JUN105. AL PRINCIPIO DE LOS TIEMPOS, de Mayte González-Mozos
Cuando le dijeron que lo contratarían si arrancaba una sonrisa  al pétreo rostro del Jefe, él aceptó el reto. Como presentación corrió  sin rumbo con su Temporal duro, y lo que hizo fue arrancar grandes  árboles a su paso. Serafines y querubines temblaron ante los estragos.
     Lo intentó con un Frescachón, y los animales, que por entonces eran  enormes, tuvieron dificultad para moverse. Arcángeles y demonios  detuvieron sus apuestas.
     Esta vez mudó intensidad y dirección, deleitando a los océanos con  una débil Brisa flojita que mantuvo las crestas de las olas vítreas, sin  romper. A los dorados cabellos de la Corte Celestial en un leve vaivén.  Entonces el rostro de Dios cambió. Y el Viento fue contratado por toda  la eternidad.
 
 
						
						


Precioso y original.
AL PRINCIPIO; del cuento, nos despista la autora. Después nos descubre, con gran maestría, que el protagonista es el que nos ha acompañado todo el mes.
He disfrutado brevemente como con los cuentos de mi infancia.