NOV75. EL DISCURSO DEL PREMIO NOBEL, de Paloma Hidalgo Díez
Quise demostrarme que el suspenso que había obtenido en manualidades era injusto y elegí fabricar un caza mariposas. No quedó perfecto, no obstante, ilusionada salí a probarlo esa misma tarde. Sin embargo, los lepidópteros parecían inmunes a la malla de mi obra; tanto como las moscas, grillos, lagartijas o ranas.
Sin desesperarme intenté diversificar mis capturas, probé con mis sueños, pero volátiles unos y demasiado grandes otros, no pude capturar ninguno.
Quise saber si servía para retener momentos de felicidad. Y no, no servía. A esos, donde les gusta instalarse es en el corazón.
No pude atrapar ni otoños, ni primaveras. Ni sonrisas. Ni tan siquiera lágrimas. Y seguí creciendo con el propósito de capturar rayos de luz, aromas, o alguna de mis quimeras. Y la red siguió vacía.
Cuando me rendí y lo cogí para tirarlo a la basura, descubrí que estaba lleno de palabras. De mis palabras. De todas las historias que inventé con ellas en tardes de siesta, en noches de tormenta y en aburridas clases de matemáticas. Y decidí en ese mismo instante que sería escritora.
Reitero mi más sincero agradecimiento.
Me rindo a tu creatividad. Alucinante.
Un beso, escritora (de una mortal aficionada).
😉
No, no, que es al revés, que la mortal aficionada soy yo.
Muchas gracias, maestra.
Un beso
Pues sencillo y evocador. Una simple mirada hacia dentro para sacarla fuera. En definitiva es un amasijo de palabras que encadenadas de forma metódica y musical hacen que nuestros oídos estén regalados con tus palabras. Bueno, las del premio nobel. Saludos.
Un canto a las palabras, eso me gusta Fco Manuel.
Un abrazo agradecido a la visita.
Hola, Paloma.
¡Qué bonita historia acerca de las palabras!
Me encantó.
Un abrazo.
Hola Towanda,
Muchas gracias por comentar.
Otro para ti.
Paloma, has cazado un relato buenísimo. Saludos y suerte.
Gracias Salvador. Miraré dentro otra vez, no vaya a ser que tenga más relatos escondidos…
Saludos
Realmente si un premio nobel contase esto que dices, dejaría maravillado al personal.
Un abrazo.
Al menos coincide con ellos en una cosa: los agradecimientos finales.
Un abrazo y gracias por comentar.
El próximo que gane el premio Nobel de Literatura, te contrata para que le escribas el discurso 🙂
Muy hermoso, Paloma, como siempre.
Un abrazo.
Gracias por venir Sara. Y por tu simpatía,
Un abrazo
¡Muy ingenioso, Paloma! Es una historia preciosa, con tintes de poesía y que posee un cierre magnifico.
Aquí mi aplauso, como si estuviese entre las autoridades suecas y premiados al nobel.
¡Suerte para el concurso!
Besos.
Nicolás, muchas gracias por comentar y hacerlo con tanta amabilidad. Yo me quito el sombrero (una chistera preciosa que he encontrado en tu blog)
Un beso
Me ha gustado tu magnífico relato, tu lenguaje es muy claro, conciso y poético.Voy a conocerte en tu casa.
Un abrazo.
Yo también pasé por tu pueblo…
Muchas gracias por comentar Belén, y por esa visita a mi jardín.
Otro para ti.
Muy imaginativo y bien contado. Precioso. Suerte y saludos
Gracias Juana.
La imaginación y yo somos buenas amigas, para mi fortuna.
Saludos
Paloma, fantastico relato. Muy original, me ha encantado de principio a fin.
Un saludo.
Que hayas encontrado original mi relato, con el tema propuesto para el mes, me llena de alegría.
Saludos y gracias por comentar
Paloma, que conjunto de palabras, frases, pensamientos tan bonitos, me hubiera encantado que se me hubieran ocurrido a mí.
Un beso
Como siempre, leer tus comentarios es una inyección de optimismo.
