MAY46. BAJOS FONDOS, de Mercedes Jiménez Rueda
Despiertan los neones. Al final de la avenida crece un rumor de tacones furtivos. Una puerta chirría, cruje el cuero de un asiento. La princesita triste enciende otro cigarrillo y arranca por fin su BMW.
Rojo. Sobre el volante sus dedos tararean un blues sin título. Parpadeos eléctricos. Verde. Pisa a fondo el acelerador, siente el fluir del asfalto bajo los neumáticos. Pronto, los altos edificios se pierden a lo lejos y la noche va desembocando en la periferia.
Allí, alguien le hace un hueco en un colchón gastado. Ella acepta y, como siempre, recibe el alba en compañía anónima.
Porque aún sigue creyendo que las sábanas de las afueras no dejan marcas.
Que la vida en las afueras no deja marcas.
Aunque cada vez le resulte más difícil calcular la dosis exacta para enterrar el daño.
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Buena descripción de un ambiente roto, decrépito, carente de ilusión y sentido.
Me gustó, muchas princesas reales son así, a pesar del BMW.
Saludos.
Muchas gracias Asun. Efectivamente, los bienes materiales no son garantía de una vida plena. Un beso.
Mercedes, tu princesa busca muchas sensaciones en la noche; quizá el día la satisfaga más, esperémoslo. Buen ritmo, secuencias y final. Suerte y saludos
Gracias por pasarte de nuevo por uno de mis relatos, Calamanda. Eso espero, que llegue el día en que no tenga esa terrible necesidad de trasnochar. Un beso.
Me gusta, Merche, me gusta como cuidas el lenguaje en cada párrafo, como mimas las palabras, eliges siempre las adecuadas y justas para retratar cada sentimiento, cada atmósfera. El final me parece perfecto, calculado como con cuentagotas. Evitas con soltura lo kisch y lo melodramático. El título, esta vez, muy certero. Para mí, el único «pero» a esta estupenda historia es que, pese a que logras transmitir muy bien lo que quieres, el sabor que me queda es que antepones lo poético, la forma, sobre el fondo, a diferencia de tus anteriores dos relatos que, en mi opinión, funcionaban narrativamente mejor como micros…
Muy muy buen trabajo en cualquier caso.
Muchos besos y suerte!!
NACHO RUBIO
Nacho ¿Qué te puedo decir? Que te marcas unos análisis que son propios de un crítico especializado. Vaya, sólo con que esta vez te haya convencido el título, puedo darme por satisfecha :-). Tienes mucha razón, ya te avisé que para este mes quería preparame algo muy poético, es lógico que, por esta razón, el texto pierda narratividad a favor de las imágenes. Me gusta lo que dices de la contención, he intentado depurar el relato al máximo y tener cuidado con el tema que trata. Un beso muy grande, amigo.
Después de los comentarios de Nacho casi me da apuro poner algo, qué análisis hace el tío… Bueno, yo te iba a decir que me ha parecido un relato muy potente. El primer párrafo nos retrata muy bien al personaje sin casi mencionarlo, y la frase final es redonda. Enhorabuena, y que sigas regalándonos tus textos.
Es un honor contar una vez con tu atenta lectura, Ana. Admiro tu forma de escribir, mi más sincera enhorabuena por tu merecidísimo premio. Espero que, aunque tus textos no puedan volver a ser finalistas, no dejes de impresionarnos con la calidad de tus relatos. Un besote.
Muchas gracias, yo alucino cuando me decís esas cosas porque soy casi una recién llegada a este género y considero que me queda muchísimo que aprender y pulir. Por supuesto que intentaré seguir participando en este blog, la verdad es que es un verdadero estímulo, y muchos meses cuando me pongo a preparar algo para ENTC termino haciendo dos o tres relatos sobre el mismo tema. No te comento más cosas de tu relato porque ahora que me toca hacer de jurado voy a dejar de comentar, lo mismo que hice en marzo. Besos.
Si no nos quedara nada por aprender sería todo muy aburrido. A mí me parece que talento no te falta así que ya cuentas con una gran ventaja. Vaya, yo también llevo poquísimo en este género, vengo de la poesía y sospecho que tú también. Un beso grande.
