05 Nobiscum Deus
Y creces…. y siempre hay gigantes…
Días atrás, en la cabalgata desfilaron en primera línea los gigantes y cabezudos que tanto miedo me provocaban en la niñez, un miedo que sólo se atenuaba aferrándome a las manos de mis particulares ángeles guardianes.
Sonrío: aquellos disfraces escondían personas de carne y hueso…
Días atrás, mi desesperación por ordenar los zapatos me llevó a IKEA y apareció ante mí un gigante vestido de manual y tornillos. Después de dos horas mi ansiedad crecía ante la terrible idea de que me iban a faltar piezas, pero al caer la tarde milagrosamente todas habían encajado y el zapatero quedó instalado en el dormitorio.
Sonrío: era cuestión de seguir las instrucciones…
En la batalla contra los gigantes el conocimiento tiene muchas posibilidades de vencer y si además ángeles con o sin alas te llevan en volandas por la vida, todo resulta mucho más fácil.
Me he venido arriba y voy a necesitar una cohorte de criaturas celestiales porque ayer volví a la tienda y ahora tengo varias cajas repletas de maderas y tuercas; he decidido que voy a redecorar mi apartamento. La avanzadilla de mi ejército son un destornillador y un taladro.
¡ Nobiscum Deus!
identificamos el espíritu de superación como algo asociado a avances, grandes por necesidad, los que derivan de superar enormes dificultades. Sin embargo, a menudo, durante la vida cotidiana, se nos presentan pequeños retos que hemos de superar, no por su tamaño menos importantes. Cuando vemos que podemos hacerlo es como recibir un destello de divinidad, de manera que los obstáculos dejan de existir.
Un relato para extraer lo mejor del interior, la actitud para no amilanarse ante nada.
Un abrazo y suerte, Ana
Gracias como siempre y hago mío el comentario que he visto por ahí, eres un gigante con tus comentarios, no solo porque estás a todas sino por lo acertado de ellos. Un abrazo.
¡Que Deus nos axude! ¡Deus nos colla confesados! Aprovechando el tirón de mis compatriotas Tanxugueiras, y contagiada por tu latín y el humor estupendo de tu relato, me he venido arriba. Hay muchas clases de gigantes y formas diferentes de vencerlos.
Gracias Edita, efectivamente un grito de guerra latino para enfrentarnos con mucho humor a la vida.
Saludos
Igual que construimos nuestros miedos, construimos nuestros gigantes para que luchen entre ellos. A cada edad el suyo, a cada momento uno nuevo o el mismo disfrazado de zapatero y tornillo stronghold. Lucha de gigantes en nuestro interior. Quién iba a decirnos que tenemos tanto espacio dentro. Un relato genial, Ana. Suerte y abrazos.
Tienes razón, hay mucho espacio dentro de cada uno de nosotros y gracias a tu comentario acabo de incluir en el mío mucha información sobre la palabra stronghold, tornillo o videojuego…muy adecuado.
Un abrazo