74. Número Siete
Todo se apaga. Lo apagan. Un esclavo que falla es un esclavo que malgasta oxígeno. El nuevo tardará un par de días: más preparado, más eficaz, menos humano. El silencio es doloroso. Cuesta respirar. Pienso en dejarme ir, pero no aquí dentro. Me pongo el traje espacial y salgo por la escotilla de emergencia.
Veo la Tierra. Preciosa desde tan lejos, entre chatarra.
Hace frío aquí afuera. Me gustaría estar en casa, junto al fuego.
Tres minutos de oxígeno. Tres minutos para estar flotando, inerte, como ellos seis. Al menos no moriré solo, aunque sea el único que aún respira.
El silencio del espacio debe ser sobrecogedor, no existe mejor lugar para fundirse con la pura nada en un silencio definitivo, eterno. Tu protagonista es el último de una expedición fallida. Conoce su final y termina con la mayor dignidad posible, de nada sirve lamentarse ante lo inevitable
Un abrazo, suerte y feliz año, Rafa