25. La vida detrás de la persiana
La vida es alzar la persiana por las mañanas. Elegir qué ropa ponerte, qué camino volver a retomar. Tachar un día en el calendario… o anotar una hora más. La hora en la que caben todas las horas; en la que dejas aparte todos tus papeles, para mirarte al espejo y encontrarte contigo de verdad. Si a esa hora tienes cincuenta años y acaban de regalarte un vale para una clínica de estética entiendes que la belleza interior cobra una nueva realidad.
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Nadie duda de que esta mujer (que también podría ser un hombre) tenga una rica vida interior, hermosa incluso, lo que no quita para que también quiera mejorar su apariencia externa si tiene oportunidad. Que el tiempo pasa es algo tan obvio como inevitable, que nos resistamos a que nos haga mella es algo muy humano. Muchas personas en su mismo caso darían ese mismo paso o, al menos, lo pensarían seriamente.
Un relato en el que laten sentimientos universales, derivados mirarse al espejo y ver a una persona con un envoltorio distinto al que querríamos tener.
Un abrazo, Manoli
Suerte
Muchas gracias, Ángel. Te cuento que cambié el final del texto varias veces pero, al final decidí dejarlo tal cual está, para contrastar precisamente las dos imágenes: la que la mujer cree tener y la que tiene de verdad y su decepción, tanto con la imagen del espejo, como con el regalo obtenido, después está el otro camino: el de sacar a relucir la belleza interior, como compensación (o no) jaja.
Abrazo grande.
Quien te regale eso…tachado dela lista de amigos.
La edad ¿qué es la edad? me preguntas…
En la cabeza de cada uno y en imponerse qué o qué no puede hacer ya. Todo lo demás,zarandajas.
Suerte y feliz mañana lluviosa.
Estoy de acuerdo contigo, Mercedes. Tanto, que en una de las versiones que barajé precisamente la protagonista decidía romper el vale y dejar atrás a la persona que se lo regaló, aunque finalmente dejé esta versión que me pareció más abierta a la interpretación del lector.
Muchas gracias por tu lectura y palabras. Un saludo.
La lectura del relato provoca una sonrisa.
Suerte
Pues si sonríes ya me doy por satisfecha, tocaya. Que no falte nunca esa sonrisa en nuestro día a día.
Muchas gracias y un saludo. 😉
Puedes engañar a la naturaleza si tal acción te hace más feliz, y siempre quedará la belleza interior que reflejan tus actos. Muy bueno, Manoli. Abrazos y suerte.
Muchas gracias, Salvador. La parte exterior cambia y yo creo que lo mejor es reconciliarse con unx mismx y llevarlo lo mejor posible, siendo consciente de la etapa en la que estás. El espejo cumple la labor de concienciarnos, jaja.
Un abrazo.
Lo peor de todo es que mucha gente sólo ve la belleza exterior. Lo estético o cuidado. Cuando a solas frente al espejo algunas personas llenan discos de algodón de todo lo que llevan encima y se descubren a sí mismas, tal cual, supongo que será como una liberación.
Pero esta vida es así. Puro postureo y maquillaje.
Un abrazo y suerte.
Cuánta razón, Virtudes. A la hora de la verdad, el maquillaje no llena nuestros vacíos y el postureo no otorga nada, solo es una cáscara que sin relleno no lleva a ninguna parte. También es cierto que cada quien tiene la opción de elegir ser consecuente o no.
Muchas gracias por tu lectura y palabras. Otro abrazo para ti, compañera.