MAR135. 2€84, de Juancho Plaza
Cómo otros años la Navidad se acerca fría y desangelada. Las nuevas medidas tomadas por el partido en el poder, no consiguen ilusionar a la ciudadanía. El Gran Mercado controla sus cuentas corrientes. Cada billete, cada moneda, tienen nombre y apellido. La Policía Monetaria no deja que ni un solo céntimo escape de su control. El último decreto emitido por el Gobierno, RDL 47/2083, de 18 de julio, de medidas para garantizar el consumismo integral, establece unos baremos por los que todos los consumidores se verán obligados a adquirir, de forma obligada, una serie de productos para que el Mercado siga fluyendo. Ropas, artículos multimedia, dulces y delicatesen, juguetes, espectáculos. Todo está programado para desvalijar al contribuyente y dar alas a los especuladores. La sutil propaganda con la que nos bombardean hace el resto. La libre circulación de dinero está castigada con severas condenas y el trueque, con la pena capital. Solo un clandestino reducto de insurgentes, La Hermandad, comandados por Sinston Wmith, resistimos amparados en nuestra autosuficiencia. Esta noche el Canal Continental emite Tocando Fondo, el programa de máxima audiencia en el que puedes ganar mucho dinero acertando la fecha de nuestra neutralización. Comienza la cuenta atrás.
Juancho, tu relato, con una visión muy consumista para el futuro, sugiere preguntas y dudas acerca de otra forma más de manipularnos. Suerte y saludos.
Muchas gracias Calamanda por pasarte a leer el cuento. Es verdad que me preocupa este consumismo furibundo del que nuestra sociedad hace gala, aunque espero equivocarme y que el futuro vaya por otros derroteros. Un abrazo.
Me ha gustado tu relato Juancho, una dura crítica a nuestro sistema..si alguna vez acabamos así, espero ser el presentador de Tocando Fondo.
Mucha suerte!
Todavía estamos a tiempo de parar esta vorágine si no queremos llegar a lo que describe en tu relato. Me gustó.
Suerte.
Gracias Tindaro, no es mala elección, tampoco ahora, ser un exitoso presentador de televisión. Gracias Beto, eso espero, aunque la deriva que llevamos no es buena.
Un abrazo a los dos.
Muy bueno Juancho. Esperemos no llegar a ese nivel de control aunque en esas andamos.Un abrazo. Gloria Arcos
Gracias Gloria, yo también lo espero, pero pinta feo. Un abrazo.
Pues ahora que me han logrado acostumbrar a casi autosuficiencia me presentas esto y me veo perseguida por lo mismo. No hay salida. Buen relato, Juancho. Te lo iba a cambiar por el mío pero temo represalias de la Poli Mercantil esa : )
Gracias Alba, lamento haberte sacado de tu balsámico y autosuficiente estado. Yo ya me siento bastante controlado, esperemos que esto mejore en vez de empeorar, pero, francamente,no lo veo. Un abrazo.
Hombre, lo que quedó demostrado en época de vacas gordas es que la mayoría de la población se lanzaba a consumir. Ahora que no hay trabajo no se mueve la pasta. Creo que todos deberíamos considerar el tema de si gastamos por necesidad o porque hay un mercado que llena una «necesidad» orquestada.
Un abrazo.
Así lo veo yo también Susana, muchas veces parece que solo consumimos para mantener el sistema, incluso se nos induce claramente a hacerlo por tal motivo, sin paramos a pensar si realmente necesitamos todo lo que consumimos, ni en sus repercusiones en otras personas, ni en que los recursos pueden agotarse. Un abrazo y gracias por pasarte.
Un panorama desolador. Espero que tengas suerte, Juancho. Un abrazo.
Gracias Francesc, soy pesimista en este aspecto, pero espero equivocarme, claro. Un abrazo.