot.com.es/

60 Responses

  1. Magistral y jocoso relato. Hay cosas que controlar y que no se le escapan a una esposa, así sea desaparecida, en foto o con telepatía. Genial la mantelería de Lagartera y el retrato que se vence.
    La verdad es que el hombre tardó poco en darle el cambio, !sólo 7 años! !Hombres!
    Felicidades y suerte.

  2. Paloma C

    Me mato a reír. Muy bueno el detalle de que la vecina tendiera la ropa chorreando. Esos son los pequeños detalles que hacen grande un relato.

  3. Jajaja qué detalle poner el santo de cara a la pared, pecar sí, pero con respeto.
    Muy bueno, Ximens.
    Solo por las risas que me has traído, deberías ir directamente a la final.
    Un abrazo

  4. Creo que nos has alegrado el día a todos los que hemos leído tu relato. Sentido del humor a manos llenas y la voz de la protagonista muy real. Gracias por regalarnos unas sonrisas.

  5. Anonymous

    Que buen relato . Por lo que se ve no habrá que fiarse de las vecinas, en cuanto desapareces ……pollo frito. Se acabaron las sardinas en lata. Mucha suerte Ximens. Elena Sánchez

  6. Buenísimo, Ximens!! con arte, humor y bien escrito, nos dejas esa historia de ese viudo que se cansa de estar solo. Buen punto de vista del narrador!!

    abrazos

  7. No sé cuan bien escrito quedará este comentario porque aún tengo lágrimas en los ojos de tanto reír.

    Destaco, como Pablo, ese «se puede vencer», que pega tanto al relato al habla real. Magnífica construcción de los tres personajes, caballero.

    Aplaudo mucho este micro con perfume claramente «arizano».

    Un abrazo.

  8. Me gustó Ximens, muy divertido y visual. Supongo que desde el cajón, aunque no pudiese ver, escucharía a ese Manolo jadear como nunca antes. Y es que las vecinas están ahí para algo.

    Gracias por el relato. Suerte

  9. Hasta que la muerte les separe…
    Sólo una cosita: Si la pone de cara a la pared se supone que no puede ver como la vecina se espatarra. Pero en fin, una nimiedad. El relato es muy divetido.
    Un abrazo Ximens

    1. Mei, quien narra está en la fotografía encima del televisor. Lo que pone cara a la pared es la imagen que saca de la vitrina, es decir el Sagrado Corazón de Jesús. Si se confunde es que está mal escrito. Gracias por tu comentario.

  10. Anonymous

    Muy bueno Javier. Para mi tiene un punto a l cine español de los 60. Me encanta la fluidez y la socarronería.

    Un saludo

    Félix Valiente

  11. Chico, sin palabras me has dejado. Una escena tremendamente visual y bien contada, si es que casi te dan ganas de arrancarle a Manolo la fotografía y echar escaleras abajo a la vecina.

  12. Ximens, nos regalaste un cuento redondito, pefecto. ¡me has heco reír con ganas! Creo que hasta el Sagrado Corazón reía, porque vos no te lo creés pero los santos ven de espalda. ¡Palabra de catequista latioamericana! jajajajajajaaaaaa sos un genio de la narrativa, celebro el haberte conocido y el poder valorar tu evolución.
    ¿Viste? A ese hombre ni la muerte lo separó del yugo, jaja Debieras escribir las palabras de la esposa desde el cajón entre cuchillos y cucharitas, jajajaaaaaaa Porque yo, si fuera ella, me las ingeniaría para espiar por la rendija…Nada de confiarn el Sagrado Corazón… Me ha gustado leer la jaculatoria final, me transportó a la niñez en el colegio de monjas, la decíamos luego de cada recreo. ¡Otro punto para tu relato! Risa y nostalgia unidas! Más pura picardía de la buena.

  13. Hilarante hasta decir basta. Visual y lleno de magníficos detalles muy reales. Los tres personajes se ven, se les conoce por sus hechos.
    La muerta que aún desde el otro lado sigue controlando. El viudo primero desconsolado y después empezando a recuperar el tiempo perdido. Y esa vecina, la de la ropa chorreante, que encuentra motivos para pegar la hebra con el viudo.
    ¡Ah! Y se me olvida la imagen, esa que se vence si la ponen cara a la pared.
    ¡Muy bueno, Ximens! Y sobre todo con un gran sentido del humor.
    Me encanta leerte en este registro.

    Besitos

  14. Jajaja… divertido, humorístico, hilarante, y …bien construido. La escena se ve perfectamente y a nadie le extraña que hable el retrato, y eso debe ser porque en tus manos de artista ha cobrado vida en un corto espacio.

    Me gusta Ximens, y me marcho con una gran sonrisa ¡pobre mujer! ¡qué destino acompañada de las cucharas y los tenedores!…y pensar…que así podemos acabar todos…. ayyyy….

    Besos por tu gran sentido del humor.

  15. Di que sí, que lo mejor, hasta para los muertos, es la risa. Tus palabras me han transportado a la infancia, a la casa de unos parientes en un pueblo castellano, y a los buenos ratos que pasé allí, jugando a esconder los cuadros en los cajones de la cómoda…
    Muchas gracias por el buen rato.
    A+B

  16. ¡Fantástico! Si es que cuando se está más allá es mejor centrarse en las cosas de allí y olvidarse de las de este mundo, ya ves lo que pasa por echar un vistazo a lo que quedó atrás.

    Mi enhorabuena, original y muy,muy divertido.

    Saludos.

  17. Anonymous

    Muy divertido nos dejas una gran sonrisa en los labios después de leer tu historia. Qué causado debe ser tener que controlar hasta desde el mas allá. Felicidades Javier. Gloría ArCos

  18. Te ha quedado un relato tan lleno de pinceladas que nos imaginamos hasta el más mínimo detalle. Muy bueno lo de la lata de sardinas antes y el pollo frito después, y el resto de imágenes, perfectas.
    Un abrazo.

  19. Jesús Alfonso Redondo Lavín

    Pues verdaderamente ya no se pueden decir más elogios sobre este relato y sobre su relatista. Dominas todos los estilos, desde el drama a la comedia. He leído que una misma historia en sí dramática, termina en comedia con el paso del tiempo; y este relato es un claro ejemplo. Eres un maestro y este blog debe de estar orgulloso de tu fiel presencia, para goce de los que somos asiduos.
    Un abrazo.

  20. Bueno Ximens, divertidísimo!! Dibujas imágenes geniales que retratan bien la situación del hombre solo (cenando sardinas), la vecina en búsqueda de plan (los botones..) los siete años de viudez… y ese diálogo interno, y si conozco gente que da la vuelta a las fotos cuando hay alguna discusión en casa, lo de la jaculatoria me encanta!!! Me he reido cantidad.

  21. Anonymous

    Coincido con Fernando: un relato fresco y ameno. NO es uno de tus mejores textos (literariamente), en eso seguro que coincidimos, no? Pero levantas una sonrisa generalizada, y eso siempre se agradece 🙂
    Un abrazo
    NACHO RUBIO

  22. Es muy gracioso. ¡Siete años nada más! Hay hombres que no respetan nada, ja, ja. Me parece que ahora que Manolo se animó, a la pobre le quedan muchos ratos de estar en el cajón.
    Suerte y un abrazo

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