JUN74-1000. DESGASTE, de Ángeles Sánchez Gandarillas
Médico y paciente, estaban sentados uno frente a otro y a la vista de la analítica; el reumatólogo comentó las cifras al paciente.
– Vellido, está todo bien. La única anomalía es que tiene algo bajos los niveles de hematíes.
– Me alegro doctor, pero, no sé, me encuentro muy cansado.
– Bueno hombre, lleva sesenta años con esa enfermedad y está muy medicado, eso, ocasiona al cuerpo mucho desgaste; es como si tuviera usted, deje que calcule…, unos noventa años.
– Ya, ya, eso será. ¿Podría hacerle una pregunta?
El médico le miró con interés por encima de sus gafas.
– Por supuesto Vellido.
– Verá, ¿el alma también se desgasta?
El galeno le miro de hito en hito, soltó el bolígrafo recostándose sobre el sillón. Abrió la boca pero, no logró articular palabra; se quitó las gafas y juntó las manos bajo la mesa. Buscaba y rebuscaba una respuesta para aquel anciano que lo miraba ansioso.
– ¿Por qué lo pregunta Vellido?
El médico esperó las palabras de aquel hombre de ojos claros, y visiblemente preocupado.
– Es que, verá, -dudo por un instante y suspiró profundamente.
– Seguir enamorado de mi mujer me resulta agotador…
A ver, sigo con mi nuevo oficio de contador, o sea que: casi veinte años por 52 semanas cada año, jejejejejeje, hacen 1.000 semanas!!!, (menos tres meses que quedan hasta el cumpleaños del señór Vellido, ¡qué casualidad eh???
«CONTAOR»