JUN97. RÍO DE LA VIDA, de Luis Rodriguez
Ese día todo cambió. Junto a mi mejor amigo aguardábamos los resultados de los exámenes médicos de rutina. El doctor Morales se acercó y confirmó la peor noticia. Yo tenia un tumor en mi pecho, padecía de un cáncer mortal.
Luego de lamentar la situación Morales, se dio media vuelta y se retiró sin más.
Abrumados por la noticia y con una tristeza indescriptible, nos abrazamos fuertemente con Martín, compartimos lagrimas y me transmitió todo su apoyo incondicional.
Al salir de la clínica nos dirigimos al río donde siempre. Allí me regaló una pulsera de mucho valor sentimental para él, y me dijo que esa pulsera me ayudaría con mi enfermedad.
Varios soles se escondieron en el horizonte sin sentir cambio alguno, hasta que una noche el teléfono sonó, era mi amigo contándome que había vomitado sangre reiteradas ocasiones y que el doctor Morales había confundido los resultados, él tenía los míos y yo los suyos.
Días mas tarde Martín fue derrotado sin piedad por el cáncer.
Me acerqué a aquel rió y le devolví su pulsera arrojándola, mientras le dije: «Que paradoja querido amigo, me has devuelto una vida entera»…
En la amistad todo se comparte, lo bueno y lo malo también. Me gustó. J
Gracias por tu comentario me alegro mucho porque me motiva a seguir transcribiendo mis ideas!