36. Jardín humano
Noche cerrada, oscura, solo una tenue luz por el blanco de la luna.
No hace frío, no hace calor, ligera brisa.
No hay silencio, no hay ruido, solo el vaivén del agua.
Mujeres, hombres, niñas, niños, roces de piel con piel, olor, sudor y miedo.
Un bebé… ojos muy grandes. Muy abiertos, secos, sin expresión, mirando sin ver, sin decir nada y diciéndolo todo.
Un sentir volar, un abrazo, un pestañeo de agradecimiento, un pensamiento… ya no se ve tan lejos la otra orilla.
Hola, Esther.
Prosa poética de alto voltaje en tu texto. Manejas muy bien la manera indirecta de narrar. La cadencia es fantástica como el final: de lujo ese optimismo. Te felicito, besos.
Esther, tu manera de narrar es a través de pinceladas, como las de un pintor impresionista. Me gusta esta manera tuya de reflejar sentimientos.
Un abrazo.
Mil gracias Martín Zurita y María José.
Vuestros comentarios me dan ánimos para algún día poder emularos. Soy una aprendiz. Besos.
Esther, nos dejas unas imagenes claras y un ritmo preciso en tu historia. Suerte y saludos
Ya desde el título me cautivó tu Jardín humano, ESTHER, que condensa tanto en tan pocas líneas: padecer, incertidumbre, esperar, desesperar, esperanza, alegría… todo en su medida justa para que el resto de la historia lo complete el sentir del lector.
Un gusto leerte; me encantó.
Cariños,
Mariángeles
Gracias Calamanda, gracias María Ángeles.
Me muero de la vergüenza y de la alegría por vuestros comentarios.
Muchísimas gracias.
Destila poesía, delicadeza y dolor.
Muchas gracias Edita, no se si realmente se entiende como poesía, delicadeza y dolor, realmente lo he escrito con dolor. Es indescriptible lo que pueden sufrir hasta que creen que ya casi están en la otra orilla.
Hola, Esther.
He fallado a mi promesa de leerte nada más llegara a casa, pero ya sabes… el tiempo no me ha dado un respiro.
A mí tu texto me duele. Hay un párrafo que resume tantas cosas:
«Un bebé… ojos muy grandes. Muy abiertos, secos, sin expresión, mirando sin ver, sin decir nada y diciéndolo todo».
Esa imagen tan plástica se me ha quedado en las retinas por su dureza y porque no me suena a extraño. Cada dís las noticias nos muestran esos ojos y, fíjate, qué poquito hacemos por ayudar.
Un abrazo grandísimo, ENORME, ya casi de Navidad.
Gracias towi.
Te debo un abrazo.