Ana, da gusto leer mes a mes tus comentarios. Sabes bucear en los textos y dejar todo lo que encierran a la intemperie. Estoy convencida de que harías una excelente labor como jurado. Gracias, por todo lo que comentas sobre mi texto. Mi protagonista es su propia víctima, víctima de su insatisfacción. El porqué de esa insatisfacción lo dejo a la imaginación de cada uno. Me encanta el arte, lo de los lienzos de Sert me llama muchísimo la atención. Espero, pronto, visitar un día tu preciosa ciudad. Un beso enorme.
Mercedes, muy buena idea de esta princesita rara más bien que princesita viciosilla. Lo importante que captas la atención y curiosidad del lector. Un fuerte abrazo,Sotirios.
Jaja, Sotirios, eres único, me alegra mucho que mi personaje haya conseguido llamar tu atención. Precisamente por su especial rareza y sensibilidad se entrega al vicio, bueno, a varios vicios. Un besote, muakkk!!!
Uno escribe y otros interpertan. De no ser factible varias lecturas de un mismo texto sería sólo un sermón de cura de aldea y no literatura.
Me gusta lo que has escrito. Yo veo en el cuento a una mujer dolida, acaso consigo misma, acaso por otras razones. Que no busca placer sino autodestrucción. Que sabe que eligió mal su camino pero que no encuentra modo de salir de él.
El final es lo mejor. «la dosis exacta…», con la previa mención a «la marca» abre un horizonte de sugerencias y, tal vez, sirva de encabezamiento a un nuevo cuento.
Sin ánimo de ofender; si se me permite: lo del Bmw resulta asonante, resuena como un motor ronco en un deportivo.
Aparte:
Dic. no recuerdo el número: Los misioneros llegan y producen terror. Están y hacen daño. Confunden y revuelen. No merece la pena su medicina, al final otra vez el terror, esta vez con fiebre.
Inicio, medio, y final.
Una frase brillante: «No nos ilumina como el dios sol, así que tuvimos que obedecer a ciegas»
Aparte: En su lugar te agradecí tus comentarios, y te expliqué mis razones. Aprovecho ahora para indicártelo.
Saludos.
Ignacio, creo que has hecho un análisis magnífico de mi cuento de este mes y del que escribí en diciembre. Has dado con la esencia de mi princesita, la palabra clave es ésa autodestrucción. El detalle del BMW, era sólo para dar a entender que mi protagonista goza de un buen nivel económico.
En cuanto a mi cuento de diciembre, el de los misioneros, ése era el mensaje, que llegaron a América pensando que tenían la verdad absoluta y que iban a mejorar la vida de los indígenas, y, aunque es cierto que curaron sus cuerpos con medicinas, inculcaron en sus mentes el miedo al castigo divino, y ya se sabe que el miedo es un poderosa arma de dominación. Y ahora mismo me voy a tu relato para leer tu respuesta a mi comentario, no sabía que me habías respondido. Quedo muy agradecida por tus palabras y me alegra que te hayan gustado mis relatos. Un beso.
Mercedes, excelente imagen de a dónde puede conducir el vicio, en este caso entre la clase privilegiada. Al leer tus cuentos da la sensación de que estás tocada por una varita mágica o que tienes una lupa para describir tan bien todas tus escenas. Creo que se llama talento. Enhorabuena.
Un abrazo.
Que una de las mejores autoras del blog me eche ese piropo me deja casi sin palabras. Muchas gracias, Susana. En verdad, no se trata de magia, sino de leer, leer mucho y sumarle esfuerzo y un pellizco de sensiblidad. Desde que era una enana me recuerdo con un libro entre las manos, los libros son algo maravilloso para mí, me han aportado mucho. Escribir es una forma de agradecer lo que los libros me han dado. Un beso grande.
Ana, un placer que vuelvas a pasarte por aquí. Ahora has interpretado el micro tal y como yo lo interpreto: la huída de si misma y del entorno que la asfixia y la juzga de alguna manera hacia las afueras, ese mundo aparte donde se siente libre, pero que tarde o temprano le acabará pasando factura, también la droga, como evasión del dolor (aunque yo, curiosamente pensé en la cocaína). Madre mía Ana, qué de cosas por ver en el País Vasco, me estoy copiando en un word todo lo que me dices, muchas gracias, guapa. Muakkkk!!!
