MAR154. EL SECRETO DE LA HABITACIÓN 2084, de Mercedes Daza
Todos los viernes recibía un sobre en el que me citaban a medianoche en la habitación número 2084 de un sombrío hotel resguardado en la Gran Vía. Yo, letrado de renombre pero protagonista de una larga lista de relaciones frustradas, acudía a aquel lugar con la excitación de la primera vez. Ella me esperaba semidesnuda en la cama, con su rostro cubierto por una máscara dorada y una peluca roja a juego con sus labios carnosos que quedaban al descubierto. Durante aquellas horas mi mundo envuelto en leyes se desvanecía para abrir una puerta que daba paso a la incoherencia, la fantasía, el deseo.
Nuestros encuentros se repitieron de manera puntual durante casi un año, hasta que un día sus negras lágrimas asomaron por su cuello. Comprendí que la magia había terminado.
Meses después hallé en mi buzón una nueva cita. Pícara, quería que al fin nuestras miradas se cruzasen en el juzgado donde ejercía. Entré en la Sala buscando sus labios que con desconcierto encontré. La ubiqué en el estrado. Por primera vez no intervine como abogado. Era el denunciado y ella mi hija, aquella que abandoné hace 2084 noches, y que cada viernes besé en una fría habitación.
Mufuerte. Desde luego la hija es tremenda. En fin, hay gente pa’tó. Me ha gustado y me deja pensando.
Me ha salido una historia un poco retorcida este mes…
Parece que nunca se sabe cuando se va a cumplir la condena por nuestros errores. Esta vez está más difícil encontrar una canción, jejeje. Besos Ana.
Mercedes, felicitaciones por tu áccesit en lasiguintelapagoyo. Quedar entre cuatrocientos o más seleccionada tiene que ser una gran alegría.
¿Vas a ir a la entrega de premios?
No tenía ni idea, muchas gracias Susana por comunicármelo, qué alegría me das. NO recuerdo las bases, si me pilla cerca sí iré. Gracias guapa!!!
Te pilla en calle Alcalá 59, taberna James Joyce.
No sé si te queda lejos o cerca, pero me parece que merece la pena la visita.
Un abrazo.
Vaya en Madrid, y al día siguiente es mi cumple que celebraré con la familia, pero la gala promete…
Pues doble felicitación, por el premio y por tu cumple. Disfrútala donde estés. A mi me cae lejos Madrid, pero aún no lo he descartado. Espero leer pronto vuestros cuentos.
Un abrazo.
Por qué dices que se presta a risa cuando anotas canciones? Qué va, lo decía por todo lo contrario, porque a mí me encanta la música y sé que siempre das con la perfecta. Este concurso sin ti no sería el mismo. Un beso muy grande Ana.
Mercedes, felicidades por tu cumpleaños. por el accesit ya te felicité. Saludos.
Muchas gracias Calamanda, siempre muy atenta. Besos.
Es duro, Mercedes, se te ve el oficio en él… pero me gusta ;o)
Un beso y felicidades por tooodo lo que se te tenga que felicitar
Gracias Eva por las felicitaciones. Las leyes que me tienen un poco perturbadilla este mes 🙂
Buen relato, tocaya, como todos lo que escribes. Oscuro y retorcido. A veces los individuos de apariencia intachable ocultan los vicios más insospechados. Bien conducida la trama, me gusta la estética «Eyes wide shut» que escoge la hija para los encuentros en el hotel. La relación incestuosa y el tema de la venganza me recuerdan a la peli coreana «Oldboy» (en breve se estrena remake made in USA). En fin, te ha quedado un relato de cine jeje. Un besote y enhorabuena.
Vaya, ha sido inconsciente lo de Eyes wide shut, ya quisiera encontrarme con mi amor de adolescencia, Tom le llamaba, jejejej. NO he visto Oldboy pero me han hablado muy bien de esa película. Me han chivado dos cosas sobre ti: 1) Que tu relato se merece ser elegido este mes, 2) Que eres una mujer que promete muchooooo como escritora, así que voy a buscar tu relato, no me lo pierdo. Un beso.
Ana no te falta la razón en tus palabras. Me gustan las personas sensibles porque me siento identificadas con ellas, y tú lo eres, y aunque no te conozca físicamente sé que eres especial. Así que no dejes de comentar, de vivir, de ser susceptible (yo también lo soy, y mucho). Y ni se te ocurra dejar de poner letras de canciones… Qué pena que a veces no tenga tiempo de leer todos los relatos pero en cuanto pueda y si me lo permites, compartiré canciones como tú, porque la música es de las mejores cosas que nos pueden pasar. Un beso muy grande.