NOV142. MICRO EPÍSTOLAS, de Laura Garrido Barrera
—Querida Matilde, guardo las cartas suyas que exudan el olor a su perfume de esencias más vivas. ¿Cómo pudo insinuarse así en su última misiva?. Atentamente suyo, Feliciano.
—Querido Feliciano, hay pasiones interiores en una mujer que se desatan alocadamente a la llamada del varón. Me contuve, pero al imaginarle, al leerle con su cuidada prosa ensalzando mis virtudes, no pude por menos que agradecérselo con una parte íntima de mí. Siempre a sus pies.
—Querida Matilde, avivo el fuego que arde en mis venas, la huelo a usted cuando observo el tímido resplandor del sol en un horizonte lejano, y por la noche, un torrente de calor me acompaña hasta el nuevo amanecer. Le envío algo confidencial.
—Querido Feliciano, mis enaguas le gustaron, pero mi marido descubrió las letras de usted en sus pulgueros. Los ha quemado y ha enloquecido. ¿Cómo hará usted para alimentar la llama de este amor que nos subyuga en la distancia? ¡Veinte años de cárcel son demasiados!
—Querida Matilde, nunca me ha preguntado la causa de mi condena. Se la confieso: ¡arderán estos muros el mismo día que usted me posea! Soy pirómano de vocación y pirómano en espíritu.
muy buena idea este fuego epistolar y muy bueno el tono, el modo y las formas que le caen estupéndamente.
si, señor, me gustó
buena idea, insisto
Gracias Luisa. Me alegro que te guste este micro al que le he puesto mucho cariño.
Besos y un abrazo.
La locura
Es tan sólo un puente estrecho
Las orillas son el instinto y la razón
Yo subo hacia ti
La luz del sol confunde el espíritu
Un niño ciego que avanza arrastrándose
Porque olfatea a su madre
La huella es fresca y en el puente
Gotea el sudor, tu sangre caliente
No te veo
Sólo te huelo, te siento
Te percibo desde muy lejos
Hueles tan bien
Hueles tan bien
Voy detrás de ti
Hueles tan bien
Te encuentro
Tan bien
Hueles tan bien
Enseguida te tendré
Ahora te tengo
Yo espero hasta que esté obscuro
Entonces toco la húmeda piel
No me traiciones
Oh tú no ves el puente arder
Escucha los gritos y no te defiendas
Porque de lo contrario se romperá en pedazos
Tú hueles tan bien
Hueles tan bien
Voy detrás de ti
Hueles tan bien
Yo te encuentro
Tan bien
Yo subo hacia ti
Hueles tan bien
Enseguida te tengo
Hueles tan bien
Hueles tan bien
Voy detrás de ti
Hueles tan bien
Hueles tan bien
Te encuentro
Tan bien
Te tomo
Hueles tan bien
Ahora te tengo
Hueles tan bien
Hueles tan bien
Voy detrás de ti
Bueeeno, bueeeno …. ¡qué comentario más jugoso!.
Fíjate que hasta me llega el olor de tus versos.
¡Un comentario que enmarcaré como el más original de cuantos me han escrito!.
Besos Sotirios ¡qué locura más bien poemada!.
Laura, leyendo tu relato me ha venido a la cabeza el canción de Rammstein du riech so gut. El relato es bellísimo y muy original, me ha gustado mucho. Especialmente el final es tremendo. Te deseo mucha suerte amiga, Sotirios.
Ay!, que es una canción (qué no lo sabía) …jajá… pues mira que voy a bajarme esa canción para ver cómo suena porque tiene una pinta estupenda.
Me alegro de que te haya gustado el micro. Muchísimas gracias por tomarte esta doble molestia.
Besos desde mis palabras.
Me gusta la idea de las misivas y por supuesto el contenido.
Muy original.
Besos.
Gracias Yolanda, me alegro de que te gusten estas micro epístolas, y la relación hombre-mujer que traducen en palabras.
Besos querida
Es realmente original para un micro, y reproduces muy bien el estilo epistolar trasnochado de lo que se supone sería la correspondencia entre unos amantes hace ya muchos lustros. Enhorabuena.
Hay amantes que siempre perdurarán en mi memoria. A estos dos, hasta me parece estar viéndolos. Creo que los soñé: él en su celda y ella abrazada a sus pulgueros. 😉
Un besote Ana y muchas gracias.
