MAR81. RUMBO A LAS ESTRELLAS, de Asun Gárate Iguarán
El hombre mira por la ventanilla y siente una mezcla de rabia y tristeza.
Pronto comenzará la destrucción de la Tierra: los mares se desbordarán arrasando pueblos y ciudades; incontables terremotos abrirán grietas vertiginosas, precipicios sin fondo; soplarán huracanes capaces de llevarse bosques enteros; largas sequías transformarán campos en desiertos; lluvias incesantes cubrirán las montañas más altas; día y noche se confundirán; plagas, enfermedades, se propagarán por todos los rincones… Muchísimas personas decidirán suicidarse. La Vida se extinguirá.
Un feroz rugido le hace volver la cabeza. El tigre de Bengala recorre su jaula mostrando colmillos, lanzando zarpazos entre los barrotes.
Los demás animales parecen tranquilos. Juegan los chimpancés. Pasean los camellos. Rumian vacas, ovejas y cabras. Saltan los delfines. Ponen huevos las gallinas. Sacuden las crines los caballos. Vuelan las golondrinas.
El hombre abraza a la mujer que lo acompaña. Mientras la nave atraviesa la atmósfera ambos permanecen en silencio, viendo empequeñecerse la Tierra hasta convertirse en una perla azul. Cuando alcanzan el espacio exterior, ella dice: «Encontraremos un nuevo hogar«. Y se acuestan uno al lado del otro.
De las ramas del olivo surge una alegre mariposa. Revolotea anaranjada y se posa en el abultado vientre de la mujer.
Buenísimo.
Santi S.
Gracísimas.
Asun, estos supervivientes tienen la esperanza de comenzar de nuevo. Los sucesos, fluidos y ritmicos, desgranan poco a poco el cuento. Suerte y saludos.
Muy bonito. Pero ese tigre enjaulado no sé si ha sido buena idea subirle a la nave-arca por si se escapa.
Un abrazo.
Nunca se sabe con qué te puedes encontrar en un planeta desconocido. Y el tigre serviría para defenderte de cualquier peligro. Es como una garantía, como un «arma».
Gracias a todos por vuestros comentarios. Besos.
Muy buen relato de la nave voladora y sus ocupantes.
Suerte, María Rojas
Es muy visual, demostrativo y didáctico. Recreas el nuevo Arca y la nueva esperanza.Es muy bonito el manejo de los colores, y esa mariposa anaranjada es un símbolo completamente optimista a pesar de todo. La perla azul y el olivo, todo transmite paz.
Suerte y abrazo.
Muchas gracias a todos.
Yo ahora me quedo imaginando qué será de ellos, a dónde llegarán que puedan empezar una nueva vida. Espero que lo consigan y que hagan las cosas un poco mejor de lo que lo estamos haciendo nosotros ahora.
Besos.
Difícil no echar mano de recursos más que gastados en estas propuestas futuristas, así que la sorpresa es un valor añadido que hemos de reconocerte. Y además lo has hecho con acierto. Un abrazo!
Tienes razón Nieves, mi imaginación ha ido por un camino bastante diferente al de la mayoría.
Generalmente, me gusta ver las cosas desde otro punto de vista. A veces, es un acierto; otras, un error…
Muchas gracias por tu comentario.
Interesante este Arca de Noé futurista
Un saludo
Gracias. Sí, es interesante imaginar su futuro…
Muy bonito todo lo que esccribes, aunque no lo creas, soy un fiel seguidor tuyo. 😉