JUN28. APOCALIPSIS, de Alberto Quiles
Cambió como el viento cambia el rumbo de un velero en un mar de tormentas y sin siquiera sentirlo, cambiaron de sentido las arenas de aquel reloj que da la vida y la muerte. Fue entonces cuando se rasgó el velo y las almas dejaron de vagar entre la bruma que separa lo finito de lo infinito.
Tras ello, el caos. Enfermedad, hambruna, guerras…
Se desprendieron las utopías de los sueños atrapados y se hicieron realidad aquellas pesadillas que aguardaron durante lapsos eternos, enfrascadas en lágrimas de terror.
No hubo más flores. Los nimbos trajeron el veneno con aquella lluvia constante y radiactiva.
Nunca más jugarían niños en los parques, unos parques devastados en un planeta que ya no era más que un páramo desértico.
Los más mayores aguardaron encerrados en sus cobertizos llenos de esperanza, a la espera de una nueva luz, de un nuevo comienzo.
Y llegó aquel día profetizado. Y las catástrofes se desencadenaron en medio de aquel firmamento desteñido y tormentoso.
Casi sin tiempo a pestañear, aquel manto espeso pobló la tierra. Y aquella inmensa niebla opaca y oscura se apoderó de cada partícula de vida existente.
Tras ello, la calma.
Bonitamente escrito.
Sí, realmente apocalíptico. Aunque 2012 sea el año del fin del mundo según el calendario maya, el estilo mnarrativo me recuerda a cuando estábamos a mitad de los ochenta, el pánico nuclear. Suerte.
Realmente esa era mi intención Pablo. Recrear un momento en el que la humanidad llega a crearse su propio Apocalipsis, pero como dices, en un tiempo en el que no había tantos medios como ahora y era más fácil que se produjera ese pánico de no saber qué está realmente pasando. Me alegro de que os haya gustado a ambos. Y por supuesto, suerte con los vuestros. Un saludo, Alberto.
Ya te comenté sobre este relato en vivo. De los que más me han gustado de los que te he leído. Cómo siempre, consigues transportarnos a la atmósfera que te propongas crear para nosotros 😀
Gracias de nuevo, Fernando!! Espero que este mes cambies como el viento y nos sorprendas a todos con tus versos.