Genial Laura. Un relato de habla antigua y estilo novedoso y original. Enhorabuena, muy logrado, me ha gustado mucho.
Un abrazo.
Gracias Sara, a ver si esta vez «la innovación y creatividad» tiene un pequeño fruto…jijiji…
Abrazos varios.
Laura, admiro tu originalidad en este relato epistolar que nos va narrando esta historia de dos amantes furtivos, que quizás se encuentren o quizás no, pues el fuego se sabe cuando se inicia pero no cuando acaba.
Además valoro ese léxico de castellano antiguo que has utilizado, muy apropiado con el carácter del relato.
¡Mucha suerte para el concurso!
Besos.
Amigo Nicolás, gracias por tus apreciaciones que sé que salen desde tu yo más sincero. Le puse cariño a este texto (no quiero decir que al resto no se lo ponga) pero a este …¡mucho más!.
Amantes furtivos….ummmmhhh, me gusta eso de «furtivos».
Besos amigo, y mucha suerte para tí también.
Esa vuelta al pasado en forma epistolar me resulta divertida, original y curiosa. Secretos y amores prohibidos anclados en el tiempo, que nos atraen de forma irremediable. Te deseo mucha suerte Laura.
Un abrazo
Divertida, original y curiosa ¡pues qué más quiero, Paloma!. Viniendo de tí, que es difícil sorprenderte,…lo considero un gran premio.
Mucha suerte para tí, querida, y mil besos.
Las cartas siempre me han parecido un medio fantástico para dar rienda a los sentimientos.
Suerte para tu relato Laura
Pienso igual que tú Mei. Me encantan las cartas, y ambientarlas en la época en la que se escriben. Esta es una muestra chiquitina de otras más largas en las que realmente me siento agustísimo escribiendo.
besos Mei y mucha suerte.
Hola Laura, me ha gustado tu relato por ser diferente a todo lo que he leído este mes.
El giro final es sin duda lo mejor.
Te deseo mucha suerte. Te has hecho esperar hasta el final pero ha valido la pena leerte.
Saludos
Hola jose Angel, muchas gracias. Me he hecho esperar porque las cosas llevan su tiempo …y esta ha sido fruto de la madurez de la «fruta madura» del mes anterior, y de las «tres estrellas» y de … un tiempo de maduración que hasta me ha parecido exagerado.
Mucha suerte para tí y un beso muy grande.
Me ha gustado tu relato Laura, pero me ha sorprendido que nadie te pregunte por los pulgueros. O los compis son muy listos o yo muy joven. La disyuntiva no es la adecuada pero a mi me gusta,
¿ Los pulgueros son los calzoncillos largos de nuestros abuelos ?.
Gracias y un beso
Si, pero normalmente se dice en Puerto Rico y Miami.
Los ¡¡pulgueros!!. Bueno, son unos calzoncillos largos hasta los tobillos y yo lo he escuchado en España, en boca de mis abuelos, e incluso en literatura cercana.
Mi hijo por ejemplo, no sabe lo que significa, por ser una palabra claramente en desuso, pero que me pareció muy apropiada para hacer compañía a esas enaguas. 😉
Un beso, y ¡gracias por la pregunta!, me encanta resolver dudas y procuro contestar siempre.
Mucha suerte este mes y un gran abrazo.
No te asustes, lo primero. No soy Freddy, ni Scream, ni uno de los niños del maíz. Tampoco vivo enfrente ni te espío. Te leo, que no es poco en estos tiempos que corren. Y no he de pedir perdón por no poner mi nombre que es lo todos deberíamos hacer en esta alfombra roja jabonosa y resbaladiza de los comentarios. No doy mi nombre por respeto a los que no he escrito y debería haberlo hecho. Así de simple. No hay más cocos. Paso como el Jalei (de jaleo) por este blog y en mi viaje elipsoide me encuentro con todo ese jaleo- insisto- que se ha montado aquí a costa de un anónimo , que en mi caso es
por un comedido respeto a los demás, como te digo
Tu relato: tiene algo que gusta desde el principio. Entre lo más fácilmente identificable: frescura y novedad . Sencillo es. Y por eso es más perfecto. En él se transparenta claramente tu proceso. En p. lugar: Talento, que lo recorre todo valiéndose de un cuidadoso estilo. (el medio epistolar que has escogido ya es un valor que lo adereza no poco). En segundo lugar:Inspiración.. Se palpa ese momento.