Te lo agradezco mucho.
Otro para ti.
Quizá me sobre la frase final, por el resto un relato muy tierno y hermoso.
Miguelángel, con la frase final lo que pretendo, como ya he dicho por ahí arriba, es que coincida con el afortunado( real) en algo: en los agradecimientos.
Gracias por comentar
🙂
Bonito relato, soñador. Saludos.
Gracias Ana, Saludos
En efecto, soñador y original relato. A mi entender, no obstante, le sobra la despedida final que, supongo, debe casar con un título que tampoco me parece que le haga justicia. Un feliz hallazgo, pese a todo. Envidia que me das… Un saludo.
Para no repetir lo dicho, mira guas arriba en los comentarios para encontrar l razón de la frase.
Y para lo de la envidia… lo siento, no se me ocurre cómo puedo ayudarte. Pero prometo pensarlo y si llego a dar con el sistema eficaz, volver para contártelo.
Saludos
Paloma, pero qué bello relato de reencuentro de este frustrado inventor de objetos con su verdadera vocación que siempre está esperando que la veamos. Abrazos!
Eso es cierto, la verdadera vocación se dedica a hacernos guiños hasta que un día, con suerte, le hacemos caso.
Un beso y gracias por venir.
Paloma, coincido con mis compañeros, bonito y bien contado. Suerte y saludos
Gracias por comentar una vez más Calamanda.
Saludos 🙂
Me ha encantado, Paloma. He leído los relatos de tu blog y a pesar de su brevedad, llegan. No te dejan indiferente. Es fácil para mí verme identificada en más de uno. Felicidades, y toda la suerte que mereces. Un beso.
Tu visita me hace mucha ilusión, y tus palabras me emocionan.
Un abrazo fuerte fuerte para ti.
Pues si que es bonico, sí. Es algo así como encontrarse la pelusilla de los calcetines pegada a los pies. Mucha suerte, Paloma.
Abracísimos.
Caramba, me dejas pensando si las pelusillas provienen de un mullido calcetín blanco, o sí por el contrario tienen su origen en uno negro, gastadillo ya.
Y te confieso que nunca se me habría ocurrido pensar en la belleza de esas pelotillas, jamás.
Gracias por venir.
Cazadora de sueños, y de palabras, y de historias; escritora.
Un abrazo.
Marta López
Qué bonito Marta, qué bonito.
Muchas gracias,
Un abrazo
Agradecida a ti por tan buen relato.
Abrazos
Un abrazo María, gracias por leer y comentar.
Oh! Muy bonito el relato, Paloma! Me ha gustado, hay que patentar ese atrapapalabras!!
Un saludo! 😉
Gracias Miguel Ángel, me gusta que te guste. Mira que hay palabras y voy a elegir la misma. 🙂
Eso, patentémoslo.
Saludos.
Qué bien has descrito el trabajo de escribir con palabras sencillas e imágenes preciosas. Me gustaría encontrar un caza mariposas como el tuyo algún día y saber llenarlo como tú lo haces.
Suerte y saludos.
A ti te hace poca falta Rafa, tus historias son estupendas.
Muchas gracias,
saludos
A mí me parece un homenaje metafórico de Paloma para entc en el papel de jurado. Siempre tan hábil como para hacer un cuento de cualquier cosa. Me ha gustado mucho.
Un abrazo.
Y tú siempre tan creativa a la hora de comentar. ¡Así da gusto!
Es una alegría saber que te ha gustado.
Un par de ellos para ti.
No me ves, pero me has sacado los colores… Muchas gracias Ana, me alegro de que te guste.
it, arap néibmat soseb sod
Paloma, un relato de descubrimiento. Muchas veces hay que pasar por todos esos intentos de realizaciones para descubrir lo que realmente te gustaría ser. Si en vez de «demostrarme» fuera «demostrarte» podría ser lo que una hija diría al padre que quiere que estudie lo que él. En fin, un bien trabajo, y no te olvides de pinchar en la publicidad, si no nuestro sueño puede esfumarse.