JUN88. SIEMPRE ME GUSTÓ DECIR LA VERDAD, SIN DOBLECES, de Mª del Rosario Val Gracia
La primera vez que me miraste, me hiciste sentir especial. Pero a los pocos días observé algo en tus ojos, ya no miraban igual, como si no me soportaran.
Querías alejarte, mi sinceridad te hacía daño, te deprimía. Pero pronto me echabas de menos, volvías a mí y de nuevo ocupaba tu mente. Necesitabas ayuda, salir, encontrar el camino, lo real, sin embargo lo negabas y me mentías, te engañabas.
Cada vez duraban menos tus ausencias, hasta ese fatídico instante en que fue imposible separarnos, discernir quién estaba dentro de cada cual. Me convertí en tu desesperante obsesión. Tantos años pendiente de mí, definitivamente te pasaban factura. Presentí que esta vez, no era como las demás.
Esta mañana tu madre levantó tu debilitado cuerpo del suelo, en tu mano ensangrentada, uno de mis añicos. En el hospital nada pudieron hacer por ti. Esta vez era yo el que entraba en tu cuerpo, hiriéndote mortalmente.
Me gusta esta historia desde el punto de vista del espejo. Algunas veces pueden ser mortales. ¡Suerte Rosy!
Saludoos.
Me costó pensar como un espejo, jajaja
Beto, gracias por comentar.
Un saludo
Una historia en la que el espejo es el objeto pasivo, testigo del deterioro físico y/o síquico del protagonista.Quizás un desacuerdo con su cuerpo, con su apriencia, por deformación de la realidad, al parecer con problemas alimentarios, hasta que lo ve como enemigo al que no puede renunciar y al final lo convierte en un escape trágico.
Bien contado , con una ocultación muy conseguida, hasta ese final que lo desvela.
Suerte.
Gracias Antonia, valoro mucho tu comentario.
Un abrazo
Hola, bonita.
¡Jolín! me acaba de recorrer un escalofrío por todo el cuerpo… ¡Cuánto daño hace la publicidad y los cánones estúpidos de belleza!
Felicidades, tesoro, me ha encantado.
Un beso muy grande.
Eres una exagerááá, pero gracias.
Un besazo amiga
Son más potentes el primero y último párrafos. Sobre todo el último. Quizá el desarrollo del medio me ha resultado algo explicativo de lo que ya se veía entre líneas.
Un abrazo.
Pues sí, puede que tengas razón, ahora que lo releo, demasiada información en el nudo.
Te agradezco, de verdad, esta crítica tan constructiva.
Un abrazo.
Estoy con susana, aún así, me parece muy bueno, me gusta esa facilidad con la que narras.
Abrazo Rosy
Ya verás, ya, cuando a prenda a escribir, jajajaj
Gracias Ramón,
Un abrazo
Los espejos no mienten nunca y cuando nos reflejamos en ellos, vemos todo lo que nos negamos a nosotros mismos, por eso el personaje de tu cuento no lo pudo aguantar. Me ha gustado mucho. Espero que tengas mucha suerte.
Besicos muchos.
Nani, bonita, para determinadas personas el espejo es un enemigo, una auténtica pesadilla.
Un beso enorme
Mª del Rosario, Estoy con los compañeros el principio y final tienen mucha fuerza. Esta situación tan dramática está bien contada. Suerte y saludos
Hola Calamanda, es verdad, que al «durante» le falta fuerza, pero hasta que no te lo cometan, no lo ves. Por eso es interesante apuntarse a estos eventos, a mi por lo menos me ayuda a mejorar.
Gracias por tus bonitas palabras.
Un abrazo
Ana, eso pasa antes de ser anoréxica, por eso se deprime al verse gordita.
Gracias por estos comentarios tan tuyos, TAN ESPECIALES.
Un abrazo.
Sorprendente final que me ha llevado a releer la historia sabiendo quien era el narrador.
besos Rosy 🙂
Gracias Pilar.
Un beso.
Hola Toñi, ¡qué ilusión verte por aquí!.
Me parece que la autora, en este caso, sí que iba con dobleces…jeje
Gracias bonita, por comentar.
Un besazo enorme.
Gracias de nuevo Ana, me gusta que lo veas así.
Un beso.
Bueno, pues como todo es opinable, yo no estoy de acuerdo con lo que te han comentado sobre el principio, el medio y el final. El medio aporta recorrido, no paja, y desde mi punto de vista no sobra ni se queda sin fuerza, simplemente es descriptivo. Ahora bien, tú has dicho que estabas de acuerdo con esos comentarios, así que sois todos contra mí, jajaja.
Un besito, Rosy. 🙂
Hola Sbm, cuando colgué el micro, no pensé que se veía tan claro que mi prota era un espejo, y que quizá en el nudo sí que daba demasiadas pistas, eso me decepcionó un poco. Pero ¡¡¡me encanta!!! que no estés de acuerdo, sobretodo porque sé que lo dices de verdad.
Un besote. :-))
Uff, qué triste. Logras muy bien la personalización del espejo y lo que todos hemos sentido o realizado delante de él. Gran mentiroso del interior que solo muestra lo externo, tu espejo sin embargo se convierte en un «sincerador». Buen trabajo, suerte.
Gracias Ximens… ya sabes lo mucho que aprecio tus comentarios.
Un abrazo.
Rosy, que buena idea contar la historia el espejo. Maravilloso relato, súper entretenido con un final impactante. Enhorabuena,Sotirios.
¡Sotirios, amigo! me alegro que te haya gustado.
Gracias por comentarme.
Un abrazo