50. Incontinencias (Raquel Lozano)
Me tilda de exagerada y me pide paciencia la malhumorada rechoncha de ojos saltones que me precede en la cola del baño. Retuerzo mis piernas y las ganas de decirle algún improperio y aprieto la musculatura del suelo pélvico. Para más INRI, el grifo gotea como la canción que suena afuera, des pa ci to.
Mi vejiga no puede soportar tanta presión así que golpeo la puerta de la rechoncha, que ya ha entrado y que a tenor del sonido, alberga las cataratas de Iguazú bajo su falda.
Una vez dentro descubro que ha agotado todo el papel higiénico, supongo que en limpiar sus inmensas nalgas; que no ha tirado de la cadena y que ha olvidado su móvil sobre la papelera.
Cuando mi esfínter se relaja, lo hacen también mis ojos al ver cómo navegan sus datos al presionar, yo sí, el mecanismo para vaciar la cisterna.
Buenísimo. Que crak.
Me he reído con mala baba, pues me lo he imaginado.
Un abrazo.
jajaja me encanta, gracias por este micro tan «refrescante»
Muy divertido.
Abrazos calidos
La educación está muy bien, pero cuando la necesidad aprieta la gente es capaz de cualquier cosa.
Muy visual, parece que estamos viendo la escena. Una tragicomedia divertida, menos para la pobre señora rechoncha. Muy bien traído el segundo sentido de la navegación y los datos. Una manera muy original de inspirarse en la imagen propuesta.
Un abrazo, Raquel, Suerte
Muy divertido y original. Leyéndolo he entendido el verdadero sentido de la mueca de Cate: intentaba convencer a la rechoncha de que le dejase colar en el baño. Jajajaja
Suerte y abrazo,