Imagino que, como a tantos (quizá como a todos), tu ‘visita’ a mi relato me anima a acercarme al tuyo. Magnífico. De hecho, ya lo había leído, aunque no lo había comentado porque acababa de llegar al blog, y preferí esperar…
Pues bien, desde mi primera lectura me ha parecido de lo mejor que se está colgando este mes. Creo que Susana, Nacho y Ana ya lo han dicho todo, pero me gustaría subrayar tu talento al tratar el tiempo narrativo.
Apoyada en un uso envidiable de la frase corta, del trallazo descriptivo en el seno de la narración, vemos desarrollarse ante nosotros toda una historia meramente insinuada en tres momentos descriptivos muy definidos. Aunque alguna frase (incluso el propio título) pueda parecerme algo más gastada que el resto, tan brillante, el conjunto es sencillamente impecable, soberbio.
¡Muchísima suerte!
Vaya, Eduardo, creo que tu comentario supera mi texto con creces jeje. Yo solo escribo, intentando que cada palabra, cada frase, se ajuste a lo que quiero expresar de la forma más precisa posible. Es muy de agradecer que alguien, tan culto y profesional como tú (cosa que deduzco de tu comentario y de tu relato del mes, de hecho, diría que eres filólogo, un buen filólogo mejor dicho)me descubra cosas de mi texto que yo misma había pasado por alto. Realmente es difícil, después de todo lo que se ha escrito, crear algo totalmente fresco y original,tienes razón en que hay elementos como el título, los neones o el asfalto que abundan mucho en la literatura o el cine más reciente. Me encantan las críticas constructivas como la tuya, tengo mucho que mejorar y tus palabras me son de gran ayuda. Me alegra que te haya gustado mi relato. Gracias de nuevo. Un beso.
Buen relato, muy bien contado.
Abrazos. María Rojas
Muchas gracias María, me alegra que te haya gustado. Besos.
Gracias, ya he recibido el correo, lo guardaré para cuando vaya pal norte, eso sí, la visita tendrá que esperar al año que viene porque las vacaciones de verano de este año ya las tenemos decididas desde febrero, hay que ser previsor ;-). Me gusta mucho la lengua, el acento y las costumbres propias de cada lugar y la gente de «alto standing» no me interesa, prefiero tratar con gente buena y sencilla. Besos, Ana.
Vale, una o dos personas, Mercedes una y la princesa Aurora, otra. ¡Qué bien lo vamos a pasaaaaaarrr mandando comentarios a ENTC a altas horas de la madrugadaaaaaaaa!!!!! (Ahora parezco la madrastra mala, jijijijijijijij!!!!!
Mercedes, poco a poco te iré recordando (somos tantos!). A mí me parece un relato casi perfecto, el escenario inicial define a la protagonista y su estatus. Las tres últimas frases, que en definitiva es el conflicto del relato, son para enmarcar. Sospecho que ese BMW te lleva al podium.
Tienes razón Ximens, cada vez hay más autores y yo soy relativamente nueva por aquí, muchísimas gracias por pasarte por los «Bajos fondos» y dejarme tu opinión. Jaja, pues si me lleva al pódium el BMW (cosa que veo muy difícil)tendré que ir de copiloto, porque no sé conducir, así que tú te vienes conmigo de chófer y ganamos los dos jeje. Un beso.
Bueno, Mercedes, parece que hemos ido juntos en el BMW, aunque nos hemos quedado en las puertas del pódium, creo que no fue buena idea atar mi burrita al parachoches. Felicidades.
Jajaja, es verdad Ximens, al final ahí estamos los dos juntos entre los mencionados. Para el mes que viene vamos en furgoneta con Petra dentro y unos cuantos jamones de pata negra para disuadir al jurado ;-). Un beso grande y enhorabuena!!!
Mercedes, dicen los que saben de este oficio, que la literatura no es organizar ideas, sino imágenes y tú hilas una tras otra de manera que el lector apela a su memoria para componer escenarios y escenas que se suceden con una viveza que parece un recuerdo. Vívido a más no poder. Todo un acierto tu estilo, como es costumbre. Enhorabuena.
Ay Rosa, con lo que me gusta a mí tu estilo, que tú me digas estas cosas tan bonitas…es una preciosidad eso que dices de que para reconstruir mi relato apelas a tu memoria, ufff, no sé qué decir. Muchísimas gracias, un beso enoooorme, muak!