MAY56. LA SUITE, de Yolanda Nava Miguélez
Nuevo concierto, otra ciudad. Otra suite que deberá adaptarse a sus exigencias. Todos los muebles serán de cerezo, toallas, albornoces y ropa de cama, llevarán sus iniciales bordadas a mano, y lo más importante: no habrá motivos florares en cortinas ni otros objetos decorativos, aunque en el salón anexo al dormitorio habrá cuatro jarrones con rosas blancas recién cortadas. “Excentricidades de una estrella” pensarán algunos, “caprichillos perdonables” dirán sus incondicionales, “necesidad de controlar su espacio personal, para sentirse segura” afirmarán los psicólogos.
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Nos hablas de las obsesiones que se calman con rituales… la rigidez en el alma de las personas las vuelven tiranas… es una carcel que se construyó desde la infancia, quizás hasta puede ser culpable algún gen… y estas rejas hacen infelices a la misma persona y a quienes les rodean.
Muy bien contado. ¡Felicidades!.
Corrijo: …las «vuelve» tiranas.
Le doy a enviar precipitadamente y luego ya no puedo corregir.
De todas formas aprovecho esta circunstancia JAMS para comentarte que cuando estoy escribiendo, no sé si les pasará a otros, si intento corregir el texto entremedias ya se me redirecciona. No sé si es un problema en mi ordenador… Si puedes informarme… gracias.