JUL54. DECLARADA INOCENTE, de Violeta Moreno Endrino
No Señoría, no pensaba en nada cuando me levanté, con mi bolso en una mano, y con la otra le lancé la grapadora al instructor, antes de dar un portazo y salir volando de la oficina.
Había mirado alrededor. Por los ojos vacunos de mis compañeros, deduje que se habían tragado aquella patraña y me cagué otra vez en la asquerosa ambición humana.
—¡Dosciendos euros por venta, chicos!— bramaba a modo de broche final —¡Con la que está cayendo!— Previamente nos había recordado que si un cliente no sabía firmar, la estampa de su pulgar era igualmente aceptada.
Vender café de puerta en puerta no era vocacional a priori, Señoría, pero ya sin paro tenía que intentarlo todo. Garantizar sus poderes sanadores gracias a un antioxidante hongo centenario, ya me pareció ciertamente canalla. Pero comprender además, durante aquella quinta jornada de formación, que nuestros clientes debían venderlo entre sus amigos para formar un piramidal flujo de dinero hueco, terminó por teñirme de un gris que se oscurecía al ritmo que aumentaba la vehemencia del agredido mientras dibujaba el gráfico de nuestras comisiones en la pizarra.
Sí Señoría, claro que preferiría no haberlo hecho. Pero sin duda alguna, preferí no hacerlo.
Me recuerda a algunas estafas famosas aprovechándose de la necesidad y la codicia humanas. Muy buena reflexión. Gloría Arcos
Hola Gloria y Ana,
Muchas gracias por vuestras palabras de apoyo.
Un fuerte abrazo,
Violeta.
Violeta, además de toda la razón, tienes un estilo ágil y directo. Me ha gustado mucho. Un abrazo.
Muchas gracias, Rosa. Me alegro de que te guste.
Un fuerte abrazo también para ti.
Bienvenida, Violeta, a este grupo de amigos que te tratarán bien. Me alegro de verte por aquí. Es el primer relato que te leo pero no será el último. Nobleza obliga, jeje. Tu relato se lee muy bien (aunque esa frase casi final se hace eterna), nos nuestra una realidad lamentable de negocio que nos está tocando vivir. Me gusta esa definición de «dinero hueco». Quizás lo mejor del relato sea ese juego final de palabras que enlaza con el tema del mes. En el título nos das el veredicto, quizás un poco ilusorio. Espero verte por aquí todos los meses.