Y por último : Trabajo. Como veo que sabes, todo relato tiene un final chistera, un truco final. La inevitable sorpresa que, de no tenerla, flaquearía el texto. Y hasta él nos conduces con ese saber hacer
que bien conoces y que los que te leemos apreciamos. Nos guste o no esta historia, la cantidad de trabajo y riguroso cuidado por centímetro cuadrado que nos presentas, se hace patente.
Puedes llamarme Litereitor si quieres, por decir algo. ( más que nada para contentar a esas almas
en pena que recorren y patrullan sin descanso este preciado blog). No hace falta que me contestes (no está bien visto hablar con desconocidos. A mí, sin embargo, me encanta. Todos mis amigos lo fueron alguna vez). Un abrazo
Lo primero de todo : no estoy asustada y aunque no acostumbro a contestar a voces anónimas, he de decirte que tu tono y tu sinceridad no me han disgustado, Litereitor.
Tu comentario es largo y has destacado el valor que yo más admiro : ¡¡el trabajo!!. Sobre el talento y la inspiración no tenemos la llave mágica que nos otorgue ambos dones, así que mi confianza siempre reside en el curro. En este lugar se encuentran personas que «trabajan la literatura creativa» desde muchísimos ángulos y puntos de vista, y hay un montón de buenos trabajadores del microrrelato que se nutren de experiencias propias y ajenas para consolidar su arte creativo. Es lo que más vale y lo que yo más admiro. ¿Escribes?. Si lo haces, sabrás de que te hablo.
Te agradezco muchísimo este comentario de más de 250 caracteres 😉 y nada sé del revuelo anónimo que se ha montado. Pero este fin de semana, con más tiempo, comprobaré de qué hablas.
De momento: muchas gracias y un abrazo Litereitor.
A tu altura. Sé de qué me hablas. Cuando en algunos autores se aprecian ciertos procesos, hablamos de un escritor a tener en cuenta. Muchas gracias por no asustarte! un abrazo
Me ha gustado mucho tu micro, Laura.
He entrado al azar y él me ha conducido directamente aquí. Pura cuestión de suerte pero ha sido una delicia leerte.
Estoy completamente de acuerdo con Litereitor (tu anónimo admirador). Yo también te admiro por ese micro. No sé si todos los que escribas serán igual pero este ha sido muy bueno.
Suerte.
Gracias Ricardo. Ójala todas las semillas de las plantas de mi jardín de palabras, fueran iguales a esta. Desgraciadamente, siempre que se escribe, no se encuentra igual sentido a las palabras y siempre que se concursa, iguales premios.
Este mes : me llevo varios premios. Los de los amigos infatigables que se han pasado por aquí ain haber publicado la entrada en mi blog personal. La canción que me indica Sotirios. Un admirador llamado Litereitor y un nuevo seguidor (181) que lleva nombre de León. 😉 ¿Qué más puedo pedir?. El azar hizo que llegaras hasta aquí y te lo agradezco muchísimo.
Un abrazo y mucha suerte en este concurso.
Muchas gracias Ana.
Mucha suerte también para tí. Besos.
Me parece una idea muy buena, esta de las micro epístolas. Besos de suerte, Laura.
Gracias Fernando.
A ver si con estas micro epístolas tengo más suerte que en los meses anteriores.
Besos.
Poco más que decir. Original, atrevido, bien trabajado, muy buen resultado. Y me hiciste aprender la palabra pulguero. Gracias y suerte.
Un saludo indio
Mitakuye oyasin
Gracias David, me alegro de que hayas ampliado tu vocabulario ¿es graciosa la palabreja verdad?.
Besos desde este espacio.
Es un amor antiguo, pero muy de ahora, no por furtivo, ni porque sea través de la escritura como hoy siguen alimentándose muchos, sino, por lo que tiene de fetichista. Una tendencia muy de nuestros tiempos. Me gusta mucho. Y me parece que tiene mucho de erótico. Vamos, que me he vuelto a duchar. Esta vez sin agua caliente.
Un beso, Laura.
