55. LLUVIA DE VINILO A SU MANERA (Mª Belén Mateos)
Tiempo nublado, variado, despejado y desesperante… Nos sentamos en silencio ante aquella noticia sin sentido y pasamos de volver a poner ese canal intempestivo. A los cinco minutos sonó el timbre, mi mujer, siempre dispuesta, abrió de manera cariñosa la puerta. El paquete llegó en perfecto estado, la última versión de “A mi manera”; un clásico en nuestras vidas. Con franqueza confesaré que era nuestro modo de vivirla. Modo on y modo off, dependiendo del estado en el que nos encontráramos sin tener en cuenta el cielo, la temperatura o el sentir de nuestros cuerpos.
El vinilo marchaba a todo trapo y los golpecitos en los muslos eran toda una explosión que daba rienda suelta al baile y al desenfreno desmedido entre notas seductoras, magia y pastillas para la tensión. Amplificamos el sonido para situar su voz por encima de la orquesta, y las emociones se hicieron música y los sentimientos rebosaron en imitar un estilo Bing Crosby que desbarraba nuestra acrecentada artrosis.
La pieza insistía en tararear su versión más pura y nosotros en bailarla hasta llegar a un estado destructivo, placentero y extenuante. Así de esa manera… tan nuestra, tan utópica y tan melódica.
La lluvia paciente persistía.
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Una pareja avanzada en años que siempre ha vivido a su manera y que no piensa dejar de hacerlo; ellos, tan suyos, no pueden admitir la versión moderna de un tema cuya esencia configura la melodía de su vida. Aunque la canción requiera otros movimientos bailarán con el suyo propio, lejos de toda prudencia acorde con su edad, sin consideración hacia sus organismos desgastados, aun con la tensión por las nubes y un exceso de artrosis. Tampoco les importa el tiempo que haga fuera, tienen su microclima único y particular, impermeable a los cambios, un microcosmos que han construido juntos, a medida, en el que son felices y al que se seguirán entregando hasta que el cuerpo aguante, que igual no es mucho.
Un mensaje de buen humor y otro ejemplo más de personalidad, elegancia y muchas voces singulares en una misma autora.
Te mando un abrazo fuerte y dos deseos: mucha suerte y que nunca dejen de llover tus letras.
Gracias Ángel, siempre tan puntual, tan preciso y tan acertado. Viven en su mundo y a su manera. Los años pasan pero la melodía la llevan en el cuerpo y en ese tocadiscos que nunca se cansa. Una pareja, una vida, un baile, un icono y un tiempo fuera de su entorno que no les cala ni les importa.
Un beso enorme compiamigo.
A medidas que voy acumulando lecturas de su trabajo, más me gusta lo que encuentro. Aborda cualquier registro con mucha belleza. En este relato nos muestra la ternura de su escritura. Bueno y bonito, suerte Mª Belén.
Saludos.
Precioso comentario que he de agradecer con ternura, pues tus palabras las siento sinceras y ello me provoca una sonrisa. Saber que me lees siempre es un honor para mi ya que tus letras sabes que me encantan y las sigo.
Gracias Beto
Saludos y abrazos.
Vaya melodía te has marcado, Mª Belén; se me van los pies.
Que no pare la música.
Un beso
Eso Margarita que no pare la música y bailemos siempre entre letras, esas que tan fantásticas escribes.
Un besito preciosa. Gracias siempre.
¡Que chova!, dirían en mi tierra.
¡Viva la vida!, dice tu relato (y el mío 😉
Vaya palabra chula «choval».
Pues sí nuestros relatos han coincidido en las ganas y la alegría de vivir la vida. En bailarla y disfrutarla a pesar de lo que les rodee o el tiempo que haga fuera.
Gracias Edita, un beso.
A mí se me van también los pies con el ritmo lento de esa pareja tan encantadora que nos has regalado, tocaya. ¡Yo también quiero llegar a ser así aunque llueva y llueva sin parar! Enhorabuena, es un relato precioso y lleno de tu elegante poesía. Muchos besos y suerte.
No importa el tiempo que haga fuera, ni el tiempo de sus cuerpos, solo quieren sentir y sentirse bajo esa melodía que tantas veces bailaron y hoy vuelven a hacerlo.
Gracias Belén preciosa. El próximo día bailamos…
Un beso enorme.
¡Que historia tan nostálgica y bien narrada!. Es de las que inundan los ojitos de líquido salado.
Toda la suerte, Belén
Me encanta que hayan despertado esas gotitas saladas de tus ojos al leerlo. El amor, el autentico amor siempre se baila aunque a fuera el tiempo no acompañe o no entienda de sentimientos.
Gracias María Jesús por un comentario tan bonito.
Un beso guapa.
Belén, la vida a su manera es pasión y así lo hacen, el ritmo más allá de sus años sigue siendo lo que los mantiene jóvenes.
Muy emotivo relato. Un canto a la vida.
Un abrazo y suerte.
