FEB97. ALLÍ DONDE LO ESCONDO, de Raúl Ariza Pallarés
Soy hombre de rostro suave. De líneas femeninas imperturbables al paso del tiempo. Soy hombre de labios que piden besos y demandan deseos. De finura esculpida por las manos sabias de un dios inspirado. De mirada familiar, cariñosa y aparentemente buena. Soy hombre de gestos cadenciosos, sonrisa amiga y abrazos prontos. Alguien a quien seguro es fácil querer. Soy paradigma.
Pero soy hombre. Y por tanto, crío miedos, dudas y necesidades. Y tengo por debilidad la belleza, mi propia belleza, y por pecado la envidia. Porque envidio cada instante que consumo. Yo me quiero joven. Solo joven. Y además tengo un pasado inimaginable, quizá sombrío, que habla de aquel día que me despreciaste. Viejo marica, me llamaste en un desaire. Y luego señalaste burlón un par de arrugas en mi rostro.
Que dónde escondo mi alma. Si quieres verla tendrás que bajar conmigo al sótano, cerrado siempre bajo siete llaves. Allí, entre cachivaches infantiles, herrumbres de la memoria y los agusanados pedazos de tu cadáver desmembrado, la tengo tapada bajo una sábana. Para guardarla del polvo.
Me ha gustado mucho, por su ritmo y por la sorpresa final. Muy bien llevado.
Muy bueno Raúl, muy bien plasmada esa obsesión que se repite en todo el relato y que, como un bucle interminable te va llevando al mismo punto. Muy bueno el ritmo, la puntuación. En fin, que ha sido un placer haberte leído.
¡¡Brutal!!
Me he leído muchos de los relatos de este mes y, a sabiendas de que soy el menos indicado para opinar, puesto que sería incapaz de atreverme a participar en un concurso como éste (demasiada calidad para mí) la mayoría o pecan de sentimentaloides, o se quedan en la mera ocurrencia (dicho sea con todos mis respetos). Sin embargo este no solo capta el espíritu del tema del mes, sino que que tiene el ritmo, la dureza y la sensibilidad que yo busco en un micro.
Que me ha gustado mucho, vamos.
Santi, te invitaría a participar. La medida de la calidad la dan los lectores, y aquí no sólo se participa para ganar, sino también por disfrutar y comunicarse.
Ahora bien, para demostrar admiración y valoración hacia alguien no es necesario denostar a los demás. No estoy de acuerdo ni mucho menos en que la mayoría sea sentimentaloide o se queden en la mera ocurrencia. De cualquier manera, el respeto hacia los demás es la base para recibir respeto.
Saludos
Magnífico retrato de cuerpo y alma.Las descripciones, el final, el ritmo, el fondo, todo es muy bueno, incluí do el título. Felicidades y suerte.
Rául, cuanta fuerza e imaginación tiene tu historia; digna del tema de este mes. Suerte y saludos.
El ritmo de tus palabras da una enorme fuerza a la historia. Increíble relato sobre obsesiones y miedos. Me gusta Raúl, felicidades por escribir así. Un abrazo
¡vaya sorpresa¡ mi amigo Raúl. Me alegro de verte por aquí. Buen relato, lleno de fuerza y de tu imaginación y buen hacer y escribir.
Besos, muchos
Es muy tuyo, Raúl. Ese giro inesperado, a bocajarro, es tu «marca de la casa»… muy «elefantiásico»… 🙂
Gracias por avisarme de la existencia de este relato y de este concurso.
María.
Interesante y espeluznante historia. Has logrado un retrato fiel de un hombre martirizado por su condición sexual. Muy bueno en todos sus matices, los del cuerpo y los del alma.
Un abrazo
Me sumo a todo lo anterior. Y qué bien escrito…
En este concurso tendría que estar vetada la participación a profesionales como tú, Raúl. Jejejeje…
Me encanta. No puedo decir más.
J.C.
Enhorabuena, Raúl, por estar entre los ganadores del mes. El relato es brutal pues se lee con un ritmo que crea intriga, pocas veces puede definirse así de bien un personaje, y la sorpresa final muy lograda.
Enhorabuena, Raúl. Tampoco pude leerme tu relato entonces pero lo leo ahora y creo que has sabido enfilar perfectamente tu historia con las características peculiares del personaje de Dorian Grey y de Narciso sin copiar en absoluto. Con un nuevo enfoque que te ha valido el premio.
Felicidades!!!