07. Lobo solitario ( Fernando Garcia del Carrizo)
Mi verdad me ha apartado hasta de mí. Nunca toleré que los demás no compartieran los principios y las ideas en la que he fundamentado mi vida. Eso me llevó a alejarme de mi familia, que llamaban extremismo a lo que yo determinación y claridad de pensamiento. Recuerdo la mirada de mi madre con esa mueca de culpabilidad el día que me largué de casa. Los amigos se distanciaron con acusaciones de fanatismo donde solo había coherencia. Imagino que era frustrante para ellos confrontarse y ver su mediocridad. Cuando encontré a los de mi grupo me sentí comprendido por vez primera en años. Al descubrir su hipocresía y debilidad moral me separé también de ellos. Solo, conmigo mismo, reconozco la dificultad creciente de ser fiel a mis juicios. Ni los castigos físicos acallan esos momentos de duda o flaqueza. Por eso y por la urgente necesidad de cambiar este sistema enfermo me encuentro rodeado de toda esta gente. Cuando el vagón de metro arranca de nuevo me fijo en el rostro de una anciana que me recuerda a mamá. Sus ojos es lo último que veo antes de apretar el botón.
Es de suponer que todos, en mayor o menor medida, necesitamos creer en algo y/o en alguien. Pero hay que tener presente que nada es perfecto y no existen verdades absolutas. Nada justifica ciertas acciones salvajes, alimentadas por ideas radicales que calan en mentes débiles, que acaban por creer a pies juntillas conceptos disparatados, tóxicos y dañinos, hasta para ellos mismos, como queda bien reflejado en la primera frase.
Un relato sobrecogedor que se pone en la mente de una persona radicalizada, que una vez llena de fanatismo no es permeable a nada más. Solo se trata de un individuo, una excepción frente a una amplísima mayoría. pero puede causar mucho dolor, temor y daño.
Un saludo y suerte, Fernando
Muchas gracias Angel por tus comentarios. Como siempre, has calado perfectamente lo que queria transmitir. Un abrazo
Has contado una historia larga y dura en muy pocas palabras; la última frase es corta y, sin embargo, consigues que sea un final tan doloroso como esperado. Te felicito.
Nos leemos.
Muchas gracias Isabel por tus comentarios.
Este personaje se deja mostrar sin tapujosdesde el pricipio, él y su trastorno, su narcisimo y pensarse poseedor de la verdad. La imagen pura de muchos que han cometidos actos parecidos. INquietante y más aún al sentir ese clic del botón en el metro que todos usamos. Suerte Fernando
Gracias Manuel por tus comentarios. Nos seguimos leyendo
Terrible personaje, radicalizado, solitario, convencido de que tofo está mal y que tiene la obligación de cambiarlo. Me trae los teŕibles recuerdos del temor, el terror, el horror y el silencio sepulcral que vivimos en Madrid tras la sinrazón del 11-M. Muy impactante tu micro, Fernando.
Muchas gracias Gloria por tus comentarios. Eso era justo lo que queria transmitir. He intentado ser aseptico respecto a la ideologia, motivacion del protagonista pues todos los actos terroristas son abominables sean del signo que sean y tremendamente tristes como el que describes del 11 M.
Un abrazo