Así es Moli, un canto a la vida, al amor, a todo un baile, su baile…
la pasión la conservan a pesar de sus achaques, más dulce, más tranquila pero igual de intensa.
Gracias. Un abrazo.
¿Y a quién le importa qué tiempo haga fuera, si en casa llueve el amor?
Un relato que fluye apaciblemente, Belén, para leer con las botas de agua puestas.
Besos.
Así es Carles. Un microclima de amor inunda las paredes de su casa y de sus vidas. Una melodía que les acelera el corazón y les hace sentirse libres, disfrutando cada momento el uno del otro… a su manera.
la lluvia da ese toque apacible a la historia.
Gracias un abrazo bien grande.
Precioso relato lleno de poesía, como suele ser habitual en tu estilo.
Me encanta esa pareja, que a pesar de los años y del mundo exterior que les rodea, ellos se envuelven en sus cuerpos, su baile y en «su manera» de vivir el momento y la vida.
Una pareja que vive a su manera, en su mundo, en su melodía… Poesía para su eterno baile.
Gracias Blanca. Un beso guapísima.
Me alegra saber que mi historia te haya hecho recordar momentos tan especiales de amor, locura y juventud. Así hay que vivir la vida a nuestra manera, ponerle música y bailarla disfrutando de ella en cada instante.
Gracias preciosa Ana. Un gusto que leas y te haga sentir. Un besito.
¡Esa, esa, esa es la actitud!
Enhorabuena, MªBelén.
Jajajjaja… Así es. Vivir a su manera a pesar de los años, los achaques y la lluvia. Disfrutar de su presencia y enlazar sus cuerpos en ese baile eterno.
Gracias Javier, abrazos.
Es una melodía contagiosa que llena el alma del lector de esperanza, de ganas, del ejemplo que proponen estos dos ancianos, que a pesar de la artrosis y las pastillas para la tensión siguen bailando el tema de sus vidas a su manera, como debe ser.
Un relato tierno, que hace reflexionar sobre la vejez y que llega al corazón.
Mucha suerte, Belén!!!
Gracias por tan bonito comentario. Es cierto que la melodía les une en toda una vida a pesar de sus achaques. Debe ser precioso envejecer juntos y seguir danzando.
la ternura eres tú patricia.
Muchas gracias bonita.
Una Película a recordar sin duda.
No importa la edad, solo saber exprimir cada instante al lado de quien amas y disfrutar, bailar o simplemente mirar la lluvia posarse en el cristal.
Gracias Juan. Abrazos envueltos en feliz navidad.
Has conseguido que la situación nos envuelva con una exposición de libro, de la de poner como ejemplo para aprender a describir situaciones, y además nos has contado una preciosa historia de las que rejuvenecen el alma. Me ha gustado mucho y he podido dibujarlo en mi cabeza sin ningún problema gracias a tu manera de tratar y cuidar las letras. Mucha suerte 🙂
Gracias a ti siempre Juan Antonio por la delicadeza con la que comentas, por el sentir que tienes y por tus buenos deseos.
la edad es solo un numero, el alma es todo. Cuando te sientes joven de espíritu, a pesar de los achaques, vives más tiempo, más feliz y de manera más intensa.
Un abrazo grande. 🙂
Sus cuerpos y mentes marcaban sus vidas, ningún ritmo externo perturbaba su libertad. Me ha gustado mucho, Mª Belén. Abrazos y felices fiestas.
Así es salvador. Toda una vida viviendo a su manera, a su ritmo, a su sentir. Ni la lluvia, ni sus desgastados cuerpos pueden con ellos. felicidad plena.
Gracias. Un abrazo y felices fiestas.
Hay que ser muy valiente para vivir la vida a tu manera y para amar toda la vida, también. Es un micro lleno de melodía y de amor. Un abrazo.
la valentía de saber que se aman, se respetan y a pesar del tiempo se siguen teniendo, ello les dota de una libertad mágica para vivir su vida así a su manera.
Gracias preciosa Mar. Un beso.
Me encanta Belén, vivir la vida de lleno hasta el final, qué más da el tiempo, la artrosis, los años en definitiva. Bailar hasta la extenuación, tu pareja nos debería servir de ejemplo, al final el modo de vivir la vida no depende tanto del exterior como de nosotros mismos.
Un besazo y te dese un año 2016 más lleno si cabe de éxitos y felicidad.
Gracias Asunción. Así deberíamos vivirla todos, a pesar de los años, los achaques o la lluvia. El interior ha de permanecer joven y joven mostrarlo.
Un beso enorme y un feliz 2016 colmado de alegría, gratas sorpresas y buenas letras, esas que tú tan bien escribes.
Un texto romántico añoso de un matrimonio que parece que está a punto de dejarlo para siempre. Intuyo un suicidio de vinilo, próximo. En ti, siempre brotes de amor. Suerte.
Gracias Javier. Que seriamos sin amor…
Un final interesante el tuyo. Entre tanta pastilla y movimiento es posible que no acaben muy bien sea de manera voluntaria o involuntaria.
Abrazos.