Gracias Miguel Angel. Apuntas esa nota fetichista que quise reflejar a través de las enaguas y los pulgueros, y me alegro de que seas el primer comentarista que lo observa. Gracias por tu lectura atenta y por este comentario tan chulo. ¿Qué tal la segunda ducha? …jajá…
Venga, un beso y suerte.
Me temo que Matilde no va a encontrar la redención de Feliciano, más bien será la causante de su vagar con la permanente condena.
De cualquier manera, con la cantidad de camas semivacías que hay hoy en día, supongo que Feliciano tendrá capacidad si lo quiere de reciclar su cualidad.
Muy simpático carteo, conserva ese aire de misterio que envuelven los contactos alimentados con anhelo y deseo.
Yo este mes no participo.
¡¡Suerte!!
Pues uno de los micros que «faltaban» debía ser el tuyo Enmascarado. Gracias por tu comentario y por apuntar el aire misterioso con el que quise dotar al micro.
Nos leemos ¿vale?. Un beso para tí.
Me encantan los relatos en forma de carta y el tuyo es una delicia.
Espero que tengas mucha suerte.
Besicos muchos.
Gracias bonita,
me alegro de que te haya gustado y un beso para tí muy fuerte.
Llego un poco tarde, se me había pasado…
Qué lo sepas me ha gustado un «mogollón» porque el genero epistolar fue como mi inicio en el mundo de la escritura, algún día explicaré por qué…
Por aquí en vez de pulgueros los llamamos calzoncillos de pata larga…
Suerte amiga, besicos
Gracias Cabopá!!, ese ¡mogollón! me ha llegado muy dentro. 🙂
No te olvides de explicarnos el origen de tu escritura ¡estoy ansiosa!. Y lo de pulgueros, pues parece que es un término no muy conocido por todos, por lo que he visto por aquí.
Un besote querida.
Muy original tu texto Laura. Me ha gustado mucho.
Besos desde el aire
Gracias Rosa. Me alegro de que te haya gustado.
Besos desde la tierra de estos senderos.
Me ha parecido muy original las microepístolas. El final es digno broche de un micro. Esa relación tórrida no tiene desperdicio y uno siente por el pirómano y la enamorada un simpatía que es muy difícil de explicar. Y esos dos algún día llegan a encontrarse te aseguro yo que la cosa arde, literalmente. Un beso.
Gracias Mar, te agradezco un montón este comentario doble, aquí y en mi blog. Esa extraña sensación que se siente por los personajes suele ocurrir cuando se escribe en lenguaje epistolar porque las primeras personas consiguen que el lector actúe en un paralelo tomando parte a ambos lados de la historia.
Si se encuentran ¡arderán!, ¡estoy segura!.
¡Gracias Mar y un beso incendiado!.
Muy original y con un léxico muy apropiado para la época en que se sitúan las cartas.
Laura, te felicito por esta aportación y espero que tengas suerte.
Un abrazo de Mos desde la orilla de las palabras.
Oh! Mos …muchas gracias … ¡hace días que no puedo leerte porque he estado … a medias!. Ya estoy mejor, y ando por aquí y por allí, de nuevo algo ‘revoltosa’ e inquieta.
Muchas gracias por dejar este comentario aquí, ¡me hace ilusión leerte y además, creo que te ha gustado!.
Besos desde este espacio tan acogedor.
Me encantó señora escritora. Tus cartas se encuentran muy próximas a las epístolas de Lope de Vega :))
un abrazo
Gracias Esi, es un super-halago que me digas que se encuentran cercanas a las letras de un ilustre. ¡Que no será para tanto! pero con el cariño que les puse, pues que me gusta incluso escucharlo. Esto ya es un premio en sí mismo.
Besos querida, y un abrazo.
Me gustan las altas temperaturas tus epístolas, ahora que son ya casi prehistoria, es un gusto leer cartas tan sugerentes. Muy logrado el lenguaje y el tono de los amantes. Me parece una propuesta muy original. Y para mí también es nuevo lo de pulgueros, yo los conocía como «calzoncillos marianos» ¿¿??
Un abrazo y mucha suerte.
Sí Nieves, los calzoncillos «marianos» es la otra acepción familiar, para designar los «pulgueros».
Me alegro de que te hayan gustado estas epístolas ¡radiantes de calor en noviembre!.
Recibe un abrazo muy fuerte y un